PRINCIPIOS DE LA DOCTRINA BÍBLICA

LECCIÓN 1:

LA NATURALEZA DE LA RELIGIÓN

La Biblia nos dice que el hombre fue creado a la imagen de Dios y que aun, cuando cayó en pecado esta imagen del Alto Dios no fue borrada completamente ni o cesó el hombre de ser el portador de esta imagen.
A pesar de que la naturaleza pecaminosa del hombre reaccione contra ella, la simiente de la religión está implantada en cada hombre y los misioneros dan testimonio de que la religión, expresada en una forma u otra, se encuentra en todas las naciones y tribus de la tierra. Lo que muchos denuncian como una maldición o el «opio del pueblo» es una de las mayores bendiciones que la humanidad ha experimentado.
 La religión no tan sólo afecta lo más profundo de la vida humana sino que controla también sus pensamientos, sentimientos y deseos.
¿Qué cosa es pues la religión? Solamente a través del estudio de la Palabra de Dios podremos comprender la naturaleza de la verdadera religión.
La palabra «religión» proviene no de los originales bíblicos, el griego y el hebreo, sino del latín. En nuestra traducción de la Biblia la encontramos cuatro veces, Hechos 26:5, Santiago 1: 26-27.
El Antiguo Testamento define a la religión como «el temor de Jehová». Este temor no es un sentimiento de terror, sino un respeto reverente a Dios. Es un temor al que acompañan en amor y la confianza. Es esta la respuesta del creyente del Antiguo Testamento a la revelación de la Ley.
En el Nuevo Testamento es más bien la respuesta al Evangelio que a la ley, y se presenta bajo la forma de la fe y la piedad.
Las Escrituras nos enseñan que la religión es una relación del hombre para con Dios en la cual el ser humano se da cuenta de la majestad absoluta y el poder infinito de Dios, a la par que de su propia pequeñez e insignificancia y de su completa impotencia.
Podemos pues definir a la religión así: Una relación con Dios voluntaria y consciente, que se expresa en una adoración rebosante de gratitud y en un servicio lleno de amor. La forma de esta adoración religiosa y servicio a Dios, no es el producto de la voluntad arbitraria del hombre, sino que ha sido determinada por Dios mismo.

LA FUENTE DE LA RELIGIÓN

Hay ciertos puntos de vista erróneos sobre la fuente de la religión en el hombre.
Algunos hablan de la religión como si fuera un conocimiento que reside en la inteligencia. Otros opinan que es un sentimiento de la proximidad de Dios y lo localizan en la zona psíquica del sentimiento, mientras que otros ponen su énfasis en la actividad moral del hombre y hablan de la voluntad.
Todas estas opiniones son parciales y contrarias a las Escrituras, quienes nos enseñan que la religión tiene que ver con el corazón. En la psicología bíblica encontramos que el corazón es el órgano central del alma. Es del corazón de donde mana la vida, los pensamientos, sentimientos y deseos, Proverbios 4:23. La religión comprende todas las facultades del hombre, intelectuales, emotivas y morales. Esta es la única opinión que se ajusta a la naturaleza de la religión.

EL ORIGEN DE LA RELIGIÓN.

Durante los últimos cincuenta años se ha estudiado cuidadosamente la cuestión del origen de la religión. Se trató de dar explicaciones naturales de la misma, pero sin éxito. Algunos hablaron de ella como la invención de sacerdotes astutos y engañosos que trataron de hacer de ella y en tiempos primitivos, una fuente de ingresos, pero hoy día esta explicación ha perdido todo su valor.
Otros afirmaron que la religión empezó con la adoración de objetos inanimados (fetiches), o con la adoración de los espíritus de los antepasados. Sin embargo esta explicación no llegaba a resolver el 'problema de cómo se llegó a esta adoración de objetos inanimados o vivientes. Hubo quienes opinaron que la religión se originó con la adoración de la naturaleza, es decir, de sus maravillas y poderes o con la práctica de la magia.
El defecto esencial de todas estas teorías es que no nos dicen cómo el hombre llegó a convertirse en un ser religioso y todas empiezan con el concepto de un hombre ya religioso.
La Biblia nos da el verdadero y único relato sobre el origen de la religión. Primero nos habla de la existencia de Dios, el único objeto digno de adoración. Luego afirma y asegura que Dios, a quien el hombre jamás pondría descubrir por sus capacidades naturales, se reveló primero en la naturaleza y de un modo especial en su divina Palabra.
Este Dios, afirma la Biblia, exige la adoración y servicio del hombre y asimismo define la clase de adoración y servicio que le agrada. Finalmente, la Biblia nos enseña que Dios creó al hombre a su imagen y semejanza, y que con ello lo capacitó para comprender y responder a su revelación y que al mismo tiempo engendró en él, un deseo natural de buscar la comunión con Dios, y glorificarle.

PARA APRENDER DE MEMORIA ACERCA DE LA NATURALEZA DE LA RELIGIÓN:

1. Deut. 10:12-13. «Ahora pues, Israel, ¿qué pide Jehová tu Dios de ti, sino que temas a Jehová tu Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas a Jehová tu Dios con todo tu corazón, y can toda tu alma; Que guardes los mandamientos de Jehová y sus estatutos, que yo te prescribo para que hayas bien ?»
2. Sal. 111:10. «El principio de la sabiduría es el temor de Jehová. Buen entendimiento tienen cuando ponen aquellos por abra; su loor permanece para siempre.»
3. Ec. 12:13. «Teme a Dios y guarda sus mandamientos; porque esta es el toda del hombre.»
4. Juan 6:29. «Esta es la abra de Dios, que creáis en el que él ha enviada.»
5. Hechos 16:31. «Y ellas le dijeron: Cree en el Señor Jesucristo y serás salvo tú, y tu casa.»

LA FUENTE DE LA RELIGIÓN:

1. Sal. 51:10, 17. «Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio: Y renueva un espíritu recta dentro de mí. Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón contrito y humillado no desapreciarás tú, oh Dios».
2. Prov. 4:23. «Sobre toda cosa guardada guarda tu corazón parque de él mana la vida.»
3. Mateo 5:8. «Bienaventurados los de limpio corazón: porque ellos verán a Dios.»

EL ORIGEN DE LA RELIGIÓN:

1. Génesis 1:27. «Y crió Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios la crió.»
2. Deut. 4:13. «Y él os anunció su pacto, el cual as mandó panel' por abra, las diez palabras» (a mandamientos).
3. Ezequiel 36:26. «Y as daré corazón nueva, y pondré espíritu nueva dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y as daré corazón de carne. »

LA REVELACIÓN - PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL

1. ¿Qué elementos de la verdadera religión se encuentran descritos en los pasajes siguientes? Deut. 10: 12; Ec. 12:13; Os. 6:6; Miq. 6:8; Mr. 12:33; Jn. 3:36; 6:29; Hch. 6:31; Ro. 12:1; 13:10; Stg. 1:27.
2. ¿Qué prácticas de la falsa religión nos describen los pasajes siguientes? Sal. 78:35-36; Is. 1:11-17; 58: 1-5; Ez. 33:31-32; Mt. 6: 2, 5; 7:21, 26~27; 23:14; Le. 6:2; 13:14; Ga. 4:10; Col. 2:20; 2 Ti. 3: 5; Tít. 1:16; Stg. 2:15-16; 3:10.
3. Cite seis ejemplos de la verdadera religión Gn. 4: 4-8; 12:1-8; 15:17; 18:22-23; Éx. 3:2-22; Deut. 32:33; 2 R. 18:3-7; 19:4-19; Dn. 6:4-22 Le. 2:25-35, 36-37; 7: 1-10; 2 Ti. 1:5.

PREGUNTAS PARA REPASO

1. ¿Está limitada la religión a ciertas tribus o naciones?
2. ¿Cómo podemos aprender a conocer la naturaleza de la verdadera religión?
3. ¿Qué palabras se usan en el Antiguo y en el Nuevo Testamento para describir la religión?
4. Defina lo que es religión.
5. ¿Qué conceptos equívocos existen acerca de la fuente de la religión en el ser humano '?
6. Según las Escrituras, ¿cuál es el centro de la vida religiosa?
7. ¿Qué diferentes explicaciones se han dado sobre el origen de la religión?
8. ¿Cuál es la única explicación satisfactoria?

LECCIÓN 2:

LA REVELACIÓN EN SÍ.

El estudio de la religión nos conduce al estudio del origen de la revelación. Si Dios no se hubiera revelado, la religión sería imposible. Si Dios no se hubiera dado a conocer, el hombre no habría tenido ningún conocimiento de Dios, y por sí mismo, jamás hubiera llegado a descubrir a Dios. En este estudio distinguiremos la revelación de Dios en la naturaleza, y su revelación en las Escrituras.
Los ateos y los agnósticos no creen en la revelación. Los panteístas hablan de ella algunas veces, aún cuando no tienen lugar para ella en su sistema filosófico. Los deístas admiten que Dios se revela en la naturaleza pero niegan la necesidad, la realidad y hasta la posibilidad de una revelación especial, tal como nos es dada en las Escrituras. Nosotros creemos, en cambio, en una revelación general y en otra especial

LA REVELACIÓN GENERAL

La revelación general difiere de su revelación especial solo en lo que se refiere al tiempo. Esta revelación no nos es dada en forma de comunicación verbal, sino en los hechos, fueras y leyes de la naturaleza, en la constitución y operación de la mente humana y en los hechos de la experiencia y la historia. La Biblia nos habla de ella en tantos pasajes como: Sal. 19: 1-2; Ro. 1:19-20; 2:14:15.

LA INSUFICIENCIA DE LA REVELACIÓN GENERAL

Mientras los Pelagianos, los Racionalista, y los Deístas consideran esta revelación como suficiente para nuestras necesidades presentes, el católico-romano y las Iglesias protestantes están de acuerdo en que no es suficiente.
La mancha del pecado que cayó sobre la creación obscureció esta revelación. A pesar de todo, la imagen del Creador no quedó completamente borrada del hombre, sino que se hizo nebulosa e indistinta. En la actualidad no nos proporciona un conocimiento seguro de Dios y de las cosas espirituales, y por lo tanto no puede darnos un fundamento seguro sobre el cual podamos edificar para nuestro futuro eterno.
La insuficiencia de esta revelación natural está demostrada en la confusión que reina entre aquellos que tratan de fundar su religión sobre una base natural. Si tal revelación no es un fundamento adecuado aún para la religión en general, cuanto menos para la verdadera religión.
De hecho, hasta los pueblos paganos apelan a alguna supuesta revelación natural.
Finalmente, esta revelación fracasa completamente en lo que se refiere a llenar las necesidades de los pecadores. Aún cuando nos da cierto conocimiento de la bondad, la sabiduría y el poder de Dios, no nos da conocimiento alguno de Cristo como el único camino de salvación.

EL VALOR DE LA REVELACIÓN GENERAL

Lo dicho anteriormente no significa que la revelación general no es de valor alguno. Esta revelación explica los elementos verdaderos que todavía se encuentran en las religiones paganas. Por razón de esta revelación, los gentiles sienten que son linaje de Dios, Hechos 17:28, y buscan a Dios, si en alguna manera, palpando, le hallen, Hechos 17:27, contemplan en la naturaleza su eterno poder y divinidad, Ro. 1: 19-20, y hacen, por naturaleza las cosas de la ley, Ro. 2: 14.
El hecho de que los paganos vivan en la oscuridad del pecado y la ignorancia, y corrompan la verdad de Dios, no les impide de que, en cierto modo, participen en la iluminación de su Palabra, Juan 1:9 y en la obra general de su Espíritu, Gn. 6 :3.
Al mismo tiempo, la revelación general de Dios establece un antecedente para su revelación especial. Esta no pondría ser enteramente comprendida sin aquélla. La ciencia y la historia iluminan las páginas de la Biblia.

LA REVELACIÓN ESPECIAL

Además de la revelación de Dios en la naturaleza tenemos su revelación especial encerrada en las Escrituras. La Biblia es el libro de la revelación especial de Dios. Esta es una revelación en la que las palabras y los hechos se completan mutuamente; las palabras interpretan los hechos y éstos acreditan las palabras.

NECESIDAD DE LA REVELACIÓN ESPECIAL

La entrada del pecado en el mundo hizo necesaria esta revelación especial. La visión de la mano de Dios, que hasta entonces se había revelado en la naturaleza, fue obscurecida y corrompida. El hombre quedó ciego espiritualmente, sujeto al error y a la incredulidad.
Aun ahora su ceguera y perversión le impiden de interpretar correctamente los vestigios que quedan de la revelación original, y se halla incapacitado totalmente para comprender cualquier revelación divina posterior. Era pues necesario el que Dios re-interpretara las verdades de la naturaleza, proveyera una nueva revelación de Su redención e iluminara la mente humana y la redimiera del poder del error.

LAS FORMAS DE LA REVELACIÓN ESPECIAL

Dios dio su revelación especial al hombre en diferentes formas:
1. Teofanías o manifestaciones visibles de Dios. Dios reveló su presencia en forma de fuego y de nubes, Éx. 3: 2; 33: 9; Sal. 78: 14; 99:7; en vientos tempestuosos, Job 38:1; Sal. 18:10-16, y en un silbo apacible y delicado, 1ª Reyes 19: 12.  Todas estas eran manifestaciones de su presencia, que daban a conocer algo de su gloria. Entre las apariciones del Antiguo Testamento, son muy prominentes las del Ángel de Jehová, la segunda persona de la Trinidad, Génesis 16: 13 y 31:11; Hech. 23: 20-23; Mal 3: 1.  El punto más sublime de la revelación de Dios a los hombres fue la encarnación de Jesucristo. En él, la Palabra de Dios se hizo carne y habitó entre nosotros. Juan 1:14.
2. Comunicaciones directas Algunas veces Dios habló a los hombres directamente como a Moisés y al pueblo de Israel, Deut. 5:4 y otras veces por mediación de los profetas por medio de la operación interior de su Santo Espíritu, 1ª Pedro 1: 11.  En otros casos se reveló por mediación de sueños y visiones y también por el Urim y el Tummin, Núm. 12:6, 27:21 Isaías 6. En el Nuevo Testamento encontramos a Jesucristo como el Divino Maestro enviado para revelar la voluntad de su Padre y por su Espíritu los apóstoles se convirtieron en órganos de revelaciones posteriores, Juan 14 ;26; 1ª Cor.. 2: 12-13; 1ª Tes. 2:13.
3. Los milagros; Los milagros de la Biblia no deberían ser nunca considerados como meras maravillas para llenar a los hombres de asombro sino como partes esenciales de la revelación de Dios. Son manifestaciones de un poder divino especial, y de la presencia de Dios en un modo particular. En muchos casos son símbolos de verdades espirituales, de la venida del Reino de Dios y del poder divino para la redención. El mayor de los milagros fue la venida del Hijo de Dios en forma humana. Es en Cristo que la creación entera es restablecida y restaurada a su belleza original. 1ª Tim. : :16; Apoc.21: 5.

EL CARÁCTER DE LA REVELACIÓN ESPECIAL

Esta revelación especial de Dios nos habla de la redención. Nos enseña el plan de Dios para la redención de los pecadores y del mundo, y la manera en que este plan se lleva a cabo. De un modo especial renueva al hombre, ilumina su mente y le inclina a hacer el bien, lo llena de santas aspiraciones y lo prepara para el hogar celestial.
Esta redención nos es presentada como un hecho que no tan sólo enriquece nuestros conocimientos, sino que transforma las vidas de los pecadores y los hace santos. Tal revelación es progresiva. Las grandes verdades de la redención aparecen primero muy oscuras, pero gradualmente se esclarecen hasta que en el Nuevo Testamento aparecen con toda su belleza y plenitud.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA SOBRE LA REVELACIÓN GENERAL

1. Sal. 8: 1. «Oh Jehová, Señor nuestro, cuán grande es tu nombre en toda la tierra»
2. Sal. 19:1-2. «Los cielos cuentan la gloria de Dios, y la expansión denuncia la obra de sus manos. El un día emite palabra al otro día, y la una noche a la otra noche declara sabiduría.»
3. Rom. 1: 20. «Porque las Cosas invisibles de él, su eterna potencia y divinidad, se echan de ver desde la creación del mundo, siendo entendidas por las cosas que son hechas.»
4. Rom. 2: 14-15. «Porque los Gentiles que no tienen ley, naturalmente haciendo lo que es de la ley, los tales, aunque no tengan ley, ellos son ley a sí mismos.
Mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio juntamente sus conciencias, y acusándose y también excusándose sus pensamientos unos con otros.»

LA REVELACIÓN ESPECIAL

1. Núm. 12: 6-8. «Y él les dijo: Oíd ahora mis palabras: Si tuvieres profeta de Jehová le apareceré en visión, en sueños hablaré con él. No así a mi siervo Moisés, que es fiel en toda mi casa. Boca a boca hablaré con él.»
2. Heb. 1:1. «Dios, habiendo hablado muchas veces Y en muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros tiempos nos ha hablado por el Hijo.»
3. 2ª Pe. 1: 21. «Porque la profecía no fue en los tiempos pasados traída por voluntad humana, sino los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados del Espíritu Santo.»

PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL

1. Mencione algunas de las apariciones del Ángel de Jehová. ¿Podía haber sido un mero ángel? Gen. 16: 33; 31:11, 13; 32:28; Éx. 23:20-23.
2. Cite algunos ejemplos de la revelación por medio de sueños. Gen. 28: 10-17; 31: 24; 42: 2-7; Jueces 7: 13; 1ª Reyes 3: 5-9; Dan. 2:1-3; Mat. 2: 13, 19-20.
3. Mencione casos en los que Dios se reveló en visiones. Isaías 6; Ezequiel 1-3; Dan. 2: 19; 7: 1-14; Zac. 2-6.
4. ¿Puede usted deducir lo que nos revelan los siguientes milagros? Éx. 10:1-2; Deut. 8:3; Juan 2:1-11; 6:1-14,25-35; 9:1-7; 11:17-44.

PREGUNTAS PARA REPASO

1. ¿Cuál es la diferencia entre la revelación general y la especial?
2. ¿Quiénes niegan absolutamente toda revelación divina?
3. ¿Qué creen los deístas sobre la revelación?
4. ¿Cuál es la naturaleza de la revelación general?
5. ¿Por qué es insuficiente para nuestras necesidades especiales, y cuál es su verdadero valor?
6. ¿Por qué era necesaria la revelación especial?
7. ¿En qué forma nos dio Dios su revelación especial?
8. ¿Cuáles son las características de tal revelación?

LECCIÓN 3

LA REVELACIÓN Y LAS ESCRITURAS

El término «revelación especial» puede ser usado en más de un sentido. A veces denota las comunicaciones directas de Dios al hombre en mensajes verbales y en sucesos milagrosos. Los profetas y los apóstoles recibieron a menudo mensajes divinos mucho antes de que los escribieran.
Hoy día los encontramos en las Escrituras pero no forman el todo de la Biblia. Una gran parte de la Biblia no fue dada a los escritores sagrados en esta forma sobrenatural, sino que es el fruto de su estudio y reflexión. De todos modos, la frase «revelación especial» se usa con referencia a toda la Biblia, es decir, al conjunto de los hechos y de verdades redentoras que se encuentran en las Escrituras, dentro de su conjunto histórico.
La Escritura nos garantiza estas verdades por el hecho de haber sido infaliblemente inspiradas por el Espíritu Santo. Podemos pues afirmar que toda la Biblia, y solamente la Biblia, es la revelación especial de Dios para cada uno de nosotros. La revelación especial de Dios vive en las páginas de la Biblia y aun hoy día nos da vida, luz y santidad.

PRUEBA BÍBLICA DE LA INSPIRACIÓN DE LAS ESCRITURAS.

Toda la Biblia fue dada por inspiración de Dios y es la guía infalible de fe y conducta para toda la humanidad. Puesto que muchos niegan la inspiración de la Biblia tal asunto requiere una consideración especial.
La doctrina de la inspiración de la Biblia no es una invención humana sino que está fundada en la misma Biblia. Son muchos los pasajes que nos hablan de ello, pero vamos a indicar solamente algunos. Los autores del Antiguo Testamento fueron instruidos por Dios a que escribieran lo que
El les ordenaba. Éx. 17:14; 34: 27; Isa. 8:1; 30:8; Jer. 25: 13; 30:2; Ezeq. 24:1-2; Dan.12:4; Hab. 2:2.
Los profetas tenían conciencia de ser portadores de la palabra del Señor y por tal motivo introducían sus mensajes con estas palabras «Así dice Jehová» o bien, «y fue a mi palabra de Jehová diciendo», Jer. 36:27, 32; Ezequiel capítulos 26, 27, 31, 32, 39.
El apóstol Pablo habla de sus propias palabras como palabras que el Espíritu le había enseñado, 1ª Cor. 2: 13, y alega que es Cristo quien hablaba en él, 2ª Cor. 13: 3. En su carta a los Tesalonicenses declara que su mensaje era «palabra de
Dios», 2ª Tes. 2:13. En la epístola a los Hebreos encontramos citas del Antiguo Testamento mencionadas como palabra de Dios o del Espíritu Santo, Hebreos 1:5; 3:7; 4:3; 5:6; 7 :21.
El pasaje más importante que existe sobre la inspiración de las Escrituras se halla en 2 Timoteo 3:16: «Toda Escritura es inspirada divinamente y útil para enseñar, para reargüir, para corregir, para instituir en justicia».

LA NATURALEZA DE LA INSPIRACIÓN

Existen dos conceptos erróneos de la inspiración. Ambos representan extremos que debemos evitar.

LA INSPIRACIÓN MECÁNICA

Se ha dicho algunas veces que Dios literalmente dictó lo que los autores humanos de la Biblia debían escribir, como si éstos fueran cual plumas en la mano del escritor, es decir, agentes completamente pasivos. Esto significa que sus inteligencias no contribuyeron absolutamente en nada a la forma y contenido de las Escrituras.
Las mismas Escrituras demuestran que no fue así. Los autores humanos eran autores reales, y en algunos casos derivaron sus materiales de fuentes que Se hallaban a su disposición, 1 Reyes 11: 41; 14: 29; 1 Crónicas 29:29 y Lucas 1: 1-4 En otros casos estos autores nos cuentan sus propias experiencias, como en el libro de los Salmos y sus escritos llevan las huellas de su propio estilo literario. El estilo de Isaías es diferente del de Jeremías, y tampoco Juan escribe con el mismo estilo de Pablo.

LA INSPIRACIÓN DINÁMICA

Otros han dicho que el fenómeno de la inspiración sólo afecta a los escritores pero no a sus escritos. Se dice que su vida espiritual y poder intelectual fue levantado a un nivel tal, que comprendieron mejor todas las cosas y tuvieron una orientación más profunda de su verdadero valor espiritual.
Se ha dicho también que esta inspiración no estaba limitada al tiempo cuando escribieron los libros de la Biblia, sino que era una característica permanente en la vida de tales escritores, y que sólo de una manera indirecta tiene algo que ver con sus escritos.
Fue como una especie de iluminación espiritual parecida a la que gozan todos los creyentes, pero solamente en un grado muy superior. Esta teoría no tiene fundamento bíblico y dista mucho de la doctrina bíblica de la inspiración, como veremos después.

LA INSPIRACIÓN ORGÁNICA

El verdadero concepto de la inspiración bíblica enseña que el Espíritu Santo actuó sobre los escritores de la Biblia en una forma orgánica, cual órganos suyos, pero en armonía con las leyes de su ser interior.
El Espíritu Santo los usó tal cual eran, con su carácter y temperamento, sus dones y talentos, su educación y cultura, su vocabulario y estilo. El Espíritu Santo iluminó sus mentes, ayudó su memoria, los impulsó a escribir, dominó la influencia que el pecado hubiera podido tener sobre sus escritos, y los guió en la expresión de sus pensamientos hasta el punto de la selección de palabras.
Sin embargo les dio una buena medida de libertad en sus actividades. Dejó que nos dieran los resultados de sus investigaciones, y que pusieran en los libros sagrados la huella de su propio estilo y vocabulario.

LA EXTENSIÓN DE LA INSPIRACIÓN.

Hay diferencias de opinión sobre este punto, que es necesario estudiar.

LA INSPIRACIÓN PARCIAL

Bajo la influencia del Racionalismo no es raro encontrar hoy día quienes niegan completamente la inspiración de la Biblia, o mantienen que sólo partes de la misma son inspiradas. Algunos niegan la inspiración del Antiguo Testamento pero aceptan la del Nuevo.
Otros afirman que sólo las enseñanzas morales y religiosas de la Biblia son inspiradas pero en lo que se refiere a sus partes históricas, hay errores cronológicos, arqueológicos y científicos. Hay quienes limitan la inspiración al Sermón de la Montaña.
Los que aceptan tales puntos de vista no tienen ya una Biblia sobre la cual apoyarse, puesto que las mismas diferencias de opinión que existen son una prueba positiva de que ninguna de tales personas puede determinar con el menor grado de certeza, qué partes de la Escritura son inspiradas y cuáles no lo son.
Hay todavía otra forma de negar la inspiración bíblica de las Escrituras y estriba en afirmar que sólo los pensamientos están inspirados, pero que la selección de las palabras fue dejada completamente en manos de los autores humanos.
Tal afirmación cae por su propio peso, ya que se halla fundada en el erróneo concepto de que es posible separar los pensamientos de las palabras. En cambio, podemos afirmar que sin palabras es imposible pensar con exactitud.

LA INSPIRACIÓN PLENARIA

La Biblia enseña que cada parte de la misma es inspirada. Jesucristo y los apóstoles apelan con frecuencia al Antiguo Testamento con las palabras «Escrituras» o «Escritura» para solucionar un punto de controversia. Para ellos apelar a la Escritura era lo mismo que apelar a Dios. Es también digno de notar que en la lista de libros que citan de esta forma, se encuentran libros históricos.
En la epístola a los Hebreos se citan con frecuencia pasajes del Antiguo Testamento como palabras de Dios o del Espíritu Santo. Pedro pone las cartas de Pablo al mismo nivel que los libros del Antiguo Testamento 2 Pedro 3: 16 y Pablo afirma que toda la Escritura es divinamente inspirada, 2 Timoteo 3:16.
Podemos pues dar un paso más allá y afirmar que la inspiración de la Biblia alcanza las mismas palabras empleadas. La Biblia es verbalmente inspirada, cosa que no hay que confundir con la inspiración mecánica.
La doctrina de la inspiración verbal está bien justificada por las Escrituras. En muchos casos encontramos que Dios mismo indicó con exactitud a Moisés y a Josué lo que debían escribir. Lev. 3 y 4; 6:1, 24; 7:22, 28; Josué 1:1; 4:1; 6:2, etc. Los profetas hablan como si Jehová pusiera su palabra en sus bocas, Jer. 1:9 o les ordenara hablar al pueblo las mismas palabras' de Dios,
Ezeq. 3:4, 10, 11. Pablo nos habla de que su palabra es doctrina del Espíritu, 1ª Cor 2: 13 y tanto Pablo como Jesús mismo fundan todo un argumento en una simple palabra, Mateo 22:43-45; Juan 10:35; Gal. 3:16.

LAS PERFECCIONES DE LA ESCRITURA.

Los Reformadores desarrollaron la doctrina de la Escritura en contraste con la Iglesia Católica Romana y algunas de las sectas. Roma enseña que la Biblia debe su autoridad a la Iglesia, mientras los reformadores afirmaron que la Biblia tiene autoridad propia, por ser la Palabra inspirada de Dios.
También afirmaron la necesidad de las Escrituras como el medio de gracia preparado por Dios mismo. La Iglesia Católica Romana afirma que la Iglesia no tiene una necesidad absoluta de las Escrituras y algunas sectas ponen su énfasis en la «luz interior» y en el mensaje del Espíritu Santo en el corazón de los creyentes en detrimento de las Escrituras.
También en contra de la Iglesia Romana, los reformadores defendieron la claridad de las Escrituras. No negaron el que la Escritura encierra misterios demasiado profundos para el entendimiento humano, pero afirmaron que la Biblia nos da todo el conocimiento necesario para la salvación.
Este conocimiento aun cuando no Se halla con igual claridad en cada una de las páginas de la Biblia, nos es dado de tal forma, que cualquiera que sinceramente busca la salvación de su alma puede obtenerlo por sí mismo y no necesita fiar de la interpretación de la Iglesia o el clero.
Finalmente, defendieron la suficiencia de las Escrituras, es decir, negaron la necesidad de la Tradición que la Iglesia Católica Romana mantiene, o la luz interior que preconizaban los Anabaptistas.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

LA INSPIRACIÓN DE LA BIBLIA / LA AUTORIDAD DE LA BIBLIA

1. 1 Cor... 2:13. «Lo cual también hablamos, no con doctas palabras de humana sabiduría, mas con doctrina del Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual.»
2. 1 Tes. 2:13. «Por lo cual, también nosotros damos gracias a Dios sin cesar, de que habiendo recibido la palabra de Dios que oísteis de nosotros, recibisteis no palabra de hombres, sino según es verdad, la palabra de Dios.»
3. 2 Tim. 3:16. «Toda Escritura es inspirada divinamente y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instituir en justicia.»
4. Isaías 8:20. «A la ley y al testimonio. Si no dijeren conforme a esto es porque no les ha amanecido.»

LA CLARIDAD DE LA ESCRITURA

1. Sal. 19:7b. “El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al pequeño”
2. Salmo 119:105. «Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.» Y el v. 130, «El principio de tus palabras alumbra; hace entender a los simples».

LA NECESIDAD DE LA BIBLIA / LA SUFICIENCIA DE LA ESCRITURA

1. 2 Tim. 3: 15. «Y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salud por la fe que es en Cristo Jesús».

PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL

1. ¿Tienen autoridad alguna las tradiciones humanas? Mateo 5:21-48; 15:3-6; Marcos 7:7; Col. 2:8; Tito 1:14; 2 Pedro 1:18.
2. ¿Entendían los profetas con claridad las cosas que escribían? Dan. 8: 15; 12:8; Zac. 1:7 a 6: 11; 1 Pedro 1:11.
3. ¿Qué nos enseña 2 Timoteo 3:16 sobre el valor práctico de la inspiración de la Biblia?

PREGUNTAS PARA REPASO

1. ¿Cuál es la relación entre la revelación especial y la Biblia?
2. ¿Qué diferentes sentidos se han dado al término «revelación especial»?
3. ¿Podemos afirmar que la revelación especial y las Escrituras son palabras sinónimas?
4. ¿Qué pruebas bíblicas podemos dar sobre la inspiración de la Biblia?
5. ¿Qué enseñan las teorías de la inspiración mecánica y dinámica?
6. ¿Cómo definiría usted la doctrina de la inspiración orgánica?
7. ¿Qué podemos pensar de los que dicen que los pensamientos están inspirados pero no las palabras?
8. ¿Cómo es posible probar que la inspiración se extiende a cada parte de la Escritura, y hasta a las mismas palabras?
9. ¿Cuál es la diferencia entre la Iglesia de Roma y los cristianos de la Reforma sobre la autoridad, necesidad, claridad y suficiencia de las Escrituras?

LECCIÓN 4

EL CONOCIMIENTO DE DIOS

La posibilidad de conocer a Dios ha sido negada por diferentes motivos y aunque es cierto que el hombre no puede jamás llegar a una comprensión absoluta del divino ser, esto no implica el que no podamos tener ningún conocimiento de Él.
Podemos conocer a Dios solamente en parte, pero con un conocimiento que es real y verdadero. Esto es posible porque Dios mismo se nos ha revelado. Sí el hombre hubiera sido abandonado a sus propios esfuerzos, jamás hubiera llegado a descubrirle o a conocerle.
Nuestro conocimiento de Dios es de dos clases. El hombre tiene un conocimiento innato de Dios. Esto no significa que en virtud de su creación a la imagen y semejanza de Dios el hombre tenga una habilidad natural para conocer a Dios.
Tampoco implica el que el hombre desde su nacimiento lleve consigo al mundo un cierto conocimiento de Dios. El conocimiento innato significa que bajo condiciones normales se desarrolla en el hombre en forma natural un cierto conocimiento de Dios. De todos modos este conocimiento es de naturaleza muy general.
Además de este conocimiento innato de Dios el hombre puede obtener cierto conocimiento de El a través de la revelación general y de la revelación especial. Este conocimiento se obtiene como fruto de una búsqueda consciente y continua.
Aun cuando tal conocimiento es posible por razón de la capacidad natural en el hombre para conocer a Dios, el conocimiento adquirido le lleva mucho más lejos de aquellos límites impuestos al conocimiento innato de Dios.

EL CONOCIMIENTO DE DIOS QUE SE DERIVA DE LA REVELACIÓN ESPECIAL

Aun cuando debemos reconocer que es imposible definir lo que es Dios, es en cambio posible dar una descripción general de su ser. Cuanto más podemos describirlo como a un espíritu puro de perfecciones infinitas. Esta descripción incluye los siguientes elementos:

DIOS ES UN ESPÍRITU PURO.

La Biblia no nos da definición alguna de Dios. Lo que más se acerca a una definición son las palabras de Jesús a la Samaritana diciendo: «Dios es un espíritu». Esto significa que Dios es esencialmente espíritu, y que todas aquellas cualidades que pertenecen a la idea de un espíritu perfecto se encuentran necesariamente en él. El hecho de que Dios sea un espíritu puro excluye la idea de que Dios tiene un cuerpo de alguna clase que pueda ser visible de un modo completo alojo humano.

DIOS ES UN SER PERSONAL

La idea de Dios como espíritu incluye la idea de personalidad. Un espíritu es un ser inteligente y moral, por esto, cuando atribuimos a Dios la personalidad, queremos decir que es un ser razonable, capaz de determinarse y decidir las cosas.
Hay muchos hoy día que niegan la personalidad de Dios y lo conciben simplemente como una fuerza o poder impersonal. Sin embargo, el Dios de la Biblia es un Ser personal, un Dios con quien los hombres pueden conversar, en quien pueden confiar, que conoce sus experiencias, les ayuda en sus dificultades y llena sus corazones de alegría y regocijo. Aun más, Dios se reveló a sí mismo en una forma personal a través del Señor Jesucristo.

DIOS ES INFINITAMENTE PERFECTO

Lo que distingue a Dios de sus criaturas es su infinita perfección. Su ser y virtudes o atributos están completamente libres de toda limitación o imperfección. Dios no es sólo un ser infinito e ilimitado, sino que está infinitamente por encima de todas sus criaturas en sus perfecciones morales y gloriosa majestad. Los hijos de Israel cantaron la grandeza de Dios después de pasar el Mar Rojo con estas palabras:
« ¿Quién como tú, Jehová, entre los dioses? ¿Quién como tú, magnífico en santidad, terrible en loores, hacedor de maravillas?, Éxodo 15:11. Algunos filósofos contemporáneos hablan erróneamente de Dios como un ser «finito, que se desarrolla, que lucha y que sufre compartiendo las derrotas y victorias del hombre». Este concepto existencialista se aparta de las verdades bíblicas.

DIOS Y SUS PERFECCIONES SON UNA MISMA COSA

La simplicidad es una de las características fundamentales de Dios. Esto significa que
Dios no está dividido en partes, sino que su ser y sus atributos son una sola cosa. Se podría decir que los atributos divinos son Dios tal como ha querido revelar se al hombre y son simplemente manifestaciones del divino Ser. Por tal motivo la Biblia afirma que Dios es verdad, vida, luz, amor, justicia, etc.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA QUE ATESTIGUAN:

QUE DIOS PUEDE SER CONOCIDO.

1. 1 Juan 5:20. «Empero sabemos que el Hijo de Dios es venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero: y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo.»
2. Juan 17:3. «Esta empero es la vida eterna: que te conozcan al sólo Dios verdadero, y a Jesucristo, al cual has enviado.»

QUE DIOS ES ESPÍRITU

1. Juan 4:24. «Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que le adoren.»
2. 1 Tim. 6:16. «Quien sólo tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible; a quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver.»

QUE DIOS ES UN SER PERSONAL

1. Mal. 2:10. « ¿No tenemos todos un mismo Padre? ¿No nos ha criado un mismo Dios hombre?
2. Juan 14:9b. «El que me ha visto ha visto al Padre; ¿Cómo, pues, dices tú: Muéstranos al Padre?

QUE DIOS ES UN SER INFINITO EN PERFECCIÓN.

1. Éxodo 15:11. « ¿Quién como tú, Jehová, entre los dioses? ¿Quién como tú, magnífico en santidad, terrible en loores, hacedor de maravillas?
2. Salmo 147:5. «Grande es el Señor nuestro, y de mucha potencia; y de su entendimiento no hay número.»

PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL

1. ¿Enseñan los pasajes siguientes que no podemos conocer a Dios? Job 11: 7; 26: 14; 36: 26.
2. ¿Si Dios es espíritu y por consiguiente no tiene cuerpo cómo se explican los siguientes pasajes? Sal. 4: 6; 17: 2; 18: 6, 8-9; 31:5; 44: 3; 47: 8; 48: 10, y otros.
3. ¿En qué forma prueban esos versículos la personalidad de Dios? Gen. 1: 1; Deut. 1:34-35; 1 Reyes 8: 23-26; Job 38: 1; Sal. 21:7; 50: 6; 103: 3- Mateo 5:9; Rom.12:1.

PREGUNTAS PARA REPASO

1. ¿En qué sentido podemos conocer a Dios y en qué sentido nos es imposible conocerle?
2. ¿Qué diferencia existe entre el conocimiento innato y el conocimiento adquirido?
3. ¿Es posible dar una definición de Dios? ¿Cómo podemos describirle?
4. ¿Qué significa la espiritualidad de Dios?
5. ¿Qué queremos decir al hablar de Dios como persona?
6. ¿Qué pruebas tenemos de la personalidad de Dios?
7. ¿ Qué cosa es la infinidad d" Dios?
8. ¿Qué relación existe entre el ser divino y sus perfecciones?

LECCIÓN 5

LOS NOMBRES DE DIOS

Cuando leemos en la Biblia que Dios da nombres a ciertas personas o cosas, estos nombres tienen un significado y nos dan una idea de la naturaleza de las personas o cosas que designan. Lo mismo se aplica a los nombres que Dios mismo se ha dado a sí. Algunas veces la Biblia nos habla del nombre de Jehová en singular, y en tales casos designa con tal palabra una manifestación general de Dios, de un modo especial con referencia a su pueblo, Éx. 20: 7; Sal. 113: 3; o se refiere a Dios solo, Prov. 18: 18; Isaías 50: 10.
El nombre de Dios en general ha sido dividido en varios nombres especiales que expresan los muchos aspectos de su Ser. Estos nombres no son el producto de la invención humana, sino que fueron dados por Dios mismo.

LOS NOMBRES DE DIOS EN EL ANTIGUO TESTAMENTO

Algunos nombres del Antiguo Testamento denotan que Dios es el Altísimo o Dios alto. Los nombres Él y Elohim indican que Dios es fuerte y poderoso y que por tanto debe ser temido. Elyon denota su elevada naturaleza como el Alto Dios el objeto de reverencia y adoración. Otro nombre que pertenece a esta clasificación es Adonaí, generalmente traducido por «Señor», es decir, el Poseedor y Soberano de todos los hombres.
Otros nombres expresan el hecho de que Dios tiene relaciones benévolas o amistosas con sus criaturas. Uno' de tales nombres, muy común entre los patriarcas, era el nombre Shaddai o 'EI-Shaddai, que hace énfasis en la grandeza divina, pero sólo como fuente de consuelo y bendición para Su pueblo.
Tal nombre indica que Dios rige los poderes de la naturaleza y hace que sirvan a sus propios designios. El mayor de' los nombres de Dios, que siempre ha sido sagrado para los judíos, es el nombre de Jehová (Yahvé). Su origen y significado nos son indicados en Éxodo 3: 14, 15.
Este nombre expresa la inmutabilidad de Dios, es decir, que Dios siempre es el mismo, y de un modo especial que jamás cambia en las relaciones de su pacto, que es siempre fiel en el cumplimiento de sus promesas. Con consecuencia encontramos otro nombre, el de «Jehová de los ejércitos». Este nombre nos da un cuadro de Jehová como el Rey de gloria rodeado de las huestes celestiales.

LOS NOMBRES DE DIOS EN EL NUEVO TESTAMENTO

Los nombres de Dios en el Nuevo Testamento no son otros que las traducciones griegas de las formas hebreas en el Antiguo Testamento. Son dignas de mención las siguientes:
EL NOMBRE THEOS
Esta palabra se traduce por «Dios», y es la que se emplea con más frecuencia en el Nuevo Testamento, Con mucha frecuencia se emplea en el caso genitivo (posesivo) traducida por «mi Dios», «tu Dios», <nuestro Dios», «su Dios». En la persona de Cristo, Dios es el Dios de todos sus hijos. Esta forma individual toma el lugar de la forma nacional, «el Dios de Israel» que es tan frecuente en el Antiguo Testamento.
EL NOMBRE KURIOS
La palabra «Kurios» significa «Señor», y este nombre se aplica no tan sólo a Dios sino también a Cristo. En su significado toma el lugar del hebreo Adonaí y también Jehová, pero su significado corresponde mucho más de cerca a la forma Adonaí.
Designa pues a Dios como el Poseedor y Soberano de todas las cosas, y de un modo especial, de su pueblo.
EL NOMBRE PATER
Algunos han dicho que el Nuevo Testamento introduce este nombre como a un nombre nuevo, pero tal aserción es incorrecta. El nombre «Padre» se encuentra también en el Antiguo Testamento para expresar la relación especial que existe entre Dios y su pueblo Israel, Deut. 32: 6; Isaías 63: 16. En el Nuevo Testamento su significado es aún más individual y denota a Dios como Padre de todos los creyentes.
Algunas veces designa a Dios como Creador de todo lo que existe, 1ª Cor. 8:6; Efes. 3:14; Hebreos 12:9; Santo 1: 17, otras como a la primera persona de la Santísima Trinidad y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Juan 14: 11; 17:1.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA SOBRE:

EL NOMBRE DE DIOS EN GENERAL.

1. Éxodo 20:7. «No tomarás el nombre de Jehová tu Dios en vano; porque no dará por inocente Jehová al que tomare su nombre en vano.»
2. Sal. 8:1. «Oh Jehová, Señor nuestro ¡cuán grande es tu nombre en toda la tierra!»

NOMBRES PARTICULARES

1. Génesis 1:1. «En el principio crió Dios ('Elohim) los cielos y la tierra.»
2. Éx. 6:3. «Y aparecí a Abraham, a Isaac y a Jacob bajo el nombre de Dios Omnipotente ('El Shaddai), mas en mi nombre Jehová no me notifiqué a ellos.»
3. Sal. 86:8. «Oh Señor (Adonaí), ninguno hay como tú entre los dioses, ni obras que igualen tus obras.»
4. Mal. 3:6. «Porque yo Jehová, no me mudo; y así vosotros, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos.»
5. Mateo 6: 9. «Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.»
6. Apoc. 4:8. «Santo, santo, santo el Señor (Kurios) Todopoderoso, que era, y que es, y que ha de venir.»

PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL

1. ¿Cómo ilumina el pasaje de Éxodo 3:13-16 el significado del nombre Jehová?
2. ¿Cuál era el nombre de Dios más corriente en los días de los patriarcas? Gen. 17: 1; 28:3; 35: 11; 43: 14; 48:3; 49:25; Éxodo 6:3.
3. ¿Puede usted dar algunos nombres que describan a Dios? Isaías 43:15; 44:6; Amós 4:13; Lucas 1:78; 2 Cor... 1:3; Santo 1:17; Heb. 12:9; Apoc., 1:8,17.

PREGUNTAS PARA REPASO

1. ¿Qué nos enseña la Escritura cuando habla del nombre de Dios en singular?
2. ¿Los nombres de Dios fueron inventados por los hombres?
3. ¿Qué dos clases de nombres podemos distinguir en el Antiguo Testamento?
4. ¿Qué significan los nombres 'Elohim, Jehová, Adonaí, 'El Shaddai, y Kurios?
5. ¿Se menciona a Dios con el nombre de Padre en el Antiguo Testamento?
6. ¿En qué diferente sentido se usa el nombre de Padre en el Nuevo Testamento?

LECCIÓN 6:

LOS ATRIBUTOS DE DIOS

Dios se nos revela no sólo a través de sus nombres sino también en sus atributos, es decir, las perfecciones del divino ser. Se acostumbra a distinguir entre los atributos comunicables y los incomunicables. Existen vestigios de los primeros en las criaturas humanas pero no de los segundos.

LOS ATRIBUTOS INCOMUNICABLES

Su énfasis está en la absoluta distinción que existe entre la criatura y el Creador. Tales atributos son:
LA INDEPENDENCIA O EXISTENCIA PROPIA DE DIOS
Esto significa que la razón de la existencia de Dios se encuentra en Dios mismo, y que a diferencia del hombre, no depende de nada aparte de sí mismo. Dios es independiente en su Ser, en sus acciones y virtudes, y hace que todas las criaturas dependan de Él.
Esta idea se halla expresada en el nombre de Jehová y en los pasajes siguientes: Sal. 33: 11; 115:3; Isaías ,40: 18s; Dan. 4: 35; Juan 5:26; Rom. 11: 33-36; Hechos 17:25; Apoc. 4:11.
LA INMUTABILIDAD DE DIOS
Las Escrituras nos enseñan que Dios no cambia. Tanto en su divino ser como en sus atributos, en sus propósitos y promesas, Dios permanece siempre el mismo, Núm. 23: 19; Sal. 33: 11; 102: 27; Mal. 3: 6; Heb. 6: 17, Santo 1:17.
Esto no significa en ningún modo que en Dios no existe el movimiento. La Biblia nos habla de su ida y venida y de que se esconde y se revela. N os dice también que se arrepiente, pero es evidente que esto es sólo una forma humana de referirse a Dios, Éxodo 32: 14; Jonás 3:10; y más bien indica un cambio en la relación del hombre para con Dios.
LA INFINIDAD DE DIOS
Con esto decimos que Dios no está sujeto a limitación alguna. Podemos hablar de su infinidad en diversos sentidos. Con relación a su Ser, podemos llamarla su perfección absoluta. En otras palabras, Dios no está limitado en su conocimiento y sabiduría, su bondad y amor, su justicia y santidad, Job 11: 7-10; Sal. 145: 3.
Con respecto al tiempo, la llamamos Su eternidad. Mientras que en la Escritura tal noción nos es dada en forma de una duración ilimitada, Sal. 90:2; 102:12, en realidad significa que Dios está por encima del tiempo, y que por lo tanto no está sujeto a sus limitaciones.
Para Dios sólo existe un eterno presente, y no hay pasado ni futuro. Con relación al espacio, Su infinidad recibe el nombre de inmensidad. Dios está presente en todas partes, mora en todas sus criaturas, llena cada punto del espacio, pero no está limitado en ningún modo por el espacio, 1 Reyes 8: 27; Sal. 139: 7-10; Isaías 66: 11; Jer. 23: 23, 24; Hechos 17: 27-28.
LA SIMPLICIDAD DE DIOS
Al hablar de la simplicidad de Dios queremos decir que Dios no está compuesto de diferentes partes, tales como el cuerpo y el alma en el hombre, y que por esta misma razón, Dios no se halla sujeto a división alguna. Las tres personas de la Divinidad no son tantas partes de las que se compone la esencia divina.
Todo el ser de Dios pertenece a cada una de las tres Personas Por tal motivo afirmamos que Dios y sus atributos son un todo y que El es vida, luz, amor, justicia, verdad, etc.

LOS ATRIBUTOS COMUNICABLES

Estos son los atributos de los cuales existe alguna semejanza en el hombre. Debemos notar, sin embargo, que lo que vemos en el hombre es una semejanza finita (limitada) e imperfecta de aquello que en Dios es infinito (ilimitado) y perfecto.
EL CONOCIMIENTO DE DIOS
Llamamos así a aquella perfección divina por la cual Dios, a su manera, se conoce a sí mismo y a todas las cosas actuales y posibles. Dios tiene de por sí este conocimiento propio y no lo obtiene de nada ni nadie exterior. Este conocimiento es completo y está siempre presente en su mente.
Puesto que tal conocimiento lo abarca todo, ha recibido el nombre de omnisciencia. Dios conoce todas las cosas pasadas, presentes, futuras y no tan sólo aquellas que tienen una existencia real sino también las que Son meramente posibles, 1ª Reyes 8: 29; Sal. 139: 1-16; Isa. 46: 10; Ezeq. 11:5; Hechos 15:18; Juan 21:17; Hebreos 4:13.
LA SABIDURÍA DE DIOS
La sabiduría es un aspecto del conocimiento de Dios. Es el atributo divino que se manifiesta en la selección de' dignos fines y en la selección de los mejores medios para la realización de tales fines. El propósito final y al cual Dios hace que todas las cosas se subordinen es su propia gloria. Rom. 11: 33; 1 Cor. 2: 7; Efesios 1: 6, 12, 14; Col. 1:16.
LA BONDAD DE DIOS
Dios es bueno, esto es, santo a la perfección en su modo de Ser. Sin embargo, esta no es la clase de bondad a la que nos referimos aquí. Esta bondad a la que hacemos referencia es aquella bondad que se revela en hacer el bien a otros. Es el atributo o perfección divina que lo impulsa a obrar con bondad y generosidad para con todas sus criaturas. La Biblia habla de ello repetidamente. Sal. 36:6: 104: 21; 145:8, 9,16; Mateo 5: 45; Hechos 14:17.
EL AMOR DE DIOS
Se ha llamado a este atributo el atributo más importante de Dios pero es dudoso de que sea más importante que cualquier otro. En virtud del tal, Dios se deleita en sus propias perfecciones y también en el hombre, como reflejo de su imagen. Podemos considerarlo desde diferentes puntos de visita. El amor inmerecido de Dios que se revela en el perdón de los pecados recibe el nombre de gracia, Efesios 16:7; 2: 7-9; Tito 2: 11.
El amor que se revela en aliviar la miseria de aquellos que sufren las consecuencias del pecado, lo llamamos su misericordia o tierna compasión, Lucas 1:54.72, 78; Rom. 15:8; 9:16, 18; Efesios 2:4. Cuando este amor tiene paciencia con el pecador que no escucha las instrucciones y avisos divinos, lo llamamos su longanimidad o paciencia, Rom. 2:4; 9:22; 1 Pedro 3:20; 2 Pedro 3:15.
LA SANTIDAD DE DIOS
La santidad de Dios es ante todo aquella perfección divina por la cual Dios es absolutamente distinto de todas sus criaturas, y elevado muy por encima de ellas en infinita majestad. Éxodo 15: 11, Isaías 57:15. En segundo lugar denota también que Dios es libre de cualquier impureza moral b pecado, y que por tanto es moralmente perfecto. En la presencia de un Dios santo, el hombre siente su pecado muy profundamente, Job 34: 10; Isaías 6: 5; Habacuc 1: 13.
LA JUSTICIA DE DIOS
La justicia de Dios es aquel atributo divino por el cual Dios se mantiene santo en frente de cualquier violación de su santidad. En virtud de ello, Dios mantiene su gobierno moral en el mundo e impone al hombre una ley justa, recompensando la obediencia Y. castigando la desobediencia, Sal. 99: 4; Isaías 33: 22; Rom. 1: 32.
La justicia de Dios que se manifiesta en dar recompensas recibe el nombre de justicia remunerativa; la que se revela al ejecutar su castigo se llama justicia retributiva. La primera es una expresión de su amor y la segunda de su ira.
LA VERACIDAD DE DIOS
Este atributo denota que Dios es verdadero en su mismo Ser, en su revelación y en las relaciones para con su pueblo. Dios es verdadero en contraste con los ídolos, conoce las cosas tal como son, y es fiel en el cumplimiento de sus promesas. Esta última característica recibe también el nombre de fidelidad de Dios, Núm. 23: 19; 1ª Cor 1: 9; 1ª Tim. 2: 13; Heb. 10:23.
LA SOBERANÍA DE DIOS
Este atributo puede ser considerado desde dos puntos de vista, su soberana voluntad y su soberano poder. La voluntad de Dios, según las Escrituras, es la causa final de todas las cosas. Efesios 1: 11; Apoc. 4: 11. De acuerdo con Deut. 29: 29 ha sido costumbre distinguir entre la voluntad secreta de Dios y la voluntad revelada.
La primera ha sido llamada la voluntad del decreto divino, está escondida en Dios mismo y sólo puede ser conocida a través de sus efectos. La segunda es la voluntad de sus preceptos y nos ha sido revelada en la ley y en el evangelio. La voluntad de Dios es absolutamente libre en su relación con sus criaturas, Job 11: 10; 33: 13; Sal. 115: 3; Prov. 21: 1; Mateo 20: 15; Rom. 9: 15-18; Apoc. 4: 11.
Aun las acciones pecaminosas del hombre están bajo el control de su soberana voluntad, Génesis 50: 20; Hechos 2:23. Al poder de ejecutar su voluntad se le ha llamado omnipotencia. Decir que Dios es omnipotente, no significa que Dios puede hacer cualquier cosa.
La Biblia nos enseña que hay ciertas cosas que aun Dios mismo no puede hacer. Dios no puede mentir, pecar, ni negarse a sí mismo. Núm. 23:19; 1 Sam. 15: 29; 2 Tim. 2:
13; Heb. 6:18; Santo 1:13, 1'7. Significa en cambio, que Dios puede, por el mero ejercicio de su voluntad, realizar cualquier cosa que El ha decidido llevar a cabo, y que si El lo quisiera, podría aun hacer más que esto, Gen. 18:14; Jer. 32:27, Zac. 8:6; Mateo 3:9; 26 :53.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA QUE PRUEBAN:

LOS ATRIBUTOS INCOMUNICABLES DE DIOS

1. Independencia. Juan 5:26. «Porque como el Padre tiene vida en sí mismo, así Dio también al Hijo que tuviese vida en sí mismo.»
2. Inmutabilidad. Mal. 3:6. «Porque yo Jehová no me mudo; y así vosotros, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos.» Santo 1:17. «Toda buena dádiva y todo bien perfecto es de 10 alto, que desciende del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación.»
3. Eternidad. Salmo 90:2. «Antes que naciesen los montes, y formases la tierra y el mundo, y desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios.» Sal. 102:27. «Mas tú eres el mismo, y tus años no se acabarán.»
4. Omnipresencia. Sal. 139:7-10. « ¿Adónde me iré de tu espíritu? ¿Y dónde huiré de tu presencia? Si subiere a los cielos allí estás tú: y si en abismo hiciere mi estrado, he aquí allí tú estás. Si tomare las alas del alba, y habitare en el extremo de la mar, aun allí me guiará tu mano, y me asirá tu diestra.» Jer. 23:23-24. «¿Soy yo Dios de poco acá, dice Jehová, y no Dios de mucho ha? ¿Ocultaras alguno, dice Jehová, en escondrijos que yo no lo vea? ¿No hincho yo, dice Jehová, el cielo y la tierra?

LOS ATRIBUTOS COMUNICABLES

1. Omnisciencia. Juan 21:17b. «Y dísele: Señor, tú sabes todas las cosas; tú sabes que te amo.» Heb. 4: 13. «Y no hay cosa criada que no sea manifiesta en su presencia; antes todas las cosas están desnudas... y abiertas ante los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.»
2. Sabiduría. Sal. 104:24. « ¡Cuán muchas son tus obras, oh Jehová! Hiciste todas ellas con sabiduría.» Dan. 2:20-21b. «Sea bendito el nombre de Dios de siglo hasta siglo: porque suya es la sabiduría y la fortaleza... Da la sabiduría a los sabios, y la ciencia a los entendidos.»
3. Bondad. Sal. 86:5. «Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, y grande en misericordia para con todos los que te invocan.» Sal. 118:29. «Alabad a Jehová porque es bueno; porque para siempre es su misericordia.»
4. Amor. Juan 3:16. «Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.» 1ª Juan 4:8. «El que no ama, no conoce a Dios; porque Dios es amor.»
5. Gracia. Nehemías 9:17b. «Tú, empero, eres Dios de perdones, clemente y piadoso, tardo para la ira, y de mucha misericordia.» Rom. 3:24, «Siendo justificados gratuitamente por su gracia, por la redención que es en Cristo Jesús».
6. Misericordia. Rom. 9:18. «De manera que del que quiere tiene misericordia; y al que quiere, endurece.» Efesios 2:4-5, «Empero Dios, que es rico en misericordia, por su mucho amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo».
7. Longanimidad o paciencia. Núm. 14: 18. «Jehová, tardo de ira y grande en misericordia, que perdona la iniquidad y la rebelión.» Rom. 2: 4, «O menosprecias las riquezas de su benignidad, y paciencia, y longanimidad, ignorando que su benignidad te guía al arrepentimiento».
8. Santidad. Éxodo 15: 11, « ¿Quién como tú, Jehová, entre los dioses? ¿Quién como tú, magnífico en santidad, terrible en loores, hacedor de maravillas? Isaías 6: 3b. «Santo, santo, santo, Jehová de los ejércitos: toda la tierra está llena de su gloria».
9. Justicia y juicio. Salmo 89:14. «Justicia y juicio son el asiento de tu trono». Salmo 145: 17, «Justo es Jehová en todos sus caminos, y misericordioso en todas sus obras». 1ª Pedro 1: 17, «y si invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, con verdades. Temor todo el tiempo de vuestra peregrinación.»
10. Veracidad y fidelidad. Núm. 23:19. «Dios no es hombre, para que mienta; ni hijo de hombre para que se arrepienta: él dijo ¿y no hará?; habló, ¿y no lo ejecutará?» 2ª Tim. 2: 13. «Si fuéramos infieles, él permanece fiel: no se puede negar a sí mismo.»
11. Soberanía. Efesios 1:11. «En el digo, en quien asimismo tuvimos suerte, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el consejo de su voluntad.» Apoc. 4: 11, «Señor, digno eres de recibir gloria y honra y virtud: porque tú criaste todas las cosas, y por tu voluntad tienen ser y fueron criadas.»
12. Voluntad secreta y revelada. Deut. 29:29. «Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios: mas las reveladas son para nosotros y para nuestros hijos por. Siempre, para que cumplamos todas las palabras de esta ley.»
13. Omnipotencia. Job 42:2. « Yo conozco que todo lo puedes.» Mateo 19:26. «Para con Dios todo es posible.» Lucas 1:37. «Porque ninguna cosa es imposible para Dios.»

PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL

1. De casos en los que la Biblia identifica a Dios. ‘con sus atributos. Jer. 23:6; Hebreos 12:29; 1 Juan 1:5; 3:16.
2. ¿Cómo puede Dios ser justo y a la vez misericordioso para con el pecador? Zac. 9:9. Rom. 3:24-26.
3. Pruébese a través de las Escrituras que la presciencia divina incluye aun los sucesos condicionales. 1 Sam. 23: 10-13. 2ª Reyes 13: 19; Sal 81: 13-15; Jer. 38: 17-20; Ezequiel 3: 6; Mateo 11: 21. Isaías 48: 18.

PREGUNTAS PARA REPASO

1. ¿Qué distinción hacemos entre los atributos de Dios?
2. ¿Qué atributos pertenecen a cada clase?
3. ¿Qué cosa es la independencia de Dios?
4. ¿Cómo es posible explicar el hecho de que la Biblia atribuye a Dios cambios aparentes?
5. ¿Cómo definimos la eternidad y la inmensidad u omnipresencia de Dios?
6. ¿Qué es la simplicidad de Dios y cómo podemos probarla?
7. ¿Cuál es la inmutabilidad de Dios?
8. ¿Cuál es la naturaleza y alcance del conocimiento divino?
9. ¿En qué sentido el conocimiento divino se relaciona con su sabiduría?
10. ¿Es apropiado hablar del amor de Dios como un atributo más importante que los otros?
11. ¿Cómo podemos distinguir entre la gracia, la misericordia y la paciencia divina?
12. ¿Qué cosa es la santidad de Dios?
13. ¿De qué forma Dios nos revela su justicia?
14. ¿Qué cosas se hallan incluidas en la veracidad de Dios?
15. ¿Qué distinción se ha hecho al hablar de la voluntad de Dios?
16. ¿Existe jamás un conflicto entre la voluntad secreta y la voluntad revelada de Dios?
17. ¿A qué llamamos la bondad de Dios? ¿Existen otros nombres para designarla?
18. ¿Significa la omnipotencia de Dios que El puede hacer cualquier cosa?

LECCIÓN 7:

LA TRINIDAD: DECLARACIÓN DOCTRINAL.

La Biblia enseña que aun cuando Dios es uno, existe en tres personas llamadas Padre, Hijo y Espíritu Santo. Estas no son tres personas en el sentido corriente de la palabra; no son tampoco tres individuos, sino más bien tres modos o formas de existencia del Divino Ser. Al mismo tiempo su naturaleza es tal que les es posible entrar en relaciones personales.
El Padre puede hablar al Hijo y viceversa y ambas pueden enviar al Espíritu Santo. El verdadero misterio de la Trinidad consiste en el hecho de que cada una de las tres personas posee la suma total de la esencia divina, y qué' ésta no existe aparte de, o fuera de tales Personas.
Ninguna de ellas es subordinada en cuanto a su ser a la otra, aunque en orden de su existencia el Padre es primero, el Hijo es segundo y el Espíritu Santo tercero. Un orden idéntico se refleja en su obra.

PRUEBA BÍBLICA DE LA TRINIDAD.

El Antiguo Testamento ya nos indica que en Dios existe más de una Persona. Dios habla de sí mismo en el plural, Gen. 1 :26; 11 :7.; el Ángel de Jehová nos es presentado como una persona divina, Gen. 16:7-13; 18:1-21; 19:1-22, y también el Espíritu Santo que nos presenta como una
Persona distinta, Isaías 48 :16; 63 :10. Hay asimismo pasajes en los cuales el Mesías habla y menciona a las dos otras Personas, Isaías 48: 16; 61; 63: 9-10.
Dado el progresó que encontramos en la revelación, el Nuevo Testamento nos presenta pruebas más claras. Las pruebas más contundentes las encontramos en los hechos de la redención. El Padre envía a su Hijo al mundo, y el Hijo envía al Espíritu Santo.
Además, hay un cierto número de pasajes en los que las tres Personas nos son mencionadas específicamente, tales como en: «la Gran Comisión», Mateo 28:19, y «la Bendición Apostólica», 2ª Cor. 13:13. Véase también, Lucas 3:21-22; 1:35; 1ª Cor. 12:4-6; 1ª Pedro 1:2.
La doctrina de la Trinidad fue negada por los socinianos en los días de la Reforma y hoy día por los unitarios y los modernistas. Estos hablan de la misma en términos del Padre, el hombre Jesús, y una influencia divina que recibe el nombre de Espíritu de Dios.
EL PADRE
El nombre «Padre» se aplica con frecuencia en las Escrituras al Dios trino como a creador de todas las cosas, 1 Cor... 8:6; hebreos 12:9; Santo 1:17, como Padre de Israel, Deut. 32:6: Isaías 63:16; y como a Padre de los creyentes, Mateo 5: 45; 6:6, 9,14; Rom. 8:15.
En 'un sentido más profundo, la palabra «Padre» se refiere a la Primera Persona de la Trinidad, para expresar su relación con la Segunda Persona, Juan 1 :14, 18; 8 :54; 14 :12, 13. Esta es la Paternidad original y de la cual la paternidad humana no es más que un débil reflejo. La característica esencial del Padre es haber engendrado al Hijo desde toda la eternidad. Las obras que generalmente se atribuyen a Él son el planeamiento de la obra redentora, la creación, la providencia y la representación de la Trinidad en el consejo de la redención.
EL HIJO
La Segunda Persona de la Trinidad es llamada «Hijo» o «Hijo de Dios». Este nombre le es dado no sólo como a Hijo unigénito del Padre, Juan 1:14, 18; 3:16, 18; Gal. 4:4, sino también como al Mesías escogido de Dios, Mateo 8:29; 26:63; Juan 1:49; 11:27, y en virtud de su nacimiento especial por obra del Espíritu Santo, Lucas 1:32, 35.
La característica esencial del Hijo es el haber sido engendrado desde toda la eternidad por el Padre. Salmo 2:7; Hechos 13: 33; Hebreos 1: 5. Por razón de esta generación eterna, el Padre es la causa de la existencia personal del Hijo en la Divina Trinidad.
Las obras que se atribuyen al Hijo de un modo especial Ron obras de mediación. El Hijo de Dios es el mediador de la creación, Juan 1:3, 10; Hebreos 1:2-3, y el mediador de la obra redentora, Efesios 1:3-14.
EL ESPÍRITU SANTO
A pesar de que los socinianos, unitarios y modernistas de nuestros días hablan del Espíritu Santo como a un mero poder o influencia divina, la Biblia nos lo presenta como a una Persona, Juan 14:16, 17, 26; 15:26; 16:7-15; Rom. 8: 26.
El Espíritu Santo tiene inteligencia, Juan 14:26, sentimiento, Isaías 63:10; Efesios 4:30, y voluntad, Hechos 16: 7; 1ª Cor... 12:11. La Escritura nos dice que el Espíritu Santo habla, escudriña, testifica, ordena, disputa e intercede. Además, su Persona nos es presentada como distinta de su poder en Lucas 4: 14; 1: 35; Hechos 10: 38; 1ª Cor 2: 4. La característica esencial del Espíritu Santo es proceder del Padre y del Hijo por espiración.
En términos generales la obra del Espíritu Santo es completar las obras de la creación y de la redención, Génesis 1:2; Job 26:13; Lucas 1:35; Juan 3:34; 1 Cor 12: 4-11; Efesios 2: 22.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA SOBRE LA TRINIDAD

1. Isaías 16:1, «El espíritu del Señor Jehová es sobre mí» (el Mesías). Véase Lucas 4:17-18.
2. Mateo 28:19. «Por tanto, id, y doctrinad a todos los Gentiles, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo».
3. 2. Cor... 13:14. «La gracia del Señor Jesucristo, y el amor de Dios, Y la participación del Espíritu Santo sea con vosotros todos».
LA GENERACIÓN ETERNA DEL HIJO
1. Salmo 2:7. «Yo publicaré el decreto: Jehová me ha dicho: Mi hijo eres tú; yo te engendré hoy»
2. Juan 1:14. «Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad».
LA PROCESIÓN DEL ESPÍRITU SANTO.
1. Juan 15:26. «Empero cuando viniere el Consolador, el cual yo os enviaré del Padre. El Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, él dará testimonio de mí».

PARA ESTUDIO BÍBLlCO ADICIONAL

1. ¿En qué sentido podemos hablar de la Paternidad de Dios? 1 Cor... 8:6; Efesios 3:14-15; Hebreos 12:9; Santo 1:17. Véase también Núm. 16:22.
2. ¿Puede usted probar la Divinidad del Hijo hecho carne? Juan 1:1; 20:28; Fil. 2:6; Tito 2:13; Jer. 23:5-6; Isaías 9:6; Juan 1:3; Apoc. 1:8; Col. 1:17; Juan 14:1; 2ª Cor.. 13: 14.
3. ¿En qué forma prueban los pasajes siguientes la personalidad del Espíritu Santo? Gen. 12; 6:3; Lucas 12:12; Juan 14:26; 15:26; 16:8; Hechos 8:29; 13: 2; Rom. 8:11; 1ª Cor. 2:10-11.
4. ¿Cuáles obras se atribuyen al Espíritu Santo en Salmo 33:6; 104:30; Éx. 28:3; 2 Pedro 1 :21; 1 Cor... 3:16; 12:4 ss.?

PREGUNTAS PARA REPASO

1. ¿Podemos deducir la doctrina de la Trinidad de la naturaleza?
2. ¿Existen en Dios tres individuos completamente distintos?
3. ¿En el Divino ser están las unas Personas subordinadas a las otras?
4. ¿Cómo podemos probar la Trinidad por medio del Antiguo Testamento?
5. ¿Cuál es la prueba más contundente de la Trinidad?
6. ¿Cuáles son los mejores pasajes del Nuevo Testamento que la prueban?
7. ¿En qué diferentes sentidos se aplica a Dios el nombre de «Padre»?
8. ¿Qué obras se atribuyen de un modo especial a cada una de las Personas de la Trinidad?
9. ¿En qué distintos sentidos el término «Hijo» es aplicado a Cristo?
10. ¿Cuál es la característica especial de cada una de las Personas?
11. ¿Cómo puede usted probar que el Espíritu Santo es una Persona?

LECCIÓN: 8

LOS DECRETOS DIVINOS EN GENERAL

El decreto de Dios es su eterno plan o propósito, por el cual ha predestinado todas las cosas que suceden. Puesto que tal definición incluye muchos particulares, hablamos con frecuencia de los decretos divinos en plural, aunque en realidad existe sólo un decreto.
Este decreto cubre todas las obras de Dios en la creación y la redención, y abarca todas las acciones de los hombres, sin excluir sus acciones pecaminosas. Mientras este decreto hizo cierta la entrada del pecado al mundo, no hace a Dios responsable de nuestras acciones pecaminosas. Con respecto al pecado este decreto es un decreto permisivo.

CARACTERÍSTICAS DEL DECRETO

El decreto de Dios está fundado en la sabiduría, Efesios 3:9-11, aunque no siempre lo entendamos. Fue formado en las profundidades de la eternidad, y por lo tanto es eterno en el sentido más estricto de la palabra, Efesios 3: 11. Además es eficaz, de modo que todo aquello que está incluido en él, ocurre con toda certeza, Isaías 46: 10.
El plan de Dios es también inmutable, porque Dios es fiel y verdadero, Job 23: 13-14; Isaías 46:10; Lucas 22:22. Es también incondicional, a saber, que su ejecución no depende de acción humana alguna, sino que al Contrario es omnímodo, o sea que abarca las acciones buenas y malas de los hombres, Efesios 2: 10; Hechos 2:23, sucesos fortuitos, Gen. 50:20, la duración de la vida humana, Job. 14:5, Sal. 39:4, y los términos de su habitación, Hechos 17 :26. Tocante al pecado es permisivo.

OBJECIONES A LA DOCTRINA DE LOS DECRETOS DIVINOS

Hay muchos que no creen en esta doctrina de los decretos divinos y presentan en especial estas tres objeciones:
1. Que tal doctrina es inconsistente con la libertad moral del ser humano. La Biblia, en cambio, enseña que Dios ha decretado no tan sólo los actos libres del hombre, sino que el hombre es a pesar de todo libre en sus actos y responsable, Génesis 50: 19-20; Hechos 2: 23; 4: 27-29. Es cierto que no podemos armonizar completamente estos dos extremos, pero es evidente en las Escrituras que el uno no revoca o invalida al otro.
2. Que tal enseñanza hace a los hombres negligentes en buscar su salvación. Los que así razonan añaden que si Dios ya ha determinado de antemano los que han de ser salvos y los que no lo serán, es indiferente todo lo que éstos puedan hacer. Este razonamiento es erróneo, ya que ningún hombre sabe lo que Dios ha decretado respecto a él.  Además, Dios ha decretado no solamente el destino final del hombre, sino también los medios por los cuales tal destino se nevará a cabo. Puesto que el fin fue decretado solamente como resultado de los medios prescritos, más bien es un estímulo a usar tales medios que un motivo para desanimamos en su uso.
3. Que hace a Dios autor del pecado. Lo único que se puede decir sobre este decreto es que hace a Dios el autor de seres morales libres, y que éstos son en sí los autores del pecado. El pecado se hizo cierto por decreto divino, pero Dios mismo no lo produjo por su acción directa. Debemos admitir que el problema sobre la relación entre Dios y el pecado es en todo caso un misterio que somos incapaces de resolver.

LA PREDESTINACIÓN

La predestinación es el plan o propósito de Dios con respecto a sus criaturas morales.
La predestinación tiene que ver con todos los hombres, buenos y malos, los ángeles y los demonios, y con Cristo como Mediador. La predestinación incluye dos partes: la elección y la reprobación.

LA ELECCIÓN. LA BIBLIA NOS HABLA DE LA ELECCIÓN EN MÁS DE UN SENTIDO:

1. La elección del pueblo de Israel en el Antiguo Testamento para ser el pueblo de Dios, Deut. 4:37; 7:6-8; 10:15; Óseas 13:5.
2. La elección de ciertas personas para un servicio u oficio especial, Deut. 18:5; 1 Sam. 10 :24; Sal. 78:70; y
3. La elección de individuos para la salvación, Mateo 22:14; Romanos 11:5; Efesios 1:4. Es a esta fase última a la que nos referimos ahora y puede ser definida como el propósito eterno de Dios para salvar a algunos seres humanos de entre la raza humana en y por mediación de Cristo.

LA REPROBACIÓN

La doctrina de la elección implica por naturaleza que Dios no se propuso salvar a todos los hombres. Si era su propósito salvar solamente a algunos, era también natural que no salvara a los otros. También esto está de acuerdo con las enseñanzas de las Escrituras, Mateo 11:25-26; Romanos 9:13. 17, 18, 21, 21; 11:7, 8; 2ª Pedro 2: 9; Judas 4.
La reprobación ha sido definida como al propósito eterno de Dios de pasar por alto en la operación de su gracia especial a algunos hombres, y de castigarlos por sus pecados. Existe pues en la reprobación un doble propósito:
1) Pasar a algunos por alto con respecto al don de su gracia salvadora; y
2) Castigarlos por sus propios pecados.
Se ha dicho con frecuencia que la doctrina de la predestinación abre las puertas a la acusación de que Dios es injusto, pero no podría existir un equívoco mayor que éste.
El único motivo que nos permitiría hablar de injusticia divina sería solamente en el caso de que el hombre tuviera algún derecho sobre Dios, y en el caso de que Dios le debiera al hombre su eterna salvación.
Pero puesto que todos los hombres, sin excepción, han perdido el derecho a las bendiciones de Dios, la situación es muy diferente. Nadie tiene el derecho más mínimo a pedir cuentas a Dios por el hecho de haber elegido a algunos y rechazado a otros. Dios habría continuado siendo perfectamente justo, si no hubiera salvado a ninguno, Mateo 20: 14-15; Rom. 9: 14-15.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

SOBRE EL DECRETO DIVINO EN GENERAL

1. Efesios 1:11. «En él digo, en quien asimismo tuvimos suerte, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el consejo de su voluntad».
2. Salmo 33:11. «El consejo de Jehová permanecerá para siempre; los pensamientos de su corazón por todas las generaciones».
3. Isaías: 46:10. «Que anunció lo por venir desde el principio, y desde antiguo lo que aun no era hecho; que dijo: Mi consejo permanecerá, y haré todo lo que quisiere».
LA PREDESTINACIÓN
1. Efesios 1:11. Véase más arriba.
2. Salmo 2:7. «Yo publicaré el decreto: Jehová me ha dicho: Mi hijo eres tú; yo te engendré hoy».
3. Efesios 1:4-5. «Según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mácula delante de él en amor; habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos por Jesucristo a sí mismo, según el puro afecto de su voluntad».
4. Romanos 11:5. «Así también, aun en este tiempo han quedado reliquias por la elección de gracia».
5. Romanos 9:13. «Como está escrito: A Jacob ame, mas a Esaú aborrecí».
6. Romanos 9:18. “De manera que del quiere tiene misericordia; y al que quiere, endurece”

PARA ESTUDIO BÍBLlCO ADICIONAL

1. ¿Es la presciencia lo mismo que la predeterminación o predestinación? Hechos 2: 23; Rom. 8: 29; 11¬2; 1 Pedro 1:2.
2. ¿En qué forma nos enseña la Biblia que Cristo fue asimismo el objeto de la predestinación? ¿En qué sentido debemos interpretar Salmo 2:7; Isaías 42:1 1ª Pedro 1: 20; 2:4?
3. ¿Qué indicaciones tenemos de que también los ángeles fueron objetos de la predestinación? ¿Qué debemos pensar de 1ª Timoteo 5:21?

PREGUNTAS PARA REPASO

1. ¿Qué cosa es el decreto divino?
2. ¿Por qué hablamos algunas veces de «decretos en plural?
3. ¿Cuáles son las características del decreto?
4. ¿Cuál es la naturaleza del decreto divino concerniente al pecado?
5. ¿Qué objeciones se han levantado en contra de la doctrina de los decretos'?
6. ¿Qué podemos decir en respuesta a las mismas?
7. ¿Qué relación existe entre la predestinación y el decreto divino en general?
8. ¿En que forma debemos interpretar la predestinación de los ángeles y la de Cristo?
9. ¿En que formas nos habla la Biblia sobre la elección?
    10. ¿Qué está incluido en la reprobación, y que pruebas tenemos de ello?
    11. ¿Significa injusticia por parte de Dios la doctrina de la predestinación? ¿Por qué no?

LECCIÓN 9:

LA CREACIÓN

Nuestra discusión sobre los decretos divinos nos conduce al examen de su ejecución, es decir, a la obra de la creación que señala su comienzo. Este es el principio y base de toda revelación y el fundamento de la vida religiosa.

LA CREACIÓN EN GENERAL

La palabra creación no siempre se usa en la Biblia con el mismo significado. En su sentido estricto tal palabra denota la obra de Dios por la cual produjo el universo y todo lo que en él hay, en parte sin el uso de materiales pre-existentes, pero también usando materiales que por su naturaleza son inapropiados para la manifestación de Su gloria.
La creación es obra del Dios trino, Génesis 1:2, Job. 26: 13; 33:4; Salmo 33: 6; Isaías 40:12-13; Juan 1: 3; 1 Cor 8: 6; Col. 1: 15-17. En contra del Panteísmo debemos sostener que la creación fue un acto libre de Dios. Es decir, Dios no necesitaba al universo material, Efesios 1:11; Apoc. 4:11.
Contra el deísmo afirmamos que Dios creó al universo de tal modo que dependiera de Él para siempre. Es pues Dios quien debe sostenerlo de día en día, Hechos 17:28; Hebreos 1:3.

EL TIEMPO DE LA CREACIÓN

La Biblia nos enseña que Dios creó el mundo «en el principio», es decir, al principio de todas las cosas temporales. Detrás de este «principio» nos hallamos frente a una eternidad infinita. La primera parte de la obra creadora nos es mencionada en Génesis 1: 1 y fue la creación sin material pre-existente o mejor dicho creación de la nada.
La expresión «crear de la nada» no se encuentra en la Biblia, sino solamente en uno de los libros apócrifos, 2 Macabeos 7:28. La idea de creación de la nada se encuentra encerrada en los pasajes siguientes: Génesis 1:1; Salmo 33:9; 148: 5; Romanos 4: 7 y Hebreos 11: 3.

EL PROPÓSITO FINAL DE LA CREACIÓN

Algunos enseñan que el propósito de la creación es la felicidad del hombre. Arguyen que Dios no puede ser en sí mismo el propósito final de la creación porque Dios es un ser suficiente en sí mismo. Al contrario, el hombre existe por Dios y no Dios para el hombre. La Biblia nos enseña claramente que Dios creó al mundo para así manifestar Su gloria. Naturalmente esta manifestación de su gloria no tiene por objeto promover una cierta admiración por parte de la criatura, sino que desea contribuir a su bienestar, hacer surgir en sus corazones la adoración al Creador. Isaías 43:7; 60:21; 61:3; Ezequiel 36:21-22; 39:7; Lucas 2:14; Romanos 9:17; 11; 36; 1 Cor... 15:28; Efesios 1:5. 6, 12, 14; 3:9-10; Col. 1:16.

SUSTITUTOS PARA LA DOCTRINA DE LA CREACIÓN

Los que rehúsan aceptar la doctrina de la creación presentan las siguientes teorías para explicar el universo.
1. Algunos dicen que la materia original es eterna y que el universo surgió de ella por pura casualidad o por efecto de alguna fuerza superior. Esta teoría incurre en la contradicción de suponer la existencia de dos cosas eternas e infinitas, existiendo la una al lado de la otra, es decir, la materia y la fuerza. Tal explicación es lógicamente imposible.
2. Otros mantienen que Dios y el universo son en realidad una sola cosa y que el universo es la consecuencia necesaria o producto del divino ser. Esta teoría quita a Dios el poder de su propia determinación, y niega a los hombres su libertad y su carácter moral y responsable. Al mismo tiempo hace a Dios autor del mal que existe en el mundo.
3. Finalmente algunos se refugian en la teoría de la evolución. La evolución no ofrece solución alguna para explicar el origen del mundo, ya que en principio supone la existencia de algo que se desarrolla gradualmente.

EL MUNDO ESPIRITUAL

Dios no tan sólo creó un universo material sino que creó también un mundo espiritual angélico.
PRUEBA PARA LA EXISTENCIA DE LOS ÁNGELES
La teología liberal moderna ha abandonado su fe en los seres espirituales. La Biblia, al contrario, asume su existencia y les atribuye una personalidad real. 2 Samuel 14:20; Mateo 24:36; Judas 6; Apoc. 14:10. Algunos enseñan que los ángeles tienen cuerpos etéreos, pero esto es contrario a las Escrituras. Los ángeles son seres espirituales y puros (aunque algunas veces se nos presentan en formas materiales), Efesios 6:12; Hebreos 1:14, sin carne y huesos, Lucas 24:39, y por tanto invisibles, Col. 1:16. Algunos de ellos Son buenos, santos y elegidos, Marcos 8:38; Lucas 9:26; 2 Cor... 11:14; 1 Tim. 5:21; Apoc. 14:10, y otros cayeron de su estado original y consecuentemente son seres malos, Juan 8:44; 2 Pedro 2:4; Judas 6.
CLASES DE ÁNGELES
Es evidente que existen diferentes clases de ángeles. La Biblia nos habla de los querubines, quienes revelan el poder, majestad y gloria de Dios, y guardan su santidad en el jardín del Edén, en el tabernáculo y el templo. Génesis 3:24; Ex 25:18; 2 Sam 22:11; Sal. 18:10; 80:1; 99:1; Isaías 37:16. Además encontramos a los serafines mencionados solamente en Isaías 6:2, 3. 6. Los serafines son los siervos de Dios en su trono, cantan alabanzas a El y están siempre listos para hacer sus propósitos. Su fin es reconciliar y preparar a los hombres para que se acerquen debidamente a Dios.
Dos de los ángeles los conocemos por su nombre. El primero es Gabriel, Dan. 8:16; 9:21 Lucas 1:10, 26. Su tarea especial era comunicar a los hombres revelaciones divinas e interpretadas. El segundo es Miguel, Daniel 10:13, 21; Judas 9; Apoc. 12:7.
En la carta de Judas recibe el nombre de arcángel. Es un luchador valiente que pelea las, batallas de Dios contra los enemigos de Su pueblo y los poderes malos en el mundo espiritual. La Biblia menciona también varios términos generales a saber, principados, potestades, tronos, dominios, señoríos, Efesios 1 :21; 3 :10; Col. 1 :16; 2: 10; 1 Pedro 3 :22. Estos nombres denotan diferencias en jerarquía y dignidad entre los ángeles.
LA OBRA DE LOS ÁNGELES
Los ángeles adoran y alaban a Dios sin cesar, Salmo 130:20; Isaías 6, Apoc. 5:11.
Desde que el pecado entró en el mundo, los ángeles sirven a los herederos de la salvación, Hebreos 1 :14, se gozan en la conversión de los pecadores, Lucas 15 :10, guardan a los creyentes, Salmo 34:7; 91 :11, protegen a los pequeños, Mateo 18:10, se hallan presentes en la iglesia, 1 Cor. 11 :10; Efesios 3 :10; 1 Tim. 5 :21, y conducen a los creyentes al seno de Abraham, Lucas 16 :22. A menudo son los portadores de revelaciones especiales de Dios, Daniel 9:21-23, Zac. 1:12-14. Imparten las bendiciones de Dios a su pueblo, Salmo 91:11-12; Isaías 63:9; Dan .6:22; Hechos 5:19 y ejecutan los juicios de Dios contra sus enemigos, Génesis 19: 1, 13; 2 Reyes 19:35; Mateo 13:41.
LOS ÁNGELES MALOS
Aparte de los ángeles buenos hay también ángeles malos que se gozan en oponerse a Dios y destruir su obra. Estos ángeles fueron creados buenos, pero no llegaron a retener su posición original, 2 Pedro 2:4; Judas 6. No sabemos exactamente cuál fue su pecado, pero probablemente se rebelaron contra Dios y aspiraron a su divina autoridad, v. 2 Tes. 2:4, 9. Satán, que era un príncipe entre los ángeles, vino a ser el jefe de los que cayeron en pecado, Mateo 25:41; 9:34; Efesios 2:2. Con sus poderes sobrenaturales Satán y sus huestes tratan de destruir la obra de Dios. Sabemos que tratan de cegar y engañar hasta a los elegidos, y dan ánimo a los pecadores para que sigan en sus malos caminos.

EL UNIVERSO MATERIAL

En Génesis 1:1 encontramos la historia de la creación original de los cielos y la tierra. El resto del capítulo nos explica lo que algunos han llamado la creación secundaria, es decir, cómo Dios llevó a cabo la creación del mundo en seis días.
LOS DÍAS DE LA CREACIÓN
Se ha deliberado mucho sobre la cuestión de si los días de la creación fueron días ordinarios o no. Los geólogos y los proponentes de la teoría de la evolución nos hablan de largos períodos de tiempo. Es cierto que la palabra «día» en la Escritura no siempre significa un día de 24 horas. Véase: Génesis 1: 5; 2:4; Salmo 50: 15; Eclesiastés 7: 14; Zac. 4:10. Sin embargo, creemos que las siguientes consideraciones favorecen el interpretar los días de la creación como días de 24 horas:
1. La palabra hebrea yom (día) denota normalmente un día ordinario, y a menos que el contexto requiera otra interpretación, deberíamos entenderlo como un día de 24 horas.
2. La repetición de las expresiones «mañana» y «tarde» favorece esta interpretación.
3. Fue también un día de 24 horas que Dios separó como a día de descanso al final de la creación.
4. Éxodo 20: 9-11 nos enseña que Israel debe trabajar seis días y descansar el séptimo, porque Jehová hizo los cielos y la tierra en seis días y descansó el séptimo.
5. Es evidente que los tres últimos días fueron días de 24 horas porque se hallaban determinados por la relación de la tierra al sol. Ahora bien, si los tres últimos días eran de 24 horas, ¿por qué no los cuatro primeros?
LA OBRA DE LOS SEIS DÍAS
En el primer día Dios creó la luz y formó el día y la noche al separar la luz de las  tinieblas. Esto no contradice el hecho de que el sol, la luna y las estrellas fueron creados en el cuarto día, ya que los astros no son la misma luz sino solamente lumbreras. La obra del segundo día fue también una obra separadora. Dios separó las aguas superiores e inferiores y estableció el firmamento. En el tercer día la obra de separación continuó con la separación del mar y la tierra Seca. Además Dios estableció en este día el reino vegetal, los árboles y las plantas.
Por el poder de su Palabra Dios hizo que la tierra produjese plantas sin flor, vegetales y árboles frutales cada uno según su simiente y clase. En el cuarto día Dios creó el sol, la luna y las estrellas para varios fines, es decir, para dividir el día de la noche, ser señales de las condiciones atmosféricas, regular la sucesión de días, meses y años y de las estaciones, pero al mismo tiempo para ser lumbreras de la tierra.
La obra del quinto día fue la creación de pájaros y peces, los habitantes del aire y del agua. Finalmente, el sexto día marcó el clímax de la obra creadora. Dios creó los animales superiores, y como corona de esta creación puso al hombre hecho a la imagen de Dios. El cuerpo del hombre fue hecho del polvo de la tierra, pero su alma fue producto de la creación inmediata de Dios. En el séptimo día Dios descansó de su obra y se alegró al contemplar la misma.
Notemos el paralelo que existe entre la obra de los tres primeros días y de los tres últimos:
1. Creación de la luz.
2. Creación de la expansión y separación de las aguas.
3. Separación de las aguas y la tierra seca y preparación de ésta para ser la habitación de los animales y el hombre.
4. Creación de las lumbreras.
5. Creación de los pájaros del aire y de los peces del mar.
6. Creación de las bestias del campo, ganado y reptiles, y finalmente del hombre.
LA TEORÍA DE LA EVOLUCIÓN
Los evolucionistas tratan de sustituir el origen bíblico de la creación por sus propios puntos de vista y teorías. Dicen que todas las especies de plantas y animales, incluyendo al hombre, y que las diferentes manifestaciones de vida tales como la inteligencia, moralidad y religión se desarrollaron por un proceso natural perfecto, simplemente como resultado de las fuerzas de la Naturaleza. Sin embargo, tal teoría es una simple suposición y tiene innumerables errores. Además está en serio conflicto con el relato de la creación que encontramos en la Biblia.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

LA CREACIÓN.
1. Génesis 1:1. «En el principio crió Dios los cielos y la tierra».
2. Salmo 33:6. «Por la palabra de Jehová fueron hechos los cielos, y todo el ejército de ellos por el espíritu de su boca».
3. Juan 1:3. «Todas las cosas por él fueron hechas; y sin él nada de lo que es hecho fue hecho».
4. Hebreos 11:3. «Por la fe entendemos haber sido compuestos los siglos por la palabra de Dios, siendo hecho lo que se ve, de lo que no se veía».
EL PROPÓSITO FINAL DE LA CREACIÓN
1. Isaías 43:6-7. «Trae... todos los llamados de mi nombre; para gloria mía los crié, los formé, y los hice».
2. Salmo 19:1-2. «Los cielos cuentan la gloria de Dios, y la expansión denuncia la obra de sus manos».
3. Salmo 148:13. «Alaben el nombre de Jehová, porque sólo su nombre es elevado; su gloria es sobre tierra y cielos».
LOS ÁNGELES
1. Salmo 103:20. «Bendecid a Jehová, vosotros sus ángeles, poderosos en fortaleza. Que ejecutáis su palabra, obedeciendo a la voz de su precepto».
2. Hebreos 1:14. ¿No son todos espíritus administradores, enviados para servicio a favor de los que serán herederos de salud?
3. Judas 6. «Y a los ángeles que no guardaron su dignidad, mas dejaron su habitación, los ha reservado debajo de oscuridad en prisiones eternas hasta el juicio del gran día».
EL TIEMPO DE LA CREACIÓN
1. Génesis 1:1. «En el principio crió Dios los cielos Y la tierra».
2. Éxodo 20:11. «Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, la mar y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día: por tanto Jehová bendijo el día de reposo y lo santificó».
PARA ESTUDIO BÍBLlCO ADICIONAL
1. ¿En qué sentido se usa la palabra «crear» en Salmo 51:10; 104:30; Isaías 45:7?
2. ¿Podemos decir que Génesis 1:11, 12, 20, 24, favorecen la teoría de la evolución? Véase también Génesis 1:21, 25; 2:9.
3. ¿Qué nos enseñan los siguientes pasajes sobre el pecado de los ángeles? 2 Pedro 2:4; Judas 6; véase también 2 Tesalonicenses 2:4-12.
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Qué es la creación?
2. La creación ¿fue un acto libre de Dios o necesario?
3. ¿Usamos siempre en las Escrituras la palabra 'crear' en el mismo sentido?
4. ¿Podemos probar con la Biblia que la creación fue hecha de la nada?
5. ¿Cuáles Son las dos teorías sobre el propósito final de la creación?
6. ¿En qué sentido decimos que la gloria de Dios es el propósito final de la creación?
7. ¿Qué teorías tratan de sustituir la doctrina bíblica de la creación?
8. ¿Cuál es la naturaleza de los ángeles?
9. ¿Qué categorías de ángeles encontramos en la Biblia?
   10. ¿Cuál es la obra de Gabriel y de Miguel?
   11. ¿Cuál es la obra de los ángeles en general?
   12. ¿'Qué pruebas tenemos de que existen ángeles malos?
   13. ¿Fueron creados malos por naturaleza?
   14. ¿Los días de la creación fueron días ordinarios o largos períodos?
   15. ¿Qué hizo Dios en cada uno de los siete días de la creación?
   16. ¿La teoría de la evolución armoniza con la doctrina bíblica de la creación?
   17. ¿En qué puntos difiere de la misma?

LECCIÓN 10

LA PROVIDENCIA

Puesto que Dios no sólo creó al mundo sino que también lo sostiene, la doctrina de la creación nos conduce lógicamente a la doctrina de la providencia. Podemos definirla así: La providencia es aquella operación divina por la cual Dios cuida de todas sus criaturas, manifiesta su actividad en todo lo que ocurre en el mundo, y dirige todas las cosas hacia un fin predeterminado. Esta doctrina incluye tres elementos, el primero es el ser divino, el segundo su actividad, y el tercero es el propósito de todas las cosas.

LOS ELEMENTOS DE LA PROVIDENCIA DIVINA. PODEMOS DISTINGUIR TRES:

LA CONSERVACIÓN DIVINA
Es aquella obra continua de Dios por la cual sostiene todo lo que existe. Aunque el mundo tiene una existencia diferente del ser divino y no es parte de Dios, a pesar de todo la base de esta existencia continua del mundo es Dios mismo. Permanece así porque Dios manifiesta continuamente su poder, por el cual todas las cosas retienen su ser y su actividad. Encontramos tal doctrina en los pasajes siguientes: Salmo 136:25; 145:5; Nehemías 9: 6; Hechos 17:28; Colosenses 1:17; Hebreos 1:3.
LA CONCURRENCIA DIVINA
Es aquella obra divina por la cual Dios coopera con todas sus criaturas y hace que obren precisamente tal como obran. Ello implica que hay causas secundarias en el mundo como los poderes de la naturaleza y la voluntad humana, pero afirma que los tales no actúan independientemente de Dios. Dios obra en cada acto de sus criaturas, no solamente en sus actos buenos sino también en los malos. Dios los estimula para la acción, acompaña tal acción en todo momento y hace que tal acción sea eficaz.
De todos modos no debemos suponer que Dios y hombre sean causas iguales; Dios es la causa primaria y el hombre la causa secundaria. Tampoco debemos concebir tal cooperación como si cada agente hiciera una parte de la misma. Toda obra es enteramente un acto de Dios y un acto del hombre en su totalidad. Además, deberíamos tener presente que esta cooperación no hace a Dios responsable de los actos malos del hombre. Encontramos las bases de tal doctrina en las Escrituras, Deuteronomio 8:18; Salmo 104:20, 21, 30; Amos 3:6; Mateo 5:45; 10:29; Hechos 14:17; Filipenses 2:13.
EL GOBIERNO DIVINO
Es la actividad continua de Dios por la cual gobierna todas las cosas de modo que sirvan para el objeto por el cual fueron creadas. Tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento nos presentan a Dios como Rey del universo. Dios adapta su gobierno a la naturaleza de las criaturas que El rige. Así su gobierno físico difiere de su gobierno del mundo espiritual. El gobierno divino es universal, Salmo 103: 19; Daniel 4:34-35, e incluye los seres más insignificantes, Mateo 10:29:31, y aun aquello que parece accidental, Proverbios 16:33. Asimismo tiene que ver con las obras buenas y malas del hombre, Filipenses 2:13: Génesis 50:20 y Hechos 14:16.

FALSOS CONCEPTOS SOBRE LA PROVIDENCIA DIVINA

Al estudiar la doctrina de la providencia debemos evitarnos contra dos errores:
EL ERROR DEÍSTA
Los deístas enseñan que Dios sólo se preocupa del mundo de un modo muy general. Dios, según ellos, creó al mundo, estableció sus leyes, lo puso en movimiento, y luego lo abandonó. Es decir, le dio cuerda como si fuera un reloj y dejó que siguiera su curso. Sólo cuando algo se desequilibra Dios interviene en su curso normal. Dios es pues un Dios alejado del mundo.
EL ERROR PANTEÍSTA
El panteísmo no reconoce la diferencia que existe entre Dios y el mundo. Al hacer tal cosa, los identifica y no deja lugar para la obra de la providencia divina en el verdadero sentido de la palabra. El panteísmo enseña que en un sentido estricto no existen causas secundarias y que Dios es el autor directo de todo lo que ocurre en el mundo. Así aun los actos que atribuimos al hombre son realmente actos divinos. Dios es sólo un Dios que está cerca y no lejos de nosotros.

LA PROVIDENCIA EXTRAORDINARIA O MILAGROS

Distinguimos entre la providencia general y la especial, y en esta última los milagros ocupan un lugar importante. El milagro es una obra sobrenatural de Dios, es decir, una obra que Dios ejecuta sin la mediación de causas secundarias. Aun cuando Dios aparentemente usa causas secundarias en la ejecución de milagros, lo hace de forma tan extraordinaria, que tal obra es siempre algo sobrenatural.
Algunos niegan los milagros diciendo que rompen las leyes de la naturaleza, pero se hallan en un grave error. Las leyes de, la naturaleza simplemente representan la forma ordinaria en el método de obrar divino. El hecho de que Dios obra generalmente de acuerdo a un orden definido, no significa que Dios no pueda apartarse del orden establecido sin frustrarlo o estorbarlo, para efectuar obras extraordinarias. Por ejemplo, cualquier hombre puede levantar su mano y arrojar al aire una pelota a pesar 'de la ley de la gravedad, y sin estorbarla. Ciertamente, los milagros no son imposibles para un Dios omnipotente. Además, los milagros Son medios de la revelación divina. Números 16:28; Jeremías 32:20; Juan 2.11; 5:36.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

LA CONSERVACIÓN DIVINA
1. Salmo 36:6b. «Oh Jehová, al hombre y al animal conservas».
2. Nehemías 9:6. «Tú oh Jehová, eres solo; tú hiciste los cielos, y los cielos de los cielos, y toda su milicia, la tierra y todo lo que está en ella, los mares y todo lo que hay en ellos; y tú vivificas todas estas cosas».
3. Colosenses 1: 17. «Y él es antes de todas las cosas, y por él todas las cosas subsisten».
CONCURRENCIA
1. Deuteronomio 8:18a. «Antes acuérdate de Jehová tu Dios: porque él te da el poder para hacer las riquezas».
2. Amós 3:6. « ¿Tocarás la trompeta en la ciudad, y no se alborotará el pueblo? ¿Habrá algún mal en la ciudad, el cual Jehová no haya hecho?»
3. Filipenses 2:13. «Porque Dios es el que en vosotros obra, así el querer como el hacer, por su buena voluntad».
GOBIERNO
1. Salmo 103:19. «Jehová afirmó en los cielos su trono; y su reino domina sobre todos».
2. Daniel 4:3b. «Su reino sempiterno, y su señorío hasta generación y generación».
3. 1 Timoteo 6:15. «La cual a su tiempo mostrará el Bienaventurado y solo Poderoso, Rey de reyes, y Señor de señores».
LOS MILAGROS Y SU PROPÓSITO
1. Éxodo 15: 11. « ¿Quién como tú, Jehová, entre los dioses? ¿Quién como tú, magnífico en santidad, terrible en loores, hacedor de maravillas?»
2. Salmo 72:18. «Bendito Jehová Dios, el Dios de Israel, que sólo hace maravillas».
3. Marcos 2:10. «Pues para que sepáis que el Hijo del hombre tiene potestad en la tierra de perdonar los pecados (dice al paralítico): A ti te digo: Levántate, y toma tu lecho y vete a tu casa».
4. Juan 2:11. «Este principio de señales hizo Jesús en Caná de Galilea, y manifestó su gloria; y sus discípulos creyeron en él».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. Cite algunos ejemplos de la providencia especial. Véase: Deuteronomio 2:7, 1 Reyes 17:6; II Reyes 4:6; Mateo 14:20.
2. ¿En qué forma nuestra fe en la providencia divina debería afectar los cuidados de la vida? Isaías 41:10; Mateo 6:32; Lucas 12:7; Filipenses 4:6-7; 1 Pedro 5:7.
3. Cite algunas de las bendiciones de la providencia divina. Véase Isaías 25:4; Salmo 121:4; Lucas 12: 7; Deuteronomio 33:27; Salmo 37:28; n Timoteo 4: 18.
PREGUNTAS PARA EL REPASO
1. ¿Qué relación existe entre la doctrina de la providencia y la de la creación?
2. ¿Qué cosa es la providencia divina?
3. ¿Qué diferencia existe entre la providencia general y la especial?
4. ¿Quiénes son objeto de la providencia divina?
5. ¿Cuáles son los tres elementos de la providencia y en qué se diferencian?
6. ¿Qué debemos pensar sobre la concurrencia divina?
7. ¿Hasta qué punto se extiende el gobierno divino?
8. ¿Qué es un milagro y cuál es el propósito de los milagros bíblicos?
9. ¿Por qué motivos hay personas que consideran los milagros como algo imposible?

LECCIÓN 11.

EL HOMBRE EN SU ESTADO ORIGINAL

Después de haber considerado la doctrina de Dios pasamos al estudio de la doctrina del hombre, que es la corona de la obra de Dios.

LOS ELEMENTOS ESENCIALES DE LA NATURALEZA HUMANA

El punto de vista más corriente es que el hombre está compuesto de dos partes, el cuerpo y el alma. Tal creencia está en armonía con el sentimiento humano y también con las Escrituras que nos hablan del hombre como a un ser compuesto de «cuerpo y alma». Mateo 6:25; 10:28 o bien de «espíritu y cuerpo», Eclesiastés 12:7; 1 Corintios 5:3, 5. Algunos creen que las palabras «alma» y «espíritu» denotan elementos diferentes y que por tanto el hombre consiste en «cuerpo, alma y espíritu». Véase 1 Tesalonicenses 5:23.
En cambio, es evidente que las palabras «alma» y «espíritu» se usan sinónimamente. La muerte nos es descrita como un «salir del alma», Génesis 53:18; 1 Reyes 17:21 y otras veces como a la salida del espíritu, Lucas 23:46; Hechos 7:59. Los muertos reciben el nombre de «almas» en algunos casos, Apocalipsis 9:6 y 20:4, pero en otros casos el de «espíritus», 1 Pedro 3:19 y Hebreos 12:23. Estos términos denotan al elemento espiritual del hombre visto desde diferentes puntos de vista. Como a «espíritu» es el principio de vida y acción que controla al cuerpo, y como a «alma» es el sujeto personal que piensa, siente, quiere y es origen de los afectos.
EL ORIGEN DEL ALMA
Existen tres diferentes opiniones sobre el origen del alma humana.
PRE-EXISTENCIA
Algunos enseñan que las almas humanas existieron en un estado anterior y que algo ocurrió que explica su condición presente. Para algunos tal hipótesis les ha ayudado a explicar el hecho de que el hombre nace en pecado, pero tal opinión ha sido generalmente descartada.
TRADUCIANISMO
Según los que así creen el hombre deriva su alma, del alma de sus padres. Esta es la opinión común en las Iglesias Luteranas. Sus argumentos son el que no se halle en lugar alguno un relato sobre la creación del alma de Eva y que en otros lugares de la Biblia se habla de los descendientes como que están en los lomos de sus padres, Génesis 46:26; Hebreos 7:9-10. Favorece tal opinión el que en los seres humanos y aun en los animales hay características de familia que pasan de los viejos a los jóvenes, y en el caso de los hombres los hijos heredan de sus padres la naturaleza pecaminosa, algo que tiene más que ver con el alma que con el cuerpo.
Sin embargo, tal opinión se enfrenta con serias dificultades, ya que hace a los padres creadores de sus hijos en cierto sentido, o asume que el alma humana puede ser dividida en varias partes. Así mismo pone en peligro la doctrina de la naturaleza sin pecado de Cristo.
CREACIONISMO
El creacionismo sostiene que el alma es la creación directa de Dios en un tiempo que no puede ser determinado con precisión. Las almas son creadas puras pero se contaminan Con' el pecado antes del nacimiento al entrar en contacto con el pecado que azota a la humanidad. Esta opinión es muy común entre las iglesias reformadas.
En favor de la misma encontramos que la Biblia asigna orígenes diferentes al cuerpo y al alma, Eclesiastés 12:7; Isaías 42:5; Zacarías 12:1; Hebreos 12:9. Además armoniza bien con la naturaleza espiritual del alma y con la naturaleza sin pecado de Jesús.
Pero también tiene sus dificultades, ya que no explica el origen de peculiaridades y características hereditarias, y para algunos quizá parezca que hace a Dios autor de las pecaminosas.

EL HOMBRE COMO IMAGEN DE DIOS

El hombre, según la Biblia, fue creado a imagen y semejanza de Dios. Génesis 1:26 enseña que Dios dijo: «Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza». Ambas palabras «imagen» y «semejanza» denotan la misma cosa y los pasajes siguientes prueban que se usan sinónimamente: Génesis 1:26, 27; 5:1; 9:6; 1 Corintios 11:7; Colosenses 3:10; Santiago 39. La palabra «semejanza» probablemente denota que tal imagen es muy parecida o similar. Hay varias opiniones sobre la imagen de Dios en el hombre:
LA DE LA IGLESIA CATÓLICA ROMANA.
Los católicos romanos encuentran la imagen de Dios en ciertos dones naturales que el hombre posee, tales como la espiritualidad del alma, la libre voluntad y la inmortalidad. Al tal Dios añade otro don sobrenatural llamado justicia original para reprimir a la naturaleza inferior. Esto, según ellos, es la imagen de Dios en el hombre.
LA DE LAS IGLESIAS LUTERANAS
Los luteranos no están completamente de acuerdo entre sí sobre tal punto, pero la opinión más generalmente aceptada es que la imagen de Dios consiste en aquellas cualidades espirituales que fueron otorgadas al hombre durante la creación, es decir, verdadero conocimiento, justicia y santidad. A las tales se llama justicia original. Sin embargo tal opinión es demasiado estrecha y restringida.
LA DE LAS IGLESIAS REFORMADAS
Los reformados distinguen entre la imagen natural y la imagen moral de Dios. La primera es mucho más amplia y abarca el ser moral, racional, espiritual e inmortal del hombre. Tal imagen fue obscurecida pero no destruida por el pecado. La imagen moral de Dios se usa en sentido más restringido para expresar la verdadera justicia, conocimiento y santidad que el hombre perdió por el pecado original.
Estas características nos son restituidas en Cristo, Efesios 4:24 y Colosenses 3:10. Puesto que el hombre retuvo la imagen de Dios en el sentido más amplio puede aun ser llamado portador de la imagen de Dios; Génesis 9:6; 1 Corintios 11:7; 15:49; Santiago 3:9.

EL HOMBRE EN EL PACTO DE LAS OBRAS

Dios inmediatamente estableció un pacto con el hombre. Este pacto original ha sido llamado el pacto de las obras.
TESTIMONIO BÍBLICO SOBRE EL PACTO DE LAS OBRAS
1. En Rom. 5:12-21 el apóstol Pablo establece un paralelo entre Adán y Cristo. En Adán todos mueren, más en Cristo todos aquellos que son suyos reciben la vida. Esto. Significa que Adán era el representante y cabeza de todos los hombres tal como ahora Cristo es cabeza y representante de todos los que son suyos.
2. En Óseas 6:7 leemos: Mas ellos, como Adán, traspasaron el pacto. El pecado de Adán es llamado una trasgresión del pacto.
LOS ELEMENTOS DEL PACTO DE LAS OBRAS.
1. Las partes. Todo pacto es siempre un convenio entre dos partes. En este caso son el trino Dios, Señor y Soberano del universo y Adán como representante de la raza humana. Puesto que estas dos partes son muy desiguales, el pacto es más bien un arreglo impuesto al hombre.
2. La promesa. La promesa del pacto es una promesa de vida en su más alto significado, vida por encima de toda posibilidad de la muerte. Esta vida es la que ahora los creyentes reciben por mediación de Jesucristo, el segundo Adán.
3. La condición. La condición del pacto era obediencia absoluta. El mandato positivo de no comer del árbol de la ciencia del bien y del mal, era ni más ni menos que una prueba de tal obediencia.
4. El castigo. El castigo era la muerte en su sentido más amplio, muerte física, espiritual y eterna. Esto es, no tan sólo la separación del cuerpo y el alma sino también la separación del alma y Dios.
5. Los sacramentos. El árbol de la vida era con toda probabilidad el único sacramento de este pacto, si se le puede llamar con el nombre de sacramento. En este sentido era un símbolo y sello de la vida.
VALIDEZ PRESENTE DEL PACTO DE LAS OBRAS
Los Arminianos mantienen que este pacto fue abolido completamente, pero tal opinión no es correcta. Las demandas de perfecta obediencia están aun en vigor para aquellos que no aceptan la justicia de Cristo, Levítico 18:5; Gálatas 3:12. Aunque el hombre no pueda cumplir tal justicia, la condición permanece la misma. Sin embargo, no tiene aplicación a aquellos que se hallan en Cristo Jesús ya que El cumplió las demandas de la ley en su lugar. Asimismo el pacto de las obras cesó de ser un camino para la vida, y permaneció desprovisto de su poder después de la caída del hombre.
1. Los elementos de la naturaleza humana.
A. Mateo 10:28. «Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar: temed antes a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno».
B. Romanos 8:10. «Empero si Cristo está en vosotros el cuerpo a la verdad está muerto a causa del pecado: mas el espíritu vive a causa de la justicia».
2. La creación del alma.
A. Eclesiastés 12:7. «Y el polvo se torne a la tierra como era, y el espíritu se vuelva a Dios que lo dio».
B. Hebreos 12:9. «Por otra parte, tuvimos por castigadores a los padres de nuestra carne, y los reverenciábamos. ¿Por qué no obedeceremos mejor al Padre de los espíritus, y viviremos»
3. La creación del hombre a la imagen de Dios.
A. Génesis 1:27. «Y crió Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo crió; y varón y hembra los crió».
B. Génesis 9:6. «El que derramare sangre del hombre, por el hombre su sangre será derramada; porque a imagen de Dios es hecho el hombre».
4. El hombre tiene un algo de la imagen de Dios.
A. Véase el versículo anterior, Génesis 9:6.
B. Santiago 3:9. «Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, los cuales son hechos a la semejanza de Dios».
5. La restauración de la imagen de Dios en el hombre.
A. Efesios 4:24. «Y vestir el nuevo hombre que es criado conforme a Dios en justicia y en santidad de verdad».
B. Colosenses 3: 10. «Y revestíos del nuevo, el cual por el conocimiento es renovado conforme a la imagen del que lo crió».
6. El pacto de las obras.
A. Óseas 6:7. «Mas ellos, cual Adán, traspasaron el pacto».
B. 1 Corintios 15:22. «Porque así como en Adán todos mueren, así también en Cristo todos serán vivificados»

PARA ESTUDIO BIBLICO ADICIONAL

1. ¿Cómo podemos explicar aquellos pasajes que parecen enseñar que el hombre consiste de tres elementos? Véase 1 Tesalonicenses 5:23; Hebreos 4: 12; compárese con Mateo 22:37.
2. ¿El dominio del hombre sobre el resto de la creación es así mismo parte de la imagen de Dios? Génesis 1:26, 28; Salmo 8:6-8; Hebreos 2:5-9.
3. ¿Qué indicios de un pacto podemos encontrar en Génesis 2 y 3?
PREGUNTAS PARA EL REPASO
1. ¿Cuál es el punto de vista más general sobre los elementos de la naturaleza humana y cómo podemos probarlo?
2. ¿Qué otra opinión existe y sobre qué pasajes parece tener su fundamento?
3. ¿Qué diferentes teorías existen sobre el origen del alma?
4. ¿Qué argumentos les dan base y qué objeciones pueden presentarse contra ellas?
5. ¿Las palabras «imagen» y semejanza tienen que ver con dos cosas distintas?
6. ¿Cuál es el punto de vista Católico Romano sobre la imagen de Dios en el hombre? ¿Y el luterano? ¿Y el Reformado?
7. ¿Qué distinción hacen sobre este punto las Iglesias Reformadas y por qué es importante hacerlo?
8. ¿Qué pruebas bíblicas tenemos para el pacto de las obras?
9. ¿Cuáles son, la promesa, condición, castigo y sacramento del pacto?
    10. ¿En qué sentido podemos decir que este pacto está aun en vigor?
    11. ¿En qué sentido fue abolido?

LECCIÓN 12:

EL HOMBRE EN EL ESTADO DE PECADO

EL ORIGEN DEL PECADO

La Biblia nos enseña que el pecado entró en el mundo como resultado de la desobediencia de Adán y Eva en el paraíso. El primer pecado fue motivado por Satán quien en forma de serpiente sembró en el corazón humano la simiente de la desconfianza e incredulidad. Las Escrituras nos enseñan claramente que la serpiente, que aparece como el tentador en la historia de la caída del hombre, no fue sino un instrumento de Satán. Juan 8:44; Romanos 16:20; II Corintios 11:3; Apocalipsis 12:9.
El primer pecado tuvo lugar cuando el hombre comió del árbol de la ciencia del bien y del mal. Este comer del árbol era pecado porque Dios lo había prohibido. Semejante hecho indica claramente que el hombre no quería sujetar su voluntad de un modo incondicional a la voluntad de Dios.
Los elementos de esta rebelión son los siguientes: En cuanto a la mente, se revela como orgullo e incredulidad; en cuanto a la voluntad, hubo el deseo de ser como Dios, y en cuanto a los afectos, tuvo lugar una satisfacción sacrílega de comer de un fruto prohibido.
Como resultado de todo ello, el hombre perdió la imagen de Dios en un sentido especial, y se volvió culpable y totalmente depravado, cayendo asimismo bajo el poder de la muerte, Génesis 3:9; Romanos 5 :12 y 6 :23.

LA NATURALEZA ESENCIAL DEL PECADO

Algunos hoy día sustituyen la palabra «mal» por la palabra «pecado», pero esta es una desgraciada sustitución, ya que la palabra «pecado» es más concreta. Denota una clase especial de mal; un mal moral del cual el hombre es responsable y que lo pone bajó la sentencia de condenación. La tendencia modernista de mirar al pecado como un mal hecho a nuestros semejantes es errónea, ya que tal mal sólo puede ser llamado pecado, en cuanto sea contrario a la voluntad de Dios.
La Biblia define correctamente al pecado llamándolo «trasgresión de la ley». 1 Juan 3:4. Es una trasgresión o infracción de la ley de Dios o sea, es hacer lo contrario de lo que la ley divina requiere. La Biblia siempre nos habla del pecado en relación con la ley, Romanos 1:32; 2:12-14; 4:15; 5:13; Santiago 2:9-10; 1 Juan 3:4. Es en primer lugar, la culpabilidad lo Que hace al hombre sujeto a castigo, Romanos 3:19; 5:18; Efesios 2:3, y también una corrupción inherente o contaminación moral.
Todos los hombres son culpables en Adán y por tanto nacen con una naturaleza corrompida, Job 14:4; Jeremías 17:9; Isaías 6:5; Romanos 8: 5-8, Efesios 4:17-19. El pecado tiene su asiento en el corazón humano y desde este punto central influencia el intelecto, la voluntad y los afectos; de hecho, todo el hombre, lo que se manifiesta por medio del cuerno. Proverbios 4:23; Jeremías 17:9; Mateo 15:19-20; Lucas 6:45; Hebreos 3:12. En contra de la teoría católica romana enseñamos que el pecado no consiste solamente en actos exteriores, sino que incluye, malos pensamientos, afectos y los intentos del corazón, Mateo 5: 22,28; Romanos 7:7; Gálatas 5:17, 24.

EL PECADO EN LA VIDA DE LA RAZA HUMANA

Debemos observar tres cosas en este sentido: La Unión Que Existe Entre El Pecado De Adán Y El De Sus Descendientes. Esta Unión Ha Sido Explicada En Tres Formas Distintas:
1. La explicación más antigua es la teoría realística que enseña que al principio Dios creó una naturaleza humana general y que a través del tiempo esta naturaleza fue dividiéndose en tantas partes como individuos. Puesto que Adán poseía tal naturaleza en su plenitud, por su pecado fuimos declarados culpables y contaminados, puesto que cada parte participó en la naturaleza de Adán de la culpa y la contaminación.
2. En los días de la Reforma la teoría representativa fue la que tuvo mayor preeminencia. Esta teoría enseña que Adán estaba en una relación doble con sus descendientes. En primer lugar era su cabeza natural, pero al mismo tiempo su representante o cabeza del pacto. Cuando Adán pecó en calidad de representante de la raza humana, este pecado fue imputado o puesto sobre cada uno de sus miembros. Por tal razón los hombres nacen en un estado de corrupción. Esta es la enseñanza de las Iglesias Reformadas.
3. Una tercera teoría, no tan conocida como la anterior, recibió el nombre de imputación inmediata. Esta enseña que la culpa de Adán no recae directamente sobre cada uno de nosotros. Sólo su corrupción recae sobre sus descendientes, y esto hace que sean responsables personalmente de sus propias culpas. Es decir, no deben su corrupción a la culpabilidad de Adán. Sino que son culpables a causa de su propia corrupción.

PECADO ORIGINAL Y ACTUAL

Hacemos una distinción entre el pecado original y el actual. Todos los hombres nacen en un estado y condición pecaminosa que llamamos pecado original y que es la raíz de todos los pecados actuales que comentemos.
1. EL PECADO ORIGINAL.
Este pecado incluye la culpa y la contaminación. La culpa del pecado de Adán es puesta sobre, o imputada a cada uno de nosotros. Puesto que Adán pecó como representante nuestro, ahora somos todos culpables en él. Además, heredamos de Adán su contaminación y esto hace que tengamos una inclinación positiva al pecado.
El hombre es, pues, por naturaleza, totalmente depravado. Esto no significa que cada hombre es tan malo como de hecho pudiera ser, sino que el pecado ha corrompido todas las partes de su naturaleza y le ha hecho incapaz de ejecutar bien espiritual alguno. Es pues posible para el hombre hacer muchas cosas dignas de la alabanza de sus semejantes, pero aun las mejores de sus obras son defectuosas por naturaleza, es decir, de raíz, porque no han sido motivadas por el amor a Dios, ni hechas en obediencia a El.
Esta depravación total de la naturaleza humana ha sido negada por los pelagianos, los arminianos y los modernistas, pero se halla claramente enseñada por las Sagradas Escrituras, Jerem. 17: 9: Juan 5:42: 6:44; 15:4-5; Romanos 7:18, 23-24; 8: 7-8: 1 Corintios 2:14; 2 Corintios 7:1; Efesios 2:1-3; 4:18; 2 Timoteo 3:2-4; Tito 1:15; Hebreos 11:6.
2. PECADO ACTUAL.
La palabra «pecado actual» denota no tan sólo pecados en su sentido de acciones externas, sino también pensamientos conscientes, deseos y decisiones que proceden del estado de pecado original. Son todos aquellos pecados que el individuo ejecuta de sí mismo.
En distinción a su naturaleza e inclinaciones hereditarias. Mientras que el pecado original fue uno, los pecados actuales son muchos. Algunos de ellos son pecados de la vida interior tales como el orgullo, envidia, odio, lujuria y malos deseos; o bien pecados de la vida exterior como robo, engaño, asesinato, adulterio, etcétera.
Entre ellos se encuentra el pecado para el cual no existe perdón, es decir, la blasfemia contra el Espíritu Santo, después del cual todo cambio de corazón es totalmente imposible, y por el cual no debemos siquiera orar, Mateo 12 :31, 32; Marcos 3 :28-30; Lucas 12 :10; Hebreos 6 :4-6; 10 :26-27; 1 Juan 5 :16.

LA UNIVERSALIDAD DEL PECADO.

Tanto la Biblia como la experiencia nos enseñan que el pecado es universal. Aun los pelagianos no niegan tal cosa, pero la explican en relación a condiciones externas, como las malas compañías, malos ejemplos, y la mala educación. La Biblia nos asegura que el pecado es universal, 1 Reyes 8: 46; Salmo 143:2; Proverbios 20:9; Eclesiastés 7: 20; Romanos 3 :1-1?, 19, 23; Gálatas 3 :22; Santiago 3:2; 1 Juan 1 :8, 10.
Además la Biblia enseña que el hombre es pecador desde su nacimiento, y esto demuestra que la universalidad del pecado no es el resultado de la imitación, Job 14:4; Salmo 51:5; Juan 3 :6. Aun los niños son considerados como pecadores, ya que se hallan sujetos a la muerte, y ésta es la paga del pecado, Romanos 5:12-14. Todos los hombres por naturaleza, se hallan bajo la condenación, y por tanto necesitan la redención que Cristo Jesús proveyó. Los niños no son en ningún modo una excepción a esta regla, Juan 3:3, 5; Efesios 2:3; 1 Juan 5:12.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

Pasajes que demuestran:
QUE EL PECADO ES CULPA
1. Romanos 5: 18. «Así que de la manera que por un delito vino la culpa a todos los hombres para consideración, así por una justicia vino la gracia a todos los hombres para justificación de vida».
2. 1 Juan 3:4. «Cualquiera que hace pecado traspasa también la ley; pues el pecado es trasgresión de la ley».
3. Efesios 2:3. «Entre los cuales todos nosotros también vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos; y éramos por naturaleza hijos de ira, también como los demás».
QUE EL PECADO ES CONTAMINACIÓN.
1. Jeremías 17:9. "Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?" Romanos 7: 18; « Yo sé que en mí (es a saber en mi carne) no mora el bien: porque tengo el querer, mas efectuar el bien no lo alcanzo».
2. Romanos 8:5. «Porque los que viven conforme a la carne, de las cosas que son de la carne se ocupan; mas los que conforme al espíritu, de las cosas del espíritu».
QUE EL PECADO MORA EN EL CORAZÓN
1. Jeremías 17:9: El corazón es lo más complejo, y es perverso: ¿quién puede conocerlo?
2. Mateo 15:19. «Porque del corazón salen los malos pensamientos, muertes, adulterios, fornicaciones, hurtos, falsos testimonios, blasfemias».
3. Hebreos 3:12. «Mirad, hermanos, que en ninguno de vosotros haya corazón malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo».
QUE EL PECADO DE ADÁN NOS ES IMPUTADO
1. Romanos 5: 12. «De consiguiente, vino la reconciliación por uno, así como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, y la muerte así pasó a todos los hombres, pues que todos pecaron».
2. Véanse también el versículo 19. «Porque como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así por la obediencia de uno los muchos serán constituidos justos».
3. 1 Corintios 15:21-22. «Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos. Porque así como en Adán todos mueren, así también en Cristo todos serán vivificados.
QUE LA DEPRAVACIÓN DEL HOMBRE ES TOTAL.
1. Véase arriba: Jeremías 17:9; Romanos 7:18 y 8:5.
QUE EL PECADO ES UNIVERSAL
1. 1 Reyes 8:46. «No hay hombre que no peque». Salmo 143:2. «Y no entres en juicio con tu siervo; porque no se justificará delante de ti ningún viviente».
2. Romanos 3:12. «Todos se apartaron, a una fueron hechos inútiles; no hay quien haga lo bueno, ni aun uno».
3. 1 Juan 1:8. «Si dijéremos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y no hay verdad en nosotros».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Qué nombres da la Biblia al pecado? Job 15:5; 33:9; Salmo 32:1-2; 55:15; 1 Juan 3:4.
2. ¿Hay algún caso en el que la palabra «mal» significa otra cosa que pecado en la Biblia? Si es así ¿cuándo? Véase Éxodo 5:19; 2 Reyes 6:33; 22:16; Salmo 41: 8; 91:10; Proverbios 16:4.
3. ¿Enseña la Biblia con toda claridad que el hombre es pecador desde su nacimiento? Salmo 51:5; Isaías 48:8.
PREGUNTAS PARA EL REPASO
1. ¿Cuál es el origen bíblico del pecado?
2. ¿Qué fue el primer pecado y qué elementos distinguimos en él?
3. ¿Cómo podemos probar que el verdadero tentador fue Satán?
4. ¿Cuáles fueron los resultados del primer pecado?
5. ¿Significan lo mismo las palabras «pecado» y «mal»?
6. ¿Dónde se nos dice que el pecado mora en el hombre?
7. Los pecados del hombre ¿son meramente sus acciones externas?
8. ¿Qué diferentes teorías existen sobre la relación entre el pecado de Adán y el de sus descendientes?
9. ¿Qué es el pecado original y en qué se distingue del pecado actual?
  10. ¿En qué sentido debemos hablar de la depravación total?
  11. ¿Qué pruebas tenemos para la universidad del pecado?

LECCIÓN: 13

EL HOMBRE EN EL PACTO DE LA GRACIA

Para evitar confusiones es necesario que distingamos entre el pacto de la redención y el pacto de la gracia. Ambos se hallan tan íntimamente ligados que a veces son considerados como uno solo. Sin embargo el primero es el fundamento eterno del segundo.

EL PACTO DE LA REDENCIÓN

Se le ha dado también el nombre de «consejo de paz» derivado de Zacarías 6:13. Es un pacto entre el Padre, como representante de la Trinidad, y el Hijo, como representante de los escogidos.

LAS BASES BÍBLICAS DEL MISMO

Es evidente que el plan de la redención fue incluido en el decreto eterno de Dios, Efesios 1:4; 3:1; 2 Timoteo 1:9. Cristo nos habla de las promesas que le fueron hechas antes de venir al mundo y nos habla repetidamente de un cometido que recibió del Padre, Juan 5:30, 43; 6:38-40; 17: 4-12. Cristo es sin duda la cabeza de un pacto, Romanos 5:12-21; 1 Corintios 15:22. En el salmo 2:7-9, se nos mencionan las partes de este pacto y la promesa. En el Salmo 40:7-8, el Mesías expresa su solicitud para hacer la voluntad del Padre al ofrecerse como sacrificio para el pecado.

EL HIJO EN EL PACTO DE LA REDENCIÓN

Cristo no es sólo la Cabeza de este pacto sino también el Fiador del pacto de la redención, Hebreos 7:22. Un fiador es aquella persona que toma sobre sí las responsabilidades legales de otro. Cristo tomó el lugar del pecador, para cargar con el castigo del pecado y cumplir los mandatos de la ley hada su pueblo.
Al hacer esto se convirtió en el último Adán, 1 Corintios 15:35, un espíritu vivificante. Para Cristo este pacto, era un pacto de obras, y él cumplió los requisitos del pacto original, pero para nosotros es el fundamento del pacto de la gracia. Sus beneficios están limitados a los escogidos. Sólo ellos obtienen la redención y heredan la gloria que Cristo mereció para los pecadores.

REQUISITOS Y PROMESAS DEL PACTO DE LA REDENCIÓN.

1. El Padre exigió que el Hijo tomara naturaleza humana con sus flaquezas presentes, aunque sin pecado. Gálatas 4:4, 5; Hebreos 2:10, 11, 14, 15; 4:1), y que se sujetara bajo la ley para pagar su castigo y dar la vida eterna para los elegidos. Salmo 40:8; Juan 10: 11; Gálatas 1:4; 4:4, 5. Asimismo para que aplicara Sus méritos a su pueblo por la obra renovadora del Espíritu Santo y así asegurara la consagración de sus vidas a Dios, Juan 10:28; 17:19-22; Hebreos 5:7-9.
2. El Padre prometió al Hijo que prepararía un cuerpo para El, Hebreos 10:5, lo ungiría con el Espíritu Santo Isaías 42:1; 61:1; Juan 3:34, y lo sostendría en su obra, Isaías 42:6-7; Lucas 22:43. Asimismo que lo libraría del poder de la muerte y que le daría un lugar a Su diestra, Salmo 16:8-11; Filipenses 2:9-11, le daría poder para enviar al Espíritu Santo a formar la Iglesia, Juan 14:26; 15:26; 16:13-14, escogería y guardaría a los escogidos, Juan 6:37-39, 40, 44, 45, Y le daría una simiente numerosa, Salmo 22 :27; 72: 17.

EL PACTO DE LA GRACIA

Sobre el fundamento del pacto de la redención, Dios estableció el pacto de la gracia. Varios elementos deben ser considerados aquí.

LAS PARTES

Dios es la primera parte de este pacto. El establece el pacto y determina la relación en la cual la segunda parte se mantendrá para con El. N o es fácil decidir quién es esta segunda parte. La opinión más corriente entre las Iglesias Reformadas es que sé trata aquí del pecador elegido en Cristo. Este pacto puede ser mirado desde dos puntos de vista diferentes:
1. Como a un fin en sí mismo.
Un pacto de amistad mutua o de comunión para la vida, que tiene lugar en el curso de la historia por la obra del Espíritu Santo. Representa un estado en el cual todo privilegio tiene un fin espiritual, las promesas de Dios son recibidas por fe, y se cumplen. En tal sentido podemos definir al pacto como aquel convenio de gracia entre Dios y los pecadores elegidos en Cristo por el cual Dios se da a sí mismo con todas las bendiciones de la salvación, al pecador, y este Último recibe a Dios y sus dones inmerecidos por la fe, Deuteronomio 7:9; 2 Crónicas 6:14; Salmo 25:10, 14; 103:77-18.
2. Como a un medio para cumplir un fin es puramente un convenio lega' para  llevar a cabo un fin espiritual.
Es evidente que la Biblia a veces nos habla del pacto incluyendo en él algunas personas para quienes las promesas nunca se cumplieron, tales como Ismael, Esaú, los hijos perversos de Elí, y los israelitas rebeldes que murieron en sus pecados. Mirado así, el pacto puede ser definido como un convenio legal en el cual Dios garantiza las promesas de la salvación a todos los que creen. Si miramos al pacto en este sentido más amplio no nos será difícil comprender que Dios lo estableció con los creyentes y asimismo con sus hijos, Génesis 17:7; Hechos 2:39; Romanos 9:1-4.

LAS PROMESAS Y LOS REQUISITOS DEL PACTO

Cada pacto tiene dos partes: ofrece ciertos privilegios e impone ciertas obligaciones.
1. LAS PROMESAS DEL PACTO.
La promesa principal del pacto, que incluye a todas las otras, está contenida en estas palabras repetidas muy a menudo: «Seré a ti por Dios y a tu simiente después de ti», Génesis 17:7; Jeremías 31:33; 32:38-40; Ezequiel 34:23-25, 30, 31; 36:25-28; Hebreos 8:10; 2 Corintios 616-18. Esta promesa incluye todas las otras, tales como la promesa de bendiciones temporales, de la justificación, del Espíritu de Dios, y de la glorificación final en la vida eterna, Job 19 :25-27; Salmo 16:11; 73 :24-26; Isaías 43 :25; Jeremías 31 :33, 34; Ezequiel 36: 27; Daniel 12 :2, 3; Gálatas 4 :4, 5, 5; Tito 3:7; Hebreos 11:7; Santiago 2 :5.
2. LOS PRERREQUISITOS DEL PACTO.
El pacto de la gracia no es un pacto de obras y no requiera ninguna obra con el fin de obtener méritos. Sin embargo, contiene prerrequisitos e impone al hombre obligaciones. Al cumplir los prerrequisitos del pacto, el hombre no gana nada en sí, pero se coloca en aquel lugar en el cual Dios le impartirá las bendiciones prometidas. Hay que notar también, que aun los mismos prerrequisitos ya han sido prometidos de antemano, de forma que Dios da al hombre todo aquello que también requiere de él. Lo que Dios nos pide es: Que aceptemos por la fe el pacto y sus promesas y así entremos a vivir la vida del pacto; y Que desde el comienzo de esta nueva vida nacida en nosotros, nos consagremos a Dios en una nueva obediencia.
3. LAS CARACTERÍSTICAS DEL PACTO.
El pacto de la gracia es un pacto gratuito porque es fruto y manifestación de la gracia de Dios para con los pecadores. Es un pacto de gracia desde el principio al fin. También es un convenio eterno e inviolable en el cual Dios siempre permanece fiel aun cuando los hombres lo quebranten.
Puesto que aun en su sentido más amplio sólo incluye una parte de la humanidad, es un pacto particular. Si en el Nuevo Testamento se nos habla del mismo como un pacto universal, esto se debe al hecho de que no está limitado a los judíos, como era el caso en el Antiguo Testamento, sino que abarca también a los gentiles. Este pacto se caracteriza también por su unidad.
A través de todas las dispensaciones es esencialmente el mismo, aun cuando la forma de su administración cambia. La promesa esencial permanece siempre la misma, Génesis 17:7; Hebreos 1:10; el Evangelio es el mismo, Gálatas 3:8; la necesidad de la fe es la misma, Gálatas 3: 6-7; y el Mediador es el mismo, Hebreos 13:8.
El pacto es a la vez condicional e incondicional. Es condicional porque depende de los méritos de Cristo y porque el gozar de la vida que ofrece depende del ejercicio de la fe. Es también incondicional porque no se funda en mérito alguno del hombre. Asimismo es un pacto testamentario como a disposición libre y soberana de Dios. De hecho recibe el nombre de «testamento» en Hebreos 9:16-17. Este nombre hace énfasis en varios hechos:
1) Que es un arreglo libre por parte de Dios;
2) Que en la dispensación novo-testamentaria fue introducido por la muerte de Cristo, y:
3) Que en él, Dios da lo que nos pide.
El pacto de la gracia difiere del pacto de las obras, en el hecho de que tiene un Mediador. Cristo es el Mediador del nuevo pacto, 1 Timoteo 2:5; Hebreos 8:6; 9: 15; 12:24. Es el Mediador, no sólo en el sentido de que interviene entre Dios y el hombre para buscar la paz y persuadirlos a ella, sino en el sentido de que tiene poder absoluto para hacer todo cuanto sea necesario para lograr tal paz. Como a Fiador nuestro, Hebreos 7:22, Jesús toma nuestra culpa, paga el castigo del pecado, cumple la ley, y restablece la paz.
4. LA MEMBRESÍA EN ESTE PACTO.
Los adultos pueden ser parte de este pacto considerado como un convenio legal solamente por la fe. Pero al ejercer su fe y entrar en él, ganan asimismo entrada a la comunión de vida. Es decir que por la fe e inmediatamente entran en la vida plena de este pacto. Los hijos de creyentes, en cambio, entran en este pacto como un convenio legal al nacer.
Sin embargo esto no significa que al mismo tiempo entran en la comunión de la vida, ni garantiza el que algún día entrarán en él. Las promesas de Dios nos dan cierta seguridad que la vida del pacto se manifestará en ellos, y mientras no demuestren lo contrario, podemos asumir que ya poseen esta nueva vida.
De todos modos, es necesario que de mayores acepten las responsabilidades del pacto en forma voluntaria y que hagan una verdadera confesión de su fe. Faltos de esto serán considerados como quebrantadores del pacto. Es pues posible, a partir de lo dicho anteriormente, que personas no regeneradas se encuentren temporalmente dentro del pacto como a un convenio legal, pero no en una relación vital hacia el mismo, Romanos 9:4.
Tales personas son reconocidas como hijos del pacto y están sujetos a sus requisitos y comparten su misterio. Reciben como a tales el bautismo como a su sello, gozan de las bendiciones comunes del pacto, y puede que aun sean partícipes de algunas operaciones especiales del Espíritu Santo. Sin embargo, si carecen de verdadera fe y no aceptan las responsabilidades correspondientes, serán juzgados como infractores del pacto.
5. LAS DIFERENTES DISPENSACIONES DEL PACTO.
A. La primera revelación del mismo se encuentra en Génesis 3:15 que ha sido llamado con frecuencia, protoevangelio, o promesa maternal. Pero esto no indica un establecimiento formal de tal pacto.
B. El pacto con Noé es también de naturaleza muy general, ya que es un pacto con todos los seres humanos. Sólo proporciona bendiciones naturales y ha sido llamado el pacto de la naturaleza o grado común. Sin embargo tiene una relación bastante estrecha con el pacto de la gracia, ya que es el fruto de la gracia de Dios y garantiza bendiciones naturales y temporales que son absolutamente necesarias para llevar a cabo el pacto de la gracia.
C. El pacto con Abraham y su simiente marca su verdadero establecimiento. Señala el principio de la administración del pacto en el Antiguo Testamento que se hallaba limitada a Abraham y a sus descendientes. La fe se nos muestra eminentemente como a su prerrequisito esencial, y la circuncisión es su sello.
D. El pacto en el monte Sinaí es esencialmente el mismo que el pacto hecho con Abraham, pero desde entonces abarca a toda la nación de Israel y se convierte en un pacto nacional. Aun cuando pone mucho énfasis en el cumplimiento de la ley, no podemos decir que se trata de una renovación del pacto de las obras hecho con Adán. La ley sólo aumentó el conocimiento del pecado, Romanos 3:20, y vino a ser un maestro que nos conduce a Cristo, Gálatas 3:24. La Pascua fue añadida como a un segundo sacramento.
5) El nuevo pacto que nos fue revelado en el Nuevo Testamento, Jeremías 31:31; Hebreos 8:8, 13, es esencialmente el mismo que el del Antiguo Testamento, Romanos 4 y Gálatas 3.
Pero este pacto rompe ahora las barreras del particularismo y se hace universal, en el sentido de que sus bendiciones son extendidas a todo pueblo y nación. Sus bendiciones son ahora más completas y espirituales, y el bautismo y la cena del Señor toman el lugar de los sacramentos del Antiguo Testamento.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

PASAJES ACERCA DE: LAS PARTES DEL PACTO
1. Génesis 3:15. «Y enemistad pondré entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú la herirás en el calcañal».
2. Génesis 17:7. «Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu simiente después de ti en sus generaciones, por alianza perpetua, para serte a ti por Dios, y a tu simiente después de ti».
3. Éxodo 19:5-6. «Ahora pues, si diereis oído a mi voz, y guardaréis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra. Y vosotros seréis mi reino de sacerdotes y gente santa».
4. Jeremías 31:31-33. «He aquí que vienen días, dice Jehová, en los cuales haré nuevo pacto con la casa de Jacob y con la casa de Judá. No como el pacto que hice con sus padres el día que tomé su mano para sacarlos de tierra de Egipto; porque ellos invalidaron mi pacto, bien que fui yo un marido para ellos, dice Jehová. Mas éste es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová; Daré mi ley en sus entrañas, y escribirla en sus corazones; y seré yo a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo.»
5. Hechos 2:39. «Porque para vosotros es la promesa y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare.»
SUS PROMESAS Y REQUISITOS
1. Véase Génesis 17:7; Éxodo 19:5 y Jeremías 31:33 arriba para la promesa esencial.
2. Génesis 15:6. «Y creyó (Abraham) a Jehová, y contóselo por justicia».
3. Éxodo 19:5. «Ahora pues, si diereis oído a mi voz, y guardaréis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos».
4. Salmo 25:14. «El secreto de Jehová es para los que le temen; y a ellos hará conocer su alianza».
5. Salmo 103:17-18. «Mas la misericordia de Jehová desde el siglo y hasta el siglo sobre los que le temen, y su justicia sobre los hijos de los hijos. Sobre los que guardan su pacto, y los que se acuerdan de sus mandamientos para ponerlos por obra»
6. Gálatas 3:7, 9. «Sabéis por tanto que los que son de fe, los tales son hijos de Abraham. Luego los de la fe son benditos con el creyente Abraham».
CARACTERÍSTICAS DEL PACTO
1. Génesis 17: 19b. «Y confirmaré mi pacto con él por alianza perpetua para su simiente después de él».
2. Isaías 54:10. ««Porque los montes se moverán y los collados temblarán; mas no se apartará de ti mi misericordia, ni el pacto de mi paz vacilará, dijo Jehová el que tiene misericordia de ti».
3. Isaías 24:5. «Y la tierra se inficionó bajo sus moradores; porque traspasaron las leyes, falsearon el derecho, rompieron el pacto sempiterno».
4. Gálatas 3:7, 9 en b. arriba y también, Romanos 4: 11. «Y recibió la circuncisión por señal, por sello de la justicia de la fe que tuvo en la incircuncisión: para que fuese padre de todos los creyentes no circuncidados, para que también a ellos les sea contado por justicia»
5. Hebreos 9:17-18. «Porque el testamento con la muerte es confirmado; de otra manera no es válido en tanto que el testador vive. De donde vino que ni aun el primero fue consagrado sin sangre»
EL MEDIADOR DEL PACTO
1. 1 Timoteo 2:5. «Porque hay un Dios, asimismo un mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre».
2. Hebreos 7:22. «Tanto de mejor testamento es hecho fiador Jesús».
3. Hebreos 8:6. «Mas ahora tanto mejor ministerio es el suyo, cuanto es mediador de un mejor pacto, el cual ha sido formado sobre mejores promesas».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Puede usted nombrar algunos pactos especiales mencionados en la Biblia? Génesis 31:44; Deuteronomio 29:1; 1 Samuel 18:3; 2 Samuel 23:5.
2. ¿Puede usted citar varios casos en los que el pacto fue quebrantado? Génesis 25:32-34, cf. Hebreos 12:16-17; Éxodo 32:1-14; Números 14; Números 16; Jueces 2:11 ss.; 1 Samuel 2:12 ss.; Isaías 24:5; Ezequiel 15:69; Óseas 6:7; 8:1; 10:4.
3. ¿Cambió la promulgación de la ley la esencia del pacto? Romanos 4: 13-17; Gálatas 3: 17-24.
PREGUNTAS PARA EL REPASO
1. ¿Qué es el pacto de la redención?
2. ¿Por qué otro nombre es conocido y cuál es su relación al pacto de la gracia?
3. ¿Qué pruebas bíblicas tenemos para ello?
4. ¿Cuál es la posición de Cristo en este pacto?
5. ¿Fue para El un pacto de gracia o un pacto de obras?
6. ¿A quiénes representa Cristo en este pacto?
7. ¿Qué exigió, el Padre, de Cristo y qué promesa le hizo?
8. ¿Qué distinción observamos al referimos al pacto de la gracia?
9. ¿Cómo afecta tal distinción a la segunda parte en este pacto?
      10. ¿Cuál es la promesa que todo lo abraza en este pacto?
      11. ¿Qué pide Dios de los que se hallan en este pacto?
      12. ¿Cuáles son las características del pacto?
      13. ¿En qué sentido podemos quebrantar el pacto, y en qué otro es inviolable?
      14. ¿Cómo podemos probar la unidad del pacto?
      15. ¿En qué sentido es condicional y en qué otro es incondicional?
      16. ¿Por qué podemos llamarlo un testamento?
      17. ¿Dónde encontramos la primera revelación del pacto?
      18. ¿Cuál fue la naturaleza del pacto con Noé?
      19. ¿Qué diferencia hay entre el pacto con Abraham y el pacto en el monte Sinaí?
      20. ¿Qué caracteriza la dispensación neo-testamentaria del pacto?
      21. ¿Cuál es la posición de Cristo en el pacto de la gracia?
      22. ¿Pueden los adultos ser miembros del pacto?
      23. ¿Cómo vienen los niños a ser miembros de tal pacto?
      24. ¿Qué esperamos de ellos?
      25. ¿Pueden las personas no regeneradas ser miembros del pacto?

LECCIÓN: 14

LOS NOMBRES Y NATURALEZAS DE CRISTO

LOS NOMBRES DE CRISTO

Los nombres de Cristo más importantes son los siguientes:
1. Jesús. Este nombre es el equivalente griego del nombre Hebreo Josué. Josué 1:1; Zacarías 3:1; o Jesús, Esdras 2:2. Se deriva de la palabra hebrea que significa «salvar» y designa a Cristo como Salvador, Mateo 1:21. Dos tipos de Cristo en el Antiguo Testamento llevaron este mismo nombre, a saber, Josué el hijo de Nun y Josué el hijo de Josadec.
2. Cristo. La palabra Cristo es el equivalente en el Nuevo Testamento del Hebreo «Mesías» que significa «el ungido». Según el Antiguo Testamento, los profetas, 1 Reyes 19:6, los sacerdotes Éxodo 29:7 y los reyes 1 Samuel 19:1 eran ungidos con aceite, que simbolizaba el Espíritu Santo. Este ungimiento señalaba que habían sido apartados para sus tareas respectivas., y se hallaban calificados para ejercer las mismas. Jesucristo fue ungido por el Espíritu Santo para su triple oficio de profeta, sacerdote y rey. Desde un punto de vista histórico, este ungimiento tuvo lugar cuando fue concebido por el Espíritu Santo y cuando fue bautizado.
3. Hijo del Hombre. Este nombre, al ser aplicado a Cristo, se deriva de Daniel 7:13. Es un nombre que Jesús se da generalmente a sí mismo, y que otros raramente usan. Aun cuando contiene una indicación a la naturaleza humana de Cristo, a la luz de su origen histórico nos dirige hacia su carácter sobrehumano y a su futura venida en las nubes del cielo con gloria y esplendor, Daniel 7:13; Mateo 16:27, 28; 26:24 y Lucas 21:27.
4. Hijo de Dios. Cristo recibió el nombre de «Hijo de Dios» en diversos sentidos. Fue llamado así porque es la segunda persona de la Trinidad y por tanto es Dios, Mateo 11:27, pero también porque es el Mesías escogido, Mateo 24:36, y porque su nacimiento fue debido a la obra sobrenatural del Espíritu Santo, Lucas 1:35.
5. Señor. Los contemporáneos de Jesús usaron algunas veces este nombre para con Jesús como a una forma de hablar cortésmente, tal como nosotros usamos el vocablo «señor». Poco después de la resurrección de Cristo este nombre adquiere un significado especial mucho más profundo. En algunos pasajes designa a Cristo como a Poseedor Y Gobernador de la Iglesia, Romanos 1:7, Efesios 1:17 y en otros ocupa el mismo lugar que debiera ocupar el nombre de Dios, 1 Corintios 7:34, Filipenses 4:4-5.

LAS NATURALEZAS DE CRISTO

La Biblia nos presenta a Cristo como a un ser dotado de dos naturalezas, la divina y la humana. Grande es el misterio de la piedad que Dios se haya manifestado en carne, 1 Timoteo 3:16.

LAS DOS NATURALEZAS

Dado que muchos hoy día niegan la divinidad de Cristo, es necesario poner énfasis en las pruebas bíblicas de la misma. Algunos pasajes del Antiguo Testamento ya nos dirigen a tal doctrina, Isaías 9:6, Jeremías 23:6, Miqueas 5:2, Malaquías. 3: 1. En el Nuevo Testamento, las pruebas son muy abundantes, Mateo 11:27; 16:16; 26:63,64 Juan 1:1,18; Romanos 9:5; 1 Corintios 2:8; 2 Corintios 5:10; Filipenses 2:6; Colosenses 2:9; Hebreos 1:1-3; Apocalipsis 19:16.
Ninguno de los que aceptan la existencia de Cristo niega su humanidad. De hecho, el único detalle de divinidad que muchos le otorgan es el poseer una humanidad perfecta. De todos modos hay pruebas abundantes de la humanidad de Cristo. Cristo habla de sí mismo como un hombre, Juan 8:40, y otros le llaman así, Hechos 2:22; Romanos 5:15; 1 Corintios 15:21. Cristo tenía los elementos esenciales de una naturaleza humana, a saber, cuerpo y alma, Mateo 26:26,38; Lucas 24:39; Hebreos 2:14. Además, se hallaba sujeto a las leyes ordinarias del desarrollo humano, Lucas 2:40, 52, y a las necesidades y sufrimientos humanos, Mateo 4:2; 8:2; Lucas 22:44; Juan 4:6; 11:35; 12:27; Hebreos 2:10, 18; Hebreos 5:7, 8. Sin embargo, a pesar de ser un hombre real, Cristo no tenía pecado.
No pecó, ni podía pecar, Juan 8; 46; 2 Corintios 5:21; Hebreos 4:15; 9:14; 1 Pedro 2:22, 1 Juan 3:5. Era necesario que Cristo fuera a la vez Dios y hombre. Sólo como a hombre podía ser nuestro substituto, y como tal sufrir y morir, y solamente como a hombre sin pecado podía pagar por los pecados de otros. Pero era solamente como a Dios que podía dar a su sacrificio un valor infinito, y llevar sobre sí la ira de Dios, para así librar a otros de ella, Salmos 40 :7-10; 130:3.

LAS DOS NATURALEZAS UNIDAS EN UNA PERSONA.

Cristo tenía una naturaleza humana, pero no era persona humana. La Persona del Mediador es el Hijo de Dios inmutable. En la encarnación, Cristo no se cambió en una persona humana, ni tampoco adoptó para sí una personalidad humana. Cristo asumió, a más de su naturaleza divina, una naturaleza humana. Esta naturaleza humana no llegó a desarrollar una personalidad independiente, sino que se personalizó en la Persona del Hijo de Dios. Al tomar esta naturaleza humana, la persona del Mediador fue a la vez divina y humana, es decir, Dios y hombre, poseyendo todas las cualidades esenciales de las naturalezas divina y humana.
Cristo tiene conciencia divina y humana, a la par que una voluntad divina y humana. Este es realmente un misterio que no podemos concebir. Las Escrituras enseñan claramente esta unidad en la persona de Cristo. Es siempre la misma Persona la que habla, tanto si expresa hechos divinos como humanos, Juan 10 :30; 17:5 comparado con Mateo 27 :46; Juan 19 :28. Aun a veces acciones y atributos humanos nos son presentados como obra de la Persona de Cristo en su divinidad Hechos 20:28; 1 Corintios 2:8; Colosenses 1: 13-14. A veces atributos y acciones divinas son imputados a la persona de Cristo bajo un nombre que designa su humanidad, Juan 3:13; 6:62; Romanos 9:5.

ALGUNOS ERRORES IMPORTANTES CONTRA ESTA DOCTRINA

En la Iglesia Primitiva los Ebionistas y los Alogi-negaron la divinidad de Cristo. En los días de la Reforma, también los Socinianos negaron tal verdad" y hoy día los Unitarios y modernistas la niegan también. Asimismo en la Iglesia primitiva encontramos el caso de Ario que negó la completa divinidad de Cristo y hablaba de él como a un semi-dios. Al contrario, Apolinario no reconoció su completa humanidad y mantuvo que el Logos divino, ocupó el lugar del espíritu humano en Cristo. Nestorio y sus seguidores negaron la unidad de las dos naturalezas en una Persona, y Eutique s y sus discípulos no llegaron a distinguir entre las dos naturalezas en la forma debida.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

LA DIVINIDAD DE CRISTO
1. Isaías 9:6. «Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado; y el principado sobre su hombro, y llamarse su nombre Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz».
2. Jeremías 23:6. «En sus días será salvo Judá, e Israel habitará confiado y este será su nombre que le llamarán: Jehová nuestra justicia».
3. Juan 1:1. «En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios».
4. Romanos 9:5. «Cuyos son los padres, y de los cuales es Cristo según la carne, el cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos».
5. Colosenses 2:9. «Porque en él habita toda la plenitud de la divinidad corporalmente».
LA HUMANIDAD DE CRISTO
1. Juan 8:40. «Empero ahora procuráis matarme, hombre que os he hablado la verdad, la cual he oído de Dios».
2. Mateo 26:38. «Entonces Jesús les dice: Mi alma está muy triste hasta la muerte; quedaos, aquí, y velad conmigo».
3. Lucas 24:39. «Mirad mis manos y mis pies, que yo mismo soy, palpad y ved; que el espíritu ni tiene carne ni huesos, como veis que yo tengo».
4. Hebreos 2:14. «Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por la muerte al que tenía el imperio de la muerte, es a saber, al diablo».
LA UNIDAD DE LA PERSONA DE CRISTO
1. Juan 17:5. «Ahora pues, Padre glorifícame tú cerca de ti mismo con aquella gloria que tuve cerca de ti antes que el mundo fuese».
2. Juan 3: 13. «Y nadie subió al cielo, sino el que descendió del cielo, el Hijo del hombre, que está en el cielo».
3. 1 Corintios 2:8. «La que ninguno de los príncipes de este siglo conoció; porque si la hubieran conocido, nunca hubieran crucificado al Señor de gloria».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿En qué sentido fueron Josué hijo de Nun (Zacarías 3:8-9) y Josué hijo de Josadec (Hebreos; 4:8), tipos de Cristo?
2. ¿Qué nos enseñan los pasajes siguientes, acerca del ungimiento de Cristo? Salmo 2:2; 45:7; Proverbios 8:23; Isaías 61:1.
3. ¿Qué atributos divinos posee Cristo según Isaías 9:6; Proverbios 8:22-31; Miqueas 5:2; Juan 5:26; 21: 17? ¿Qué obras divinas? Marcos 2:5-7; Juan 1:1-3; Colosenses 1:16-17; Hebreos 1:1-3. ¿Qué honores divinos? Mateo 28:19; Juan 5:19-29; 14:1; 2 Corintios 13:14.
PREGUNTAS PARA EL REPASO
1. ¿Cuáles son los nombres de Cristo más importantes? ¿Qué significa cada uno de ellos?
2. ¿Qué elementos se hallan incluidos en el ungimiento de Cristo? ¿Cuándo tuvo lugar?
3. ¿De qué se derivó el nombre de «Hijo del hombre»? ¿Qué expresa?
4. ¿En qué sentido el nombre de «Hijo de Dios» se aplica a Cristo?
5. ¿Qué diferentes significados encontramos en la palabra «Señor» al ser aplicada a Cristo?
6. ¿Qué pruebas bíblicas tenemos para la humanidad y la divinidad de Cristo?
7. ¿Cuál es la naturaleza de la persona de Cristo: divina, humana o humana y divina?
8. ¿Cómo podemos probar con las Escrituras la unidad de la Persona de Cristo?
9. ¿Cuáles Son los errores principales sobre la Persona de Cristo?

LECCIÓN: 15

LOS ESTADOS DE CRISTO

A menudo usamos las palabras «estado» y «condición» de manera indistinta. Al hablar de los estados de Cristo, usamos la palabra «estado» en un sentido más preciso, denotando la relación en que se mantuvo y aun mantiene con respecto a la ley. En los días de su humillación, Cristo fue siervo bajo la ley; en su exaltación es Señor por encima de la ley. Es pues natural que estos dos estados llevaran consigo condiciones de vida diferentes, y que estudiaremos en las diferentes fases de estos estados.

EL ESTADO DE HUMILLACIÓN

En él, Cristo se despojó de la majestad divina que era suya como Soberano del universo y asumió una naturaleza humana tomando la forma de un siervo. El Legislador supremo se sujetó a los requerimientos y maldición de la ley. Mateo 3:15; Gálatas 3:13; 4:4; Filipenses 2:6-8. Este estado de humillación se nos presenta bajo varias fases:

LA ENCARNACIÓN Y NACIMIENTO DE CRISTO

En la encarnación el Hijo de Dios se hizo carne y asumió una naturaleza humana, Juan 1:14; 1 Juan 4:2. Se hizo un miembro real de la raza humana al nacer de la Virgen María. Si como los Anabaptistas afirmaron, Cristo hubiera traído consigo desde el cielo una naturaleza humana, ello no le habría hecho miembro de la raza humana. La Biblia enseña el nacimiento virginal en varios pasajes, Isaías 7: 14; Mateo 1:20 y Lucas 1:34-35. Este nacimiento maravilloso fue debido a la influencia sobrenatural del Espíritu Santo, quien al mismo tiempo preservó la naturaleza humana de Cristo de la contaminación del pecado ya desde su misma concepción, Lucas 1:35.

LOS SUFRIMIENTOS DE CRISTO

Con frecuencia hablamos de los sufrimientos de Cristo como limitados a su agonía final, pero esto es falso. Su vida entera fue una vida de sufrimiento. Fue la vida de un siervo para aquel que era Señor de señores, y una vida en medio de pecado para aquel que no conoció en sí mismo el pecado. Satán lo tentó, los suyos le aborrecieron y sus enemigos lo persiguieron. Los sufrimientos de su alma fueron aún más intensos que los de su cuerpo. Fue tentado por el diablo, oprimido por un mundo de iniquidad que lo rodeaba, y afligido por el peso del pecado que reposaba sobre El, fue «varón de dolores, experimentado en quebranto». Isaías 53:3.

LA MUERTE DE CRISTO

Cuando hablamos de la muerte de Cristo nos referimos a su muerte física. Cristo no murió como consecuencia de un accidente, no bajo la mano de un asesino, sino bajo una sentencia judicial y fue contado con los perversos (Isaías 53:12). Al sufrir la muerte bajo el castigo romano de la crucifixión, murió de una muerte maldita, llevando sobre sí nuestra maldición, Deuteronomio 21:23; Gálatas 3:13.

LA SEPULTURA DE CRISTO

Parece como si la muerte en la cruz fuera la fase final de sus sufrimientos. ¿No dijo Jesús «Consumado es»? Estas palabras se refieren a su sufrimiento activo, pero Cristo continuó aún sufriendo. Su sepultura fue también parte de su humillación, y de la que como Hijo de Dios tuvo plena conciencia. El retorno del hombre a la tierra era parte del castigo por causa del pecado, Génesis 3:19. Que el Salvador tuviera que bajar a la tumba es también parte de su humillación según el Salmo 16:10; Hechos 2:27, 31; 13:34, 35. Tal humillación nos eliminó el terror de la tumba.

SU DESCENSO AL HADES

Las palabras del Credo Apostólico «descendió a los infiernos (o hades), han tenido diversas interpretaciones. Los católico-romano dicen que descendió al Limbus Patrum donde se hallaban los santos del Antiguo Testamento para darles la libertad; los Luteranos enseñan que entre su muerte y su resurrección, Cristo bajó a. los infiernos para predicar y celebrar su victoria sobre los poderes de las tinieblas.
Posiblemente nos encontramos ante una expresión figurada que denota: 1) que sufrió las agonías del infierno en el jardín y en la cruz, y que 2) Cristo entró en su más profunda agonía y humillación con su muerte, Salmo 16:8-10; Efesios 4:9.

EL ESTADO DE ENSALZAMIENTO

En su estado de ensalzamiento, Cristo pasó de su estado de sumisión a la ley como obligación del pacto, puesto que había pagado el castigo de la ley y merecido la justicia y vida eterna para el pecador. Además, fue coronado de honor y gloria que le correspondían. Hay cuatro fases diferentes en este ensalzamiento:

LA RESURRECCIÓN

La resurrección de Cristo no consistió en una mera reunión de cuerpo y alma, sino de un modo especial en que su naturaleza humana, tanto cuerpo como alma, fueron restablecidos en su belleza y fortaleza original, y levantados a un nivel muy superior aún. Al contrario de todos los que habían resucitado antes que El, Cristo se levantó con un cuerpo espiritual, 1 Corintios 15:44-45. Por tal motivo ha sido llamado «las primicias de los que durmieron», 1 Corintios 15:20, y «el primogénito de los muertos», Colosenses 1:18; Apocalipsis 1:5.
La resurrección de Cristo tiene un triple significado:
1) Fue una declaración por parte del Padre de que Cristo había cumplido las demandas de la Ley, Filipenses 2:9.
2) Simbolizó la justificación, regeneración y resurrección final de los creyentes, Romanos 6:4, 5, 9; 1 Corintios 6:14; 15:20-22.
3) Fue la causa de nuestra justificación, regeneración y resurrección, Romanos 4:25; 5:10; Efesios 1:20; Filipenses 3:10; 1 Pedro 1:3.

LA ASCENSIÓN

La ascensión fue en un sentido el complemento necesario de la resurrección, pero asimismo tuvo un significado especial. Tenemos una doble narración de la misma, a saber, Lucas 24:50-53 y Hechos 1:6-11. El apóstol Pablo la menciona en Efesios 1:20; 4:8-10; 1 Timoteo 3:16 y la epístola a los Hebreos hace énfasis de su significado en 1:3; 4:14; 6:20; 9:24. Fue una ascensión visible del Mediador, según la naturaleza humana, yendo de la tierra al cielo, y de un lugar a otro. Incluyó una nueva glorificación de la naturaleza humana de Cristo.
Los luteranos la presentan de otro modo. Para ellos fue un cambio de condición física en la cual la naturaleza humana de Jesús vino a gozar plenamente de ciertos atributos divinos, y se hizo permanentemente omnipresente. En la ascensión, Cristo nuestro Sumo sacerdote entró en el lugar más íntimo del santuario, para presentar al Padre su sacrificio y empezar su obra intercesora en el trono, Romanos 8:34; Hebreos 4:14; 6:20; 9:24.
Cristo ascendió a los cielos para prepararnos un lugar, Juan 14:1-3. Con El ya estamos sentados en los lugares celestiales y su ascensión nos asegura que tenemos un lugar reservado en los cielos, Efesios 2:6; Juan 17:24.

SU POSICIÓN A LA DIESTRA DE DIOS

Después de la ascensión, Cristo se sentó a la diestra de Dios, Efesios 1:20, Hebreos 10:12, 1 Pedro 3:22. La expresión «diestra de Dios» no puede ser tomada en su sentido literal, sino que es una figura indicando el lugar que Cristo ocupa en cuanto a su gloria y poder. Durante este período a la diestra de Dios, Cristo gobierna y protege a su Iglesia, dirige el curso del universo para el bien de Su Iglesia, e intercede por su pueblo sobre el fundamento de su sacrificio completado.

SU RETORNO FÍSICO

El ensalzamiento de Cristo alcanza su clímax cuando vuelve para juzgar a los vivos y a los muertos. Su segunda venida será corporal y visible, Hechos 1:11; Apocalipsis 1:7. Que Jesucristo volverá como Juez es evidente de pasajes como estos, Juan 5:22, 27; Hechos 10:42; Romanos 2:16; 2 Corintios 5: 10; 2 Timoteo 4: 1.
No sabemos la hora de su segunda venida. Cristo volverá para juzgar al mundo y completar la salvación de su pueblo. Esto será la victoria final de su obra redentora. 1 Corintios 4:5; Filipenses 3:20; Colosenses 3:4; 1 Tesalonicenses 4:13-17; 2 Tesalonicenses 1:7- 10; 2:1-12; Tito 2:13; Apocalipsis 1:7.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

EL ESTADO DE HUMILLACIÓN.
1. Gálatas 3:13. «Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito cualquiera que es colgado en madero).
2. Gá1atas 4:4, 5. Pero venido el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, hecho de mujer, hecho súbdito a la Ley, para que redimiese a los que estaban debajo de la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos.
3. Filipenses 2:6-8. El cual, siendo en forma de Dios no tuvo por usurpación ser igual a Dios; sin embargo, se anonadó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y hallado en la condición como hombre, se humilló a sí mismo, hecho obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.
LA ENCARNACIÓN.
1. Juan 1:14. «Y Aquel Verbo fue hecho carne y habitó entre los hombres y vimos su gloria, gloria como del Unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.
2. Rom. 8:3. «Pues lo que era imposible por la ley, por cuanto yo era débil por la carne, Dios enviando a su Hijo en semejanza de carne pecadora, y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne».
EL NACIMIENTO VIRGINAL
1. Isaías 7:14. «He aquí, la virgen concebirá y parirá un hijo y llamarás su nombre Emmanuel».
2. Lucas 1:35. «Y respondiendo el ángel le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la virtud del Altísimo te hará sombra; por lo cual también lo Santo que nacerá, será llamado Hijo de Dios».
EL DESCENDIMIENTO AL HADES
1. Salmo 16:10. «Porque no dejarás mi alma en el Sheol (Hades en Hechos 2:27); ni permitirás que tu Santo vea corrupción».
2. Efesios 4:9. “Y que subió, ¿que es sino que también había descendido primero a las partes más bajas de la tierra?”
LA RESURRECCIÓN
1. Rom. 4:25. «El cual fue entregado por nuestros delitos y resucitado para nuestra justificación».
2. 1ª Corintios 15.20. «Pero ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho».
LA ASCENSIÓN
1. Lucas 24:51. «Y aconteció que bendiciéndolos se fue de ellos; y era llevado arriba al Cielo.
2. Hechos 1:11. «Los cuales también les dijeron: Va rones galileos ¿qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús que ha sido tomado de vosotros arriba en el cielo así vendrá, como le habéis visto ir al cielo».
SU POSICIÓN
1. Efesios 1:20. «La cual obró en Cristo resucitándole de los muertos y colocándole a su diestra en el Cielo».
2. Hebreos 10:12. «Empero éste, habiendo ofrecido por los pecados un solo sacrificio para siempre, está sentando a la diestra de Dios».
SU SEGUNDA VENIDA
1. Hechos 1:11. (Véase el texto citado arriba.)
2. Apoc. 1:7. «He aquí que viene en las nubes, y todo ojo lo verá, y los que le traspasaron; y todas las tribus de la tierra lamentarán sobre El».
PARA ESTUDIO BÍBLlCO ADICIONAL
1. ¿Qué nos dice el Antiguo Testamento acerca de la humillación de Cristo en los pasajes siguientes? Salmo 22: 6-20; 69:7-9; 20:21; Isaías 52:14, 15; 53:1-10; Zac. 11:12-13.
2. ¿Cuál es el valor especial de las tentaciones de Cristo en lo que a nosotros se refiere? Hebreos 2:18; 4:15; 5:7-9.
3. ¿Cómo prueban los siguientes pasajes que el Cielo es un lugar más bien que una condición? Deut. 30:12; Josué 2:11; Salmo 139:8; Ec1es. 5:2; Isaías 66:1; Rom. 10:6, 7
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Qué queremos significar al decir los estados del Mediador?
2. ¿Cómo definiría usted los estados de humillación y exaltación?
3. ¿Cómo recibió Cristo su naturaleza humana?
4. ¿Qué pruebas tenemos del nacimiento virginal?
5. ¿Qué relación tiene el Espíritu Santo con el nacimiento de Cristo?
6. ¿Se limitaron los sufrimientos de Cristo al fin de su vida?
7. ¿Tiene alguna importancia la forma en que Cristo murió?
8. ¿Cuáles son las diferentes opiniones respecto al descendimiento al Hades?
9. ¿Cuál fue la naturaleza de la resurrección de Cristo? ¿Qué cambio tuvo lugar?
      10. ¿Cuál fue el significado de la resurrección?
      11. ¿Cómo probaría que la ascensión fue el traslado de un lugar a otro?
      12. ¿Cuál es su significado y cómo lo conciben los luteranos?
      13. ¿Qué significa la posición a la diestra de Dios? ¿Qué hace Cristo allí?
      14. ¿Cómo volverá Cristo, y cuál es el propósito de su Venida?

LECCIÓN: 16

LOS MINISTERIOS DE CRISTO

La Biblia nos dice que Cristo tiene un triple ministerio y nos habla de El como Profeta, Sacerdote y Rey.

EL MINISTERIO PROFÉTICO

El Antiguo Testamento predijo que Cristo vendría como profeta, Deuteronomio 18:15 (véase Hechos 3:23). Jesús mismo habla de sí como profeta en Lucas 18:33, y alega que trae un mensaje del Padre, Juan 8:26-28; 12:49-50; 14:10, 24, predice el futuro, Mateo 24:3-35; Lucas 19: 41-44, y habla con autoridad singular, Mateo 7:29.
No es pues de extrañar que el pueblo le reconociera como profeta, Mateo 21:11, 46; Lucas 7:16; 24:19, Juan 6: 14; 9:40; 9:17. Un profeta es aquella persona que recibe revelaciones divinas en sueños, visiones y mensajes verbales y que las transmite al pueblo de palabra o bien mediante acciones proféticas visibles, Éxodo 7:11; Deuteronomio 18:18; Números 12:6-8; Isaías 6; Jeremías 1:4-10; Ezequiel 3:1-4, 17.
Su obra pertenece al pasado, al presente y al futuro. Una de sus tareas más importantes fue la de interpretar al pueblo los aspectos morales y espirituales de la ley. Cristo fue profeta ya en el Antiguo Testamento, 1 Pedro 1:11; 3:18-20. Asimismo fue profeta cuando estuvo en la tierra, y continuó tal obra, por la operación del Espíritu Santo sobre los apóstoles, después de la ascensión, Juan 14: 26; 16:12-14; Hechos 1:1. Aún ahora su ministerio profético continúa a través de la predicación de la Palabra y de la iluminación espiritual impartida a los creyentes. Esta es la única función que la teoría modernista reconoce en Cristo.

SU MINISTERIO SACERDOTAL

El Antiguo Testamento también predijo que el Redentor que vendría sería sacerdote, Salmo 110:4; Zacarías 6:13; Isaías 53. En el Nuevo Testamento hay solamente un libro en el cual Cristo es llamado sacerdote, la carta a los Hebreos, pero allí encontramos este nombre repetidas veces, 3:1; 4:14; 5:5; 6:20; 8:1. Sin embargo, hay otros libros que hacen referencia a su obra sacerdotal, Marcos 10:45; Juan 1:29; Romanos 3:24-25; 1 Corintios 5: 7; 1 Juan 2:2; 1 Pedro 2:24; 3:18. Mientras que un profeta representa a Dios delante del pueblo, el sacerdote representaba al pueblo delante de Dios.
Ambos eran asimismo maestros, pero mientras el primero enseñaba la ley moral, el otro impartía al pueblo la ley ceremonial. Además, los sacerdotes tenían el privilegio especial de acercarse a Dios, y de hablar y actuar en lugar del pueblo, Hebreos 5:1, nos enseña que el sacerdote era escogido de entre los seres humanos para ser su representante, que era escogido por Dios y actuaba ante El para el beneficio de los hombres, y ofrecía dones y sacrificios por los pecados. Al mismo tiempo intercedía por el pueblo.
La obra sacerdotal de Cristo fue de un modo especial, ofrecer un sacrificio por el pecado. Los sacrificios del Antiguo Testamento eran tipos que señalaban el camino hacia el gran sacrificio de Cristo, Hebreos 9:23-24; 10:1; 13:11, 12. De aquí que Cristo es llamado «el Cordero de Dios», Juan 1:29 y <<nuestra pascua», 1 Corintios 5:7. El Nuevo Testamento nos habla claramente de la obra sacerdotal de Cristo en muchos pasajes: Marcos 10:45; Juan 1:29; Romanos 3:24-25; 5: 6-8; 1 Corintios 5:7; 15:3; Gálatas 1:4; Efesios 5:2; 1 Pedro 2:24; 3:18; 1 Juan 2:2; 4:10 Apocalipsis 5: 12. Las referencias son aún más frecuentes en la carta a los Hebreos 5:1-10; 7:1-28; 9:11-15, 24-28; 10:11-14, 19-22; 12:24; 13:12.
Además de ofrecer el gran sacrificio por los pecados, Cristo como sacerdote, intercede también por Su pueblo. Se le llama nuestro paracleto por deducción de Juan 14:16 y explícitamente en 1 Juan 2:2. Esta palabra significa «uno que es llamado para ayudar, un abogado, uno que defiende la causa de otro». En el Nuevo Testamento, Cristo es llamado nuestro intercesor en Romanos 8:34; Hebreos 7:25; 9:24; 1 Juan 2:1.
Su obra intercesora está basada en su sacrificio, y no se halla limitada, como algunos han pensado, a intercesión en la oración. Cristo presenta su sacrificio a Dios, y sobre tal base pide bendiciones espirituales para su pueblo, los defiende de las acusaciones de Satán, la ley y la conciencia, obtiene el perdón para todas aquellas acusaciones que son justas, y santifica su adoración y servicio por mediación del Espíritu Santo. Su obra intercesora es limitada en su carácter, ya que se refiere sólo a los elegidos de Dios, pero incluye a todos los elegidos, tanto si ya son creyentes como si se hallan aún en el estado de incredulidad, Juan 17 :9, 20.

EL MINISTERIO REAL

Como Hijo de Dios, Jesucristo goza por naturaleza del dominio universal de Dios. En distinción a este dominio universal, hablamos ahora de la majestad que le fue conferida en su ministerio de Mediador. Esta majestad es de dos clases: Su dominio espiritual sobre la Iglesia, y su dominio del universo.

SU MAJESTAD ESPIRITUAL

La Biblia nos habla de ella en muchos lugares, Salmo 2:6; 132:11; Isaías 9: 6-7; Miqueas 5:2; Zacarías 6:13; Lucas 1:33; 19:38; Juan 18:36-37; Hechos 2:30-36. La majestad de Cristo en su soberanía real sobre su pueblo. La llamamos espiritual porque tiene que ver con un reino espiritual establecido en los corazones y vidas de los creyentes, tiene fines espirituales que persigue, es decir la salvación de los pecadores; y su administración es también espiritual a través de la Palabra Santa y el Espíritu Santo.
Su ejercicio abarca la reunión, gobierno, protección y perfeccionamiento de la Iglesia. Tanto este gobierno como los límites del mismo reciben en el Nuevo Testamento los nombres de «reino de Dios» y «reino de los cielos». En su sentido estricto, sólo los creyentes, miembros de la Iglesia invisible, son ciudadanos de este reino.
Pero el término «reino de Dios» se usa a veces en un sentido más amplio, incluyendo a todos aquellos que viven donde el Evangelio es proclamado, aun aquellos que ocupan un lugar en la Iglesia visible, Mateo 13:24¬30, 47-50. El reino de Dios, por una parte, es una realidad espiritual y presente en los corazones y vidas de los hombres, Mateo 12:28; Lucas 17:21; Colosenses 1: 18, pero por la otra es también una esperanza futura, que no tendrá lugar hasta la segunda venida de Cristo, Mateo 7:21; Lucas 22:29; 1 Corintios 15:20; 2 Timoteo 4: 18; 2 Pedro 1: 11. Este reino futuro será en su esencia el mismo reino que el presente, es decir, el gobierno de Dios establecido y reconocido en los corazones de los hombres.
Pero será asimismo diferente, ya que será un reino visible y perfecto. Hay quienes opinan que el reino de Cristo cesará en Su segunda venida, pero la Biblia nos dice muy claramente que el reino de Cristo es eterno, Salmo 45:6; 72:17; 89:36-37; Daniel 2.44; 2 Samuel 7:13, 16; Lucas 1:33; 2 Pedro 1:11.

SU DOMINIO UNIVERSAL

Después de Su resurrección Cristo dijo a sus discípulos «Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra», Mateo 28:18. Esta misma verdad es repetida en 1 Corintios 15:27 Efesios 1: 20-22. Esta potestad no debería ser confundida con la majestad original de Cristo como Hijo de Dios, aun cuando tiene que ver con el mismo dominio. Esta potestad dada a Cristo tiene que ver con aquella majestad concedida a Cristo en su capacidad de Mediador de la Iglesia.
Es como Mediador que Cristo ahora, guía el destino de los individuos y las naciones, controla la vida del mundo entero y la hace sujeta a sus propósitos redentores. Asimismo protege a la Iglesia de los peligros a que se halla expuesta en el mundo. Esta majestad de Cristo continuará hasta que Cristo haya obtenido la victoria completa sobre todos los enemigos del reino de Dios. Cuando tal obra haya sido llevada a cabo, Cristo devolverá esta majestad al Padre, 1 Corintios 15:24-28.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

CRISTO EN SU MINISTERIO DE PROFETA
1. Deuteronomio 18: 18. «Profeta les suscitaré de en medio de sus hermanos, como tú; y pondré mis palabras en su boca, y él les hablará de todo lo que yo le mandaré».
2. Lucas 7:16. «Y todos tuvieron miedo, y glorificaron a Dios, diciendo: Que un gran profeta se ha levantado entre nosotros; y que Dios ha visitado a su pueblo».
CRISTO EN SU MINISTERIO COMO SACERDOTE
1. Salmo 110:4. «Juró Jehová, y no se arrepentirá: Tú eres sacerdote para siempre según el orden de Melquisedec».
2. Hebreos 3:1. «Por tanto, hermanos santos, participantes de la vocación celestial, considerad al Apóstol y Pontífice de nuestra profesión, Cristo Jesús».
3. Hebreos 4:14. «Por tanto, teniendo un gran Pontífice, que penetró los cielos, Jesús el hijo de Dios, retengamos nuestra profesión».
SUS CARACTERÍSTICAS COMO SACERDOTE / SU SACRIFICIO
1. Hebreos 5:1, 5. «Porque todo pontífice, tomado de entre los hombres, es constituido a favor de los hombres en lo que a Dios toca, para que ofrezca presentes y sacrificios por los pecados ... Así también Cristo no se glorificó a sí mismo haciéndose Pontífice, mas el que le dijo: Tú eres mi Hijo, yo te he engendrado hoy».
2. Isaías 53:5. «Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados: el castigo de nuestra paz sobre él; Y por su llaga fuimos nosotros curados».
3. Marcos 10:45. «Porque el Hijo del Hombre tampoco vino para ser servido, mas para servir, y dar su vida en rescate por muchos».
4. Juan 1:29. «He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo».
5. 1 Pedro 2:24. «El cual mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros siendo muertos a los pecados, vivamos a la justicia».
6. 1 Juan 2:2. «Y él es la propiciación por nuestros pecados: y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo».
SU OBRA INTERCESORA
1. Romanos 8:34. «Cristo es el que murió; más aún, el que también resucitó, quien además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros».
2. Hebreos 7:25. «Por lo cual puede también salvar eternamente a los que por él se allegan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos».
3. 1 Juan 2:1b. «Y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo».
CRISTO COMO REY DE SIÓN
1. Salmo 2:6. « Yo empero he puesto mi rey sobre Sión, monte de mi santidad».
2. Isaías 9:7. «Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán término, sobre el trono de David, y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia, desde ahora para siempre».
3. Lucas 1:32-23. «Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo: y le dará el Señor Dios el trono de David su padre. Y reinará en la casa de Jacob por siempre; y de su reino no habrá fin».
CRISTO COMO REY DEL UNIVERSO.
1. Mateo 28:18. «Y llegando Jesús les habló, diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra».
2. Efesios 1:22. «Y sometió todas las cosas debajo de sus pies, y diólo por cabeza sobre todas las cosa a la Iglesia».
3. 1 Corintios 15:25. «Porque es menester que él reine, hasta poner a todos sus enemigos debajo de sus pies».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Qué nos enseñan los pasajes siguientes sobre la naturaleza de la obra de Cristo como profeta? Éxodo 7:1; Deuteronomio 18:18; Ezequiel 3:17.
2. ¿Qué tipos de Cristo en el Antiguo Testamento nos son indicados en los pasajes siguientes: Juan 1: 29; 1 Corintios 5:7; Hebreos 3:1; 4:14; 8:3-5; 9:13¬14; 10:1-14; 13:11-12?
3. ¿Qué enseñanzas sobre el reino de Dios encontramos en estos pasajes? 1 Juan 3:3, 5; 18:36-37. Romanos 14:17; 1 Corintios 4:20.
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Qué triple ministerio ejerce el Señor Jesucristo?
2. ¿Qué es un profeta y qué pruebas tenemos de que Cristo era profeta?
3. ¿En qué sentido fue Cristo profeta en los diferentes períodos de la historia?
4. ¿Qué distinción existe entre un sacerdote y un profeta? ¿En qué difieren sus enseñanzas respectivas?
5. ¿Qué pruebas bíblicas tenemos sobre el ministerio de Cristo como sacerdote?
6. ¿Cuáles son las características de un sacerdote?
7. ¿Cuál fue la naturaleza del sacrificio de Cristo? ¿En qué sentido fue ya anticipada en el Antiguo Testamento?
8. ¿En qué consiste la obra intercesora de Cristo?
9. ¿Para quiénes intercede Cristo?
    10. ¿Qué cosa es la majestad espiritual de Cristo y cuáles son los límites de su reino?
    11. ¿Cuál es la relación entre el reinado presente de Cristo y el futuro reinado?
    12. ¿Cuánto tiempo durará su reino espiritual?
    13. ¿Cuál es la naturaleza y propósito de su reino espiritual?
    14. ¿Cuánto tiempo durará?

LECCIÓN: 17

LA REDENCIÓN POR CRISTO

LA CAUSA EFICIENTE Y LA NECESIDAD DE LA REDENCIÓN

A menudo ha sido presentado el amor de Cristo a los pecadores como la causa o motivo de la Redención. Se ha dicho que Dios en su ira había decidido la destrucción del pecador y que un Cristo amante intervino y salvó al culpable. De esta forma Cristo recibe todo el honor, y el Padre es desprovisto del que le corresponde. La Biblia nos enseña que la Redención tiene su causa efectiva en el libre arbitrio divino, Isaías 53:10; Lucas 2:14; Efesios 1:6-19-20.
Es mucho más apropiado decir que la Redención está fundada en el amor y en la justicia de Dios. El amor ofreció a los pecadores un camino de salvación y la justicia exigió que los prerrequisitos de la ley fuesen cumplidos, Juan 3:16; Romanos 3:24-26. Hay quienes niegan la necesidad de la Redención y mantienen que Dios habría podido perdonar al pecador sin recibir satisfacción alguna. La Biblia enseña, en cambio, que un Dios justo y santo no puede pasar por alto el pecado sino que tiene que proceder contra él.
Éxodo 20:5; 23:7; Salmo 5:5-6; Nahúm 1:2; Romanos 1:18, 32. Dios ha pronunciado una sentencia de muerte sobre el pecador. Génesis 3:3; Romanos 6:23.

LA NATURALEZA DE LA REDENCIÓN

La Redención tuvo un doble propósito.
VINO A DAR SATISFACCIÓN A DIOS
Se ha dicho con frecuencia que el propósito esencial, sino exclusivo, de la Redención fue despertar al pecador, influenciarlo y volverlo a Dios. Pero esto es erróneo, ya que si una persona ofende a otra, la restitución debe ser hecha no al ofensor sino al ofendido. Esto significa que el propósito primordial fue reconciliar a Dios para con el pecador. La reconciliación del pecador hacia Dios puede ser descrita como un segundo propósito.
FUE UNA REDENCIÓN POR SUSTITUCIÓN
Dios podía haber exigido del pecador una expiación personal, pero éste no habría sido capaz de ofrecerla. En vista de ello, Dios ordenó que Cristo tomara el lugar del pecador como vicario suyo o sustituto. Cristo como representante nuestro expió el pecado de la Humanidad, cargó con la pena del pecado y cumplió todos los requerimientos de la ley. Por tal razón hablamos de la Redención como de un sacrificio vicario o por sustitución. En este caso el ofendido, Dios mismo, proveyó la expiación.
Los sacrificios del Antiguo Testamento eran sólo una figura de la obra Redentora de Cristo que había de ser hecha. Levítico 1:4; 4:20, 31, 35; 5:10, 16; 6:7; 17:11. Sabemos que nuestros pecados fueron cargados sobre Cristo, Isaías 53:6, que Ellos llevó, Juan 1:29; Hebreos 9:28 y que dio su vida por los pecadores, Marcos 10:45; Gálatas 1:4; 1 Pedro 3:18.

COMPRENDÍA LA OBEDIENCIA PASIVA Y ACTIVA DE CRISTO

Es costumbre distinguir el doble aspecto de la obediencia de Cristo. Su obediencia activa se compone de todo lo que Cristo hizo para cumplir la ley en lugar de los pecadores como condición para obtener la vida eterna. Su obediencia pasiva es todo lo que sufrió al pagar la pena del pecado y la deuda de Su pueblo.
A pesar de distinguir estos dos aspectos de la obediencia de Cristo no debemos jamás separarlos absolutamente. Cristo se manifestó en actividad a través de sus sufrimientos, y en pasividad al someterse a la ley. Las Escrituras nos enseñan que pagó el castigo de la ley, Isaías 53:8; Romanos 4:25; Gálatas 3:13; 1 Pedro 2:24, y que mereció la vida eterna en favor del pecador, Romanos 8:4; 10.4; 2 Corintios 5:21; Gálatas 4:4-7.

EL ALCANCE DE LA REDENCIÓN

Los católico-romanos, luteranos y arminianos de todas clases describen la Redención de Cristo como algo universal. Esto no significa que todos los hombres serán salvos, sino que Cristo sufrió y murió con el propósito de salvarlos a todos sin excepción alguna. Admiten al mismo tiempo que la eficacia deseada en tal sacrificio no fue lograda. Cristo no llegó a salvarlos a todos, pero hizo la salvación posible para todos y la Redención es entonces condicionada a su propia elección y albedrío.
Las Iglesias Reformadas creen que la Redención es limitada. Cristo sufrió y murió solo con el propósito de salvar a los elegidos, y este propósito es actualmente logrado. Cristo no tan solo hizo posible la salvación, sino que salva hasta lo sumo a aquellos para los cuales dio su vida, Lucas 9:10; Rom. 5:10; 2 Cor... 5:21; Gálatas 1:4: Efesios 1:7.
La Biblia indica claramente que Cristo dio su vida por su pueblo, Mateo 1:21, por sus ovejas, Juan 10:11,15, para la Iglesia, Hechos 10:28; Efesios 5:25-27, o para los elegidos, Romanos 8:32-35. Si la Biblia dice en ciertas ocasiones que Cristo murió por el mundo, Juan 1:29; 1 Juan 2:2; 4:14, o para todos, 1 Timoteo 2:6; Tito 2:11; Hebreos 2:9, es evidente que significa que murió para gente de todas las naciones del mundo, o (en algunos casos) para toda clase de gentes.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

LA CAUSA DE LA REDENCIÓN
1. Isaías 53:10. «Con todo eso Jehová quiso quebrantarlo, sujetándole a padecimiento. Cuando hubiere puesto su vida en expiación por el pecado, verá linaje, vivirá por largos días, y la voluntad de Jehová será en su mano prosperada».
2. Colosenses 1:19-20. «Por cuanto agradó al Padre que en él habitase toda plenitud, y por él reconciliar todas las cosas a sí, pacificando por la sangre de su cruz.
LA REDENCIÓN POR SUSTITUCIÓN.
1. Isaías 53:6. «Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino: mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros».
2. Marcos 10:45. «Porque el Hijo del hombre tampoco vino para ser servido, más para servir, y dar su vida en rescate por muchos».
3. 2 Corintios 5:21. «Al que no conoció pecado, hizo pecado, por nosotros, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él».
4. 1 Pedro 2:24. «El cual mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros siendo muertos a los pecados, vivamos a la justicia.»
LA OBEDIENCIA ACTIVA Y EL DON DE LA VIDA ETERNA
1. Mateo 3:15. «Empero respondiendo Jesús le dijo: Deja ahora; porque así nos conviene cumplir toda justicia».
2. Mateo 5:17. «No penséis que he venido a abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar sino para cumplir».
3. Gálatas 4:4-5. «Más venido el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, hecho de mujer, hecho súbdito a la ley, para que redimiese a los que estaban debajo de la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos».
4. Juan 10:28. «Y yo les doy vida eterna: y no perecerán para siempre ni nadie las arrebatará de mi mano».
5. Romanos 6:23. «Porque la paga del pecado es muerte: mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro».
LA REDENCIÓN LIMITADA
1. Mateo 1:21. «Y parirá un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados».
2. Juan 10:26-28. «Mas vosotros no creéis, porque no sois de mis ovejas, como os he dicho. Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen; y yo les doy vida eterna: y no perecerán para siempre, ni nadie las arrebatará de mi mano».
3. Hechos 20:28. «Por tanto mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la Iglesia del Señor, la cual ganó por su sangre».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Qué diferencia existe entre la Redención y la Reconciliación?
2. ¿Cómo prueban los pasajes la naturaleza vi caria de los sacrificios del Antiguo Testamento? Levítico 1:4; 3:2; 4:15; 16:21-22.
3. ¿Qué nos enseña Juan 17:9 sobre la extensión de la obra redentora?
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Cuál fue la causa motriz de la Redención?
2. ¿Por qué fue necesaria la Redención?
3. ¿Cuál fue el propósito principal de la misma?
4. ¿Qué diferencia hay entre la redención personal y por substitución'?
5. ¿Cómo fue tipificada en el Antiguo Testamento la Redención por substitución de Cristo?
6. ¿Qué pruebas tenemos de ello en las Escrituras?
7. ¿Qué diferencia hay entre la obediencia activa y pasiva de Cristo?
8. ¿Cuál es el efecto de cada una de ellas?

LECCIÓN: 18

LA DOCTRINA DE LA APLICACIÓN DE LA OBRA DE REDENCIÓN

La operación común del Espíritu Santo: Gracia común. El estudio de la obra redentora realizada por Cristo es seguido, naturalmente, por una discusión sobre la aplicación de esta Redención a los corazones y vidas de los pecadores por una operación especial del Espíritu Santo. Antes de esto trataremos en un breve capítulo las operaciones generales del Espíritu Santo, tal como pueden verse en la gracia común.

NATURALEZA DE LA GRACIA COMÚN

Cuando hablamos de gracia común significamos dos cosas:
A) Las operaciones del Espíritu Santo, por las cuales sin renovar el corazón ejerce tal influencia moral en el hombre que restringe el pecado, mantiene el orden en la vida social y promueve la justicia civil: o:
B) las bendiciones generales que Dios imparte a todos los hombres sin distinción alguna, como a El le place.
En distinción de los Arminianos mantenemos que la gracia común no capacita al pecador para realizar cualquier bien espiritual, ni tampoco para volver a Dios con fe y arrepentimiento. Puede ser resistida por el hombre y lo es siempre en mayor o menor grado; a lo más afecta solamente el aspecto externo de la vida social, civil, moral y religiosa. Aun cuando Cristo murió por el solo propósito de salvar a los elegidos, sin embargo la raza humana completa incluyendo los impenitentes y los réprobos derivan grandes beneficios de su muerte.
Las bendiciones de la gracia común pueden juzgarse como un resultado indirecto de la obra expiatoria de Cristo.

MEDIOS DE LA GRACIA COMÚN

Pueden distinguirse varios medios:
A) El más importante de todos es la luz de la revelación divina en general. Sin esto todos los demás medios de gracia serían imposibles e inefectivos. Ella ilumina a todos los hombres y sirve de guía a la conciencia natural.
B) Los gobiernos humanos también sirven a este propósito. Según nuestra constitución están instituidos para refrenar las tendencias al mal y promover el buen orden y la decencia.
C) La opinión pública es también un buen medio mientras está en armonía con la ley de Dios. Tiene una enorme influencia sobre los hombres sensibles al juicio de la opinión pública.
D) Finalmente, el castigo y la recompensa divinos sirven también para mantener la buena moral en el mundo. A menudo, los castigos refrenan los hechos pecaminosos de los hombres, y las recompensas les impulsan a hacer lo bueno y justo.

EFECTOS DE LA GRACIA COMÚN

Los siguientes efectos pueden ser atribuidos a la operación de la gracia común: a) El aplazamiento de la ejecución de la sentencia de muerte en el hombre. Dios no ejecutó la sentencia de muerte sobre el pecador enseguida, sino que le dio tiempo para el arrepentimiento, Rom. 2:4; 2." Pedro 3:9. b) El pecado es refrenado en la vida de los individuos y de las naciones.
La corrupción que entró en la vida humana por el pecado es restringida y no se le permite completar todavía su obra destructora, Gen. 20:6; 31:7, J ob. 1: 12, 2:6. c) El hombre posee todavía, algo del sentido de la verdad, de la moralidad y ciertas formas de religión. Rom. 2: 14, 15; Hech. 17:22. d)
El hombre natural, es aún capaz de realizar bien natural o justicia civil, obras, que exteriormente están en armonía con la ley divina, a pesar de que son sin valor espiritual, II Reyes 10:29, 30; 12:2; 14:3, Lucas 6:33. p) Todos los hombres reciben numerosas bendiciones inmerecidas de Dios. Salmos 145: 9, 15, 16; Mat 5: 44, 45; Lucas 6: 35, 36; Hech. 14:16, 17; 1 Timoteo 4:10.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

LA LUCHA GENERAL DEL ESPÍRITU SANTO CON LOS HOMBRES:
1. Gen. 6:3. «Y dijo Jehová. No contenderá mi Espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne».
2. Isaías 63:10 «Mas ellos fueron rebeldes e hicieron enojar al Espíritu Santo; por lo cual se les volvió enemigo, y El mismo peleó contra ellos».
3. Rom. 1:28. «Y como a ellos no les pareció tener a Dios en su noticia, Dios los entregó a una mente depravada, para hacer lo que no conviene».
LA RESTRICCIÓN DEL PECADO
1. Gen. 20:6 «y dijóle Dios en sueños (Abimelech). Yo también se que con integridad de tu corazón has hecho esto: y Yo te detuve de pecar contra mí.
2. Salmos 105.14. «No consintió que un hombre los agraviase. Y por causa de ellos castigó a los reyes».
BUENAS OBRAS POR PARTE DEL NO REGENERADO.
1. 2ª Reyes 10:30 «y Jehová dijo a Jehú: Por cuanto has hecho bien ejecutando lo recto delante de mis ojos. E hiciste a la casa de Achab conforme a todo lo que estaba en mi corazón, tus hijos se sentarán sobre el trono de Israel hasta la cuarta generación».
2. Lucas 6:33. «Y si hicieres bien a los que os hacen ¿qué gracia tendréis? Porque los pecadores hacen lo mismo.
3. Romanos 2:14, 15. «Porque los gentiles que no tienen ley, naturalmente haciendo lo que es de la ley, los tales, aunque no tengan ley, ellos son la ley a si mismos; mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones».
BENDICIONES INMERECIDAS A TODOS LOS HOMBRES
1. Salmos 145:9 «Bueno es Jehová para con todos, y sus misericordias sobre todas sus obras».
2. Mateo. 5:44, 45 «Más yo os digo, Amad a vuestros enemigos bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen. Para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los Cielos que hace que el sol salga sobre justos e injustos».
3. 1ª Timoteo 4:10 «Por esto aún trabajamos y sufrimos oprobios, porque esperamos en el Dios en el viviente, el cual es Salvador de todos los hombres, mayormente de los que creen».
PARA ESTUDIO BÍBLlCO ADICIONAL
1. ¿Cuáles son los tres aspectos de la Gracia Común sobre las cuales nuestra iglesia pone un énfasis especial?
2. ¿Como Mateo 21:26,46 y Marcos 14:2, muestran la influencia refrenadora de la opinión pública?
3. ¿Cómo Rom. 1: 24, 26, 28 y Hebr. 6: 4-6 prueban la Gracia Común?
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Qué es Gracia Común?
2. ¿En qué se diferencia nuestro punto de vista acerca de ella del de los Arminianos?
3. ¿Tiene la Gracia Común algún efecto salvador o espiritual?
4. ¿Está conectada de algún modo con la obra redentora de Cristo?
5. ¿Por qué medios obra la Gracia Común?

LECCIÓN: 19

LLAMAMIENTO Y REGENERACIÓN

LLAMAMIENTO

El llamamiento puede definirse, en general, como el acto de gracia de Dios por el cual invita a los pecadores a aceptar la salvación que Se ofrece en Cristo Jesús. Tanto puede ser interno como externo.

EL LLAMAMIENTO EXTERNO

La Biblia habla o se refiere a esto en varios pasajes. Mateo 28:19 y 24:14. Lucas 14: 16-24 Hechos 13:46. 2. a Tesalonicenses 1:8. Juan 5:10. Consiste en la presentación y ofrecimiento de salvación en Cristo a los pecadores, juntamente con una tierna exhortación a aceptar a Cristo por fe para obtener el perdón de los pecados y la vida eterna. Según esta definición contiene tres elementos, llamados:
1) Una presentación de los hechos e ideas del Evangelio;
2) Una invitación a arrepentirse y creer en Cristo Jesús;
3) Una promesa de perdón y salvación.
La promesa es siempre condicional: Su cumplimiento puede esperarse solamente por medio de la verdadera fe y el arrepentimiento.

LLAMAMIENTO UNIVERSAL

El llamamiento externo es universal en el sentido de que viene a todos los hombres a quienes se predica el Evangelio. N o está limitado a ninguna edad ni nación ni a cualquier clase de hombres, y es hecho al degenerado del mismo modo que al elegido Isaías 45:22. 55: 1; Ezequiel 3:19; Joel 2:32; Mateo 22:3-8-14; Apocalipsis 2:17.
Naturalmente, este llamamiento por venir de Dios, es de gran significado. El llama a los pecadores en realidad, desea tiernamente que acepten la invitación, y con toda sinceridad promete vida eterna a los que se arrepientan y crean.
1. LLAMAMIENTO FORMAL:
Números 23:19; Salmos 81:13-16; Proverbios 1:24; Isaías 1:18-20; Ezequiel 18:23 y 33:11; Mateo 23:33; 2." Timoteo 2:13. En el llamamiento externo Dios mantiene su demanda al pecador. Si el hombre no acepta la llamada, rechaza la demanda de Dios y aumenta por consiguiente su culpa.
Este es también el medio señalado por el cual Dios junta a los elegidos de todas las naciones de la tierra. Rom. 10:14-17 y debería juzgarse como una bendición para los pecadores, a pesar de que pueda convertirse en una maldición. Isaías 1: 18:20; Ezequiel 3: 18-19; Amos 8:11; Mateo 11:20-24 y 23-37. Finalmente sirve también para justificar la condenación de los pecadores. Si ellos menosprecian la' oferta de salvación su culpa se hace más clara, Juan 5:39 y 40; Romanos 3:5-6-19.
2. LLAMAMIENTO INTERNO:
Aunque distinguimos dos aspectos del llamamiento de Dios, es realmente uno. El llamamiento interno no es otra cosa, en realidad, sino el llamamiento externo hecho efectivo por la operación del Espíritu Santo. Viene siempre al pecador por medio de la Palabra de Dios, cuidadosamente aplicada por la operación del Espíritu Santo. 1." Corintios 1:23-24. En distinción del llamamiento externo es una llamada poderosa que tiene como resultado la salvación, Hechos 13:48; 1." Corintios 1:23-24.
Además es un llamamiento sin arrepentimiento o cambio por parte de Dios, y nunca es quitado. Romanos 11:29. La persona llamada será salva con toda seguridad. El Espíritu opera por la predicación de la Palabra de Dios persuadiendo de un modo efectivo, por lo tanto la persona llamada atiende la voz de su Dios. Se dirige a su buena comprensión iluminada por el Espíritu Santo para que el individuo sea consciente de ella. Se dirige siempre a un final cierto.
Es el llamamiento a la comunión con Jesucristo, 1.a Cor. 1:9. A la bendición heredada, l." Pedro 3:9; a la libertad, Gálatas 5:13; a la paz, 1.a Corintios 7:1,-; a la santidad, 1.a Tesalonicenses 4:7; a una esperanza, Efesios 4:4; a la vida eterna, 1ª Timoteo 6:12 y al Reino y gloria de Dios, 1.a Tesalonicenses 2:12.

REGENERACIÓN

El llamamiento divino y la regeneración están mutuamente en la más estrecha relación. Con respecto a la regeneración hay varios puntos dignos de considerar:
SU NATURALEZA
La palabra «regeneración» no se usa siempre en el mismo sentido. Nuestra Confesión la usa en un sentido muy amplio que incluye hasta la conversión. En este punto de nuestro estudio tiene un significado un poco más restringido. En su significado más estricto denota el hecho divino por el cual se implanta en el hombre el principio de la nueva vida, el cual gobierna la disposición del alma santificada.
En su sentido más amplio designa, además de lo antedicho, el nuevo nacimiento, o sea la primera manifestación de la nueva vida. Es un cambio fundamental en la vida y en el gobierno del alma, por consiguiente afecta todo el hombre, 1.a Corintios 2:14; 2.a Corintios 4:6; Filipenses 2:13; 1." Pedro 1:8, el cual se ejecuta en un momento, y no por un proceso gradual, como la santificación. Por ella pasamos de la muerte a la vida 1 Juan 3:14. Es una secreta e inescrutable obra de Dios que nunca es percibida directamente por el hombre sino que puede conocerse solamente por sus efectos.
SU AUTOR
Dios es el Autor de la regeneración. La Escritura la presenta como la obra del Espíritu Santo, l." Juan 13; Hechos 16:14; Juan 3:5-8. En contra de los Arminianos nosotros mantenemos que es una obra exclusiva del Espíritu Santo y no en parte una obra del hombre. No hay ninguna cooperación entre el hombre y Dios en la obra de regeneración, como la hay en la conversión.
La regeneración, en el sentido más estricto de la palabra, es la implantación de la nueva vida en el alma, por tanto es una obra directa e inmediata del Espíritu Santo. Es una obra creativa, un milagro de Dios, por lo cual el Evangelio no puede ser usado como instrumento en este sentido.
Es cierto que Santiago 1: 18 y 1ª Pedro 1:23, parecen probar que la predicación del Evangelio es usada como un instrumento de la regeneración, pero estos pasajes se refieren a la regeneración en un sentido más amplio, incluyendo el nuevo nacimiento y sus frutos. En este sentido más inclusivo la regeneración es realizada sin duda por el instrumento de la Palabra.

SU LUGAR Y NECESIDAD EN EL ORDEN DE LA SALVACIÓN

La Escritura no deja duda en cuanto a la necesidad absoluta de la regeneración, antes lo afirma en los más claros términos, Juan 3:3, 5, 7; 1.a Corintios 2:14; Gálatas 6: 15.
Esto se saca del hecho de que somos por naturaleza muertos en nuestras culpas y pecados y debemos ser dotados con una nueva vida espiritual para poder gozar del favor divino y la comunión con Dios. La cuestión que se levanta algunas veces es: ¿Cual de las dos cosas es primera, el llamamiento o la regeneración?
Puede decirse que en el caso de adultos el llamamiento externo precede o coincide con la regeneración en el sentido más estricto. La regeneración, como implantación de la nueva vida precede al llamamiento interno, pero el llamamiento interno precede a la regeneración en su sentido más amplio, o sea en el de nuevo nacimiento.
Encontramos este orden indicado en el caso de conversión de Lidia Hechos 16:4. «Entonces una mujer llamada Lidia que vendía púrpura en la ciudad de Tiatira, temerosa de Dios, estaba oyendo (llamamiento externo); el corazón de la cual abrió el Señor (regeneración en su sentido estricto); para que estuviese atenta a lo que Pablo decía (llamamiento interno)».

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

PASAJES QUE PRUEBAN EL LLAMAMIENTO EXTERNO
1. Marcos 16:15-16. «Id por todo el mundo... el que creyere y fuere bautizado será salvo, más el que no creyere será condenado».
2. Mateo 22:14. «Porque muchos son los llamados más pocos los escogidos».
3. Hechos 13:46. «Entonces Pablo y Bernabé usando de libertad dijeron: A vosotros a la verdad era menester que se os hablase la Palabra de Dios: pues que la desecháis y os juzgáis indignos de la vida eterna he aquí nos volvemos a los gentiles.
LLAMAMIENTO A LOS RÉPROBOS
1. Proverbios 1:24-26, «Por cuanto llamé y no quisisteis. Extendí mi mano y no hubo quienes escuchasen. Antes desechasteis todo consejo mío y mi reprensión no quisisteis»
2. 1ª Pedro 3: 19-20, «En el cual también fue y predicó a los espíritus encarcelados: los cuales en otro tiempo fueron desobedientes, cuando una vez esperaba la paciencia de Dios en los días de Noé, cuando se aparejaba el Arca en la cual pocas: es a saber 8 personas fueron salvas por agua».
3. Véanse también las palabras de Mateo 22:-1-8-14; Lucas 16-24.
SERIEDAD DE ESTE LLAMAMIENTO
1. Proverbios 1:24¬26 (véase párrafo b)
2. Ezequiel 18:23-32. ¿Quiero yo la muerte del impío? dice el Señor Jehová. ¿No vivirá si se apartare de sus caminos? «Que no quiero la muerte del que muere, dice el Señor Jehová, convertíos pues y viviréis,
3. Mateo 23:37, ¡Jerusalén! Jerusalén, que matas a los profetas, y apedreas: a los que son enviados a ti. Cuántas veces quise juntar tus hijos, como la gallina sus polluelos, debajo de sus alas y no quisiste»
LA NECESIDAD DE LA REGENERACIÓN.
1. Jeremías 13:23. ¿Mudará el etíope su pellejo, o el leopardo sus manchas? ¿Así también podréis vosotros hacer bien estando habituados a hacer mal?
2. Juan 3:3, 7, «Respondió Jesús y díjole: «De cierto de cierto te digo, el qua no naciere otra vez, no puede ver el Reino de Dios». «No te maravilles de que te dije os es necesario nacer otra vez».
LA PALABRA DE DIOS Y LA REGENERACIÓN.
1. Santiago 1:18. «El de su voluntad nos ha engendrando, por la palabra de Verdad, para que fuésemos primicias de sus criaturas».
2. 1ª Pedro 1:23. «Habiendo sido renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y permanece para siempre».
PARA ESTUDIO BÍBLlCO ADICIONAL
1. ¿Es el llamamiento la obra de una persona de la Trinidad, o de todas tres? 1. A Corintios 1:9; 1ª Tesal. 2: 12; Mat. 11:28; Lucas 5:32; Mat. 10:20 y Hechos 5: 31, 32.
2. ¿Se emplea en la Biblia la palabra regeneración?
3. Tito 3:5. ¿Qué otros términos se usan para expresar esta idea? Juan 3:5, 7, 8; Corintios 5: 17; Efesios 2:5; Colosenses 2:13; Santiago 1:18 y 1 Pedro 1:23.
4. ¿El texto Tito 3:5, prueba que somos regenerados por el bautismo? Si no es así, ¿cómo lo explicaría usted?
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Qué queremos significar con la palabra llamamiento?
2. ¿En qué se diferencian el llamamiento interno y el externo?
3. ¿Qué elementos se incluyen en el llamamiento ex-terno?
4. ¿En qué sentido es universal?
5. ¿Qué propósito tiene?
6. ¿Cómo se relacionan el llamamiento interno y el externo?
7. ¿Somos conscientes de ello?
8. ¿A qué fin se dirige?
9. ¿Qué diversos significados tiene la palabra Regeneración?
      10. ¿Cuál es el sentido más restringido?
      11. ¿Cuál es la naturaleza del cambio obrado en la Regeneración?
      12. ¿Es la Regeneración una obra de Dios solo, o de Dios y el hombre?
      13. ¿Es usada la Palabra de Dios como instrumento en la Regeneración?
      14. ¿Es la Regeneración absolutamente necesaria? Pruébelo.
      15. ¿Cuál es el orden del llamamiento y la Regeneración?

LECCIÓN: 20

LA CONVERSIÓN, ARREPENTIMIENTO Y FE

Cuando el cambio operado en la regeneración empieza a manifestarse en la vida consciente, lo llamamos conversión.

LA CONVERSIÓN EN GENERAL

La Biblia no siempre habla de la conversión en el mismo sentido. La conversión a la cual nos referimos aquí, puede ser definida como el acto divino por el cual Dios hace al regenerado volverse a El de un modo consciente, con arrepentimiento y fe. Por esta definición ya se comprende que Dios es el autor de la conversión. Esto es claramente enseñado en la Escritura. Hechos 11:18; 2.a Timoteo 2:25.
La nueva vida de la regeneración no obra por sí misma un cambio consciente de vida, sino por medio de una obra especial del Espíritu Santo, Juan 6:44 y Fil. 2:13. Pero mientras en la regeneración, es Dios solamente quien obra y el hombre es meramente pasivo, en la conversión la persona regenerada es llamada a cooperar, Isaías 56:7; Jeremías 18:11; Hechos 2 :38 y 17 :30. Pero aun en este caso, el hombre sólo puede actuar por el poder que Dios le imparte.
Como la regeneración, la conversión consiste también en un cambio momentáneo, y no es un proceso como el de la santificación; mas difiere de, la regeneración en este aspecto, en que es un cambio consciente y no inconsciente. Aun cuando la conversión es indispensable en todos los adultos, Ezequiel 30:3, 11 y Mateo 18:3, no es necesario que aparezca en la vida de cada uno de estos como una crisis extraordinaria y remarcable.
La Biblia menciona casos de conversión tales como de Naaman, 2.a Reyes 5:15; Manases 2.a Crónicas 33: 12 y 13; Zaqueo, Lucas 19:8; el Eunuco, Hechos 1:30; Cornelio, Hechos 10:44; Pablo, Hechos 9:5; Lidia, Hechos 16:14, etc. Pero también Se habla de conversiones nacionales, como en Jonás 3:10, que fue una conversión temporal, sin cambio de corazón. Véase Mateo 13:20 y 21; 1.a Tim. 1:19 y 20; 2ª Tim. 4:10; Hebreos 6:4, 6.
Asimismo se mencionan conversiones repetidas, en Lucas 22:32; Apocalipsis 2:5, 16, 21 y 22; 3:3, 19. Pero no son repeticiones de la conversión en el sentido estricto de la palabra, ya que ésta no admite repetición, sino una actividad reanimada de la nueva vida, después que ha sufrido un eclipse. La conversión comprende dos elementos, uno positivo y otro negativo, que se llaman arrepentimiento y fe, los cuales merecen ser tratados por separado.

EL ARREPENTIMIENTO, ELEMENTO NEGATIVO DE LA CONVERSIÓN

El arrepentimiento tiene que ver con el pasado, y puede ser definido como el cambio operado en la vida consciente del pecador, mediante el cual éste se aparta del pecado.
Esto incluye tres partes:
A) El elemento intelectual, que es una visión de la vida pasada en pecado, incluyendo culpa personal, contaminación e impotencia.
B) El elemento emocional, que es un sentimiento de tristeza por el pecado cometido contra el santo y justo Dios, y:
C) un elemento voluntario, que consiste en un cambio de propósito, en una repudiación interna del pecado, acompañada de la disposición a buscar perdón y limpieza. (Rom. 3:20; 2.a Corin. 7:9, 10 y Rom. 2:4).
Esta actitud es obrada principalmente por la ley de Dios. Los católico-romanos tienen un concepto externo del arrepentimiento. Según ellos, comprende dolor, no por el pecado interno, sino por las transgresiones personales, que pueden ser simplemente temor del castigo eterno, y el remedio para ello es una confesión al sacerdote quien puede perdonar pecados -según ellos-, y una cierta medida de satisfacción por medio de hechos externos, como penitencias, ayunos, azotes, peregrinaciones, etc.
En cambio la Biblia considera el arrepentimiento como un acto totalmente interior, como un dolor real a causa del pecado, el cual no debe confundirse con el cambio de vida resultante.

ELEMENTO POSITIVO DE LA CONVERSIÓN

Al revés del arrepentimiento, la fe mira al futuro.

DIFERENTES CLASES DE FE

La Biblia no habla siempre de la fe en el mismo sentido. Se refiere a la fe histórica, que consiste en una aceptación intelectual de la verdad de las Escrituras, sin ninguna respuesta moral o espiritual. Esta clase de fe no tiene verdadero interés en la verdad, ni la toma en serio. Hechos 26:27 y 28; Santiago 2:19.
También se habla de la fe temporal, que abraza las verdades de la religión por un impulso de la conciencia, y una excitación de los afectos, pero está arraigada en un corazón regenerado. Se llama fe temporal, Mat. 13:20, 21, porque no tiene un carácter permanente, y no se mantiene en días de prueba y persecución. Véase Hebreos 6:4, 6; 1ª Tim. 1: 19, 20; 1ª Juan 2:19. También se menciona una fe milagrera, o sea la convicción que una persona tiene de que tendrá lugar un milagro a su favor, Mat. 8:11, 13; 17:30; Marcos 6: 17 y 18; 1.a Juan 11:22, 40; Hechos 14:9. Esta fe, puede o no ir acompañada de una fe verdadera y salvadora.
Finalmente, la Biblia no sólo menciona, sino que hace énfasis en la necesidad de la fe salvadora, la cual tiene su asiento en el corazón, y su arraigo en la vida regenerada. Su semilla es plantada en la regeneración, y florece en forma de una fe activa. Puede ser definida como una convicción positiva, operada en el corazón por el Espíritu Santo, respecto a la verdad del Evangelio, y una confianza de corazón en las promesas de Dios en Cristo.

LOS ELEMENTOS DE LA FE

Distinguimos tres elementos en la fe salvadora, a saber:
1. El elemento intelectual. Hay un reconocimiento positivo de la verdad revelada en la Palabra de Dios, un discernimiento espiritual que apela al corazón del pecador. Es un conocimiento cierto, basado en las promesas de Dios. Aunque no necesita comprender todas las cosas, debe ser suficiente para dar al creyente alguna idea de las verdades fundamentales del Evangelio.
2. El elemento emocional, o sentimiento. Este elemento no se menciona por separado en el catecismo de Heidelberg, porque virtualmente va incluido en el conocimiento de la fe salvadora. Este conocimiento se caracteriza en que proporciona una fuerte convicción de su importancia, y esto es lo que se llama asentimiento. La verdad Se apodera del alma.
3. El elemento de la voluntad, o confianza. Este es el que corona la fe salvadora. Es una confianza personal en Cristo como Salvador y Señor que incluye la rendición a Cristo del alma culpable y manchada, y una plena confianza en El como única fuente de perdón y vida espiritual.
El objeto de la fe salvadora es, en el último término, Jesucristo; y en El se basa toda esperanza de salvación, Juan 3:16; 18:36:6,40; Hech. 10; 43; Rom. 3:22; Gal.. 2:16. Esta fe no es de origen humano, sino un don de Dios, 1.a Cor. 12:8-9; Gal. 5:22; Ef. 2:18, pero su ejercicio es un acto humano al cual los hijos de Dios son exhortados reiteradamente, Rom. 10:9; 1ª Cor. 2:5; 5 Col. 1:23; Tim. 1:5; 6-11.

SEGURIDAD DE LA FE

Los metodistas sostienen que el creyente obtiene al creer la seguridad de ser hijo de Dios, pero que esto no significa salvación segura, ya que se puede caer de la Gracia.
El punto de vista correcto es que la verdadera fe, incluyendo la confianza en Dios, trae un sentimiento de seguridad que puede variar en grado. Esta seguridad no es una posición permanente del creyente; ya que éste no siempre vive en la plenitud de la vida de fe, ni goza siempre de una consciencia de sus riquezas espirituales.
Puede ser turbado por dudas e incertidumbres y por lo tanto es exhortado a cultivar su propia seguridad, 2 Cor... 13:5; Heb. 6:11; 2 Pedro 1-10; 1.a Juan 3:19. Esto puede hacerse por medio de la oración, la meditación, sobre las promesas de Dios, y por el desarrollo de una verdadera vida cristiana.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

QUE DIOS ES EL AUTOR DE LA CONVERSIÓN.
1. Hechos 11:18. «Y cuando oyeron estas cosas callaron, y glorificaron a Dios diciendo: de manera que también a los gentiles ha dado Dios arrepentimiento para vida».
2. 2ª Tim. 2:25. «Que con mansedumbre corrija a los que se oponen: si quizá Dios les dé que se arrepientan para conocer la verdad».
3. Que el hombre coopera en su conversión. Isaías 55:7. «Deje el impío su camino y el hombre inicuo sus pensamientos y vuélvase a Jehová el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro el cual será amplio en perdonar».
4. Hechos 17:30. «Dios habiendo disimulado los tiempos de esta ignorancia, ahora denuncia a todos los hombres en todos los lugares que se arrepientan».
NECESIDAD DE LA CONVERSIÓN
1. Ezq. 33:11. «Diles, vivo yo, dice el Señor, que no quiero la muerte del impío, sino que se torne el impío de su camino, y que viva. Volveos, volveos de vuestros malos caminos: ¿ y por qué moriréis, oh casa de Israel»
2. Mat. 18:3. «De cierto os digo, que si no os volviereis y fuereis como niños no entraréis en el Reino de los Cielos».
3. Hechos 26:27, 28. « ¿Crees rey Agripa a los profetas? yo sé que crees. Y Agripa dijo a Pablo: Por poco me persuades a ser cristiano».
4. Sant 2:19. «Tú crees que Dios es uno, haces bien, los demonios también creen y tiemblan».
FE TEMPORAL
1. Mat. 13:20-21. «Y el que fue sembrado en pedregales este es el que oye la Palabra y luego la recibe con gozo; mas no tiene raíz en sí, antes es temporal, que venida la aflicción o la persecución por la Palabra luego se ofende».
2. 1ª Juan 2:19. «Salieron de nosotros, mas no eran de nosotros porque si fueran de nosotros, hubieran cierto permanecido con nosotros; pero salieron para que se manifestase que todos no son de nosotros».
FE MILAGRERA
1. Mateo 17:20b. «Si tuviereis fe como un grano de mostaza, diríais a este monte pásate de aquí allá y se pasará; y nada os será imposible».
2. Hechos 14:9-10. «Este oyó a hablar a Pablo, el cual como puso los ojos en él y vio que tenía fe para ser sano dijo a gran voz: Levántate derecho sobre tus pies, y saltó y anduvo».
CRISTO COMO OBJETO DE LA FE SALVADORA
1. Juan 3:16. «Porque de tal manera amó Dios al mundo que ha dado a su Hijo Unigénito, para que todo aquel que en El cree, no se pierda, mas tenga vida eterna».
2. Juan 6:40. «Y esta es la voluntad del que me ha enviado: que todo aquel que ve al Hijo y cree en El tenga vida eterna, y yo le resucitaré en el día postrero».
3. Heb. 6:11. «Mas deseamos que cada uno de vosotros muestre la misma solicitud hasta el cabo, para cumplimiento de la esperanza».
4. 2ª Pedro 1:10. «Por lo cual, hermanos, procurad tanto más de hacer firme vuestra vocación y elección; porque haciendo estas cosas no caeréis jamás».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Qué clase de arrepentimiento se menciona en Mat. 27:3; 2.a Cor... 7:10b?
2. ¿Puede usted nombrar personajes bíblicos en cuyas vidas no era presumible esperar una conversión en forma de crisis prominente? Jer. 1:4; Lucas 1:5; 2.a Tim.3:15.
3. ¿Puede usted citar algunas de las grandes frases bíblicas que ofrecen seguridad? Heb. 3:17, 18; 2.a Cor... 4:16-5:1; 2.a Tim. 1:12.
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿En cuántos sentidos diferentes habla la Biblia de conversión?
2. ¿En qué se diferencia la conversión temporal y la repetida?
3. ¿Qué es verdadera conversión? ¿Qué elementos incluye?
4. ¿Qué elementos incluye el arrepentimiento?
5. ¿Cómo conciben el arrepentimiento los católicos romanos?
6. ¿En qué difiere la conversión de la regeneración?
7. ¿Quién es el autor de la conversión? ¿Coopera el hombre en ella?
8. ¿Es siempre necesaria una aguda crisis en la conversión?
9. ¿De cuántas diferentes clases de fe habla la Biblia?
10. ¿Cuáles son las características de la fe histórica, temporal y milagrera?
11. ¿En qué difiere la fe temporal de la fe salvadora?
12. ¿Qué elementos están incluidos en la fe? ¿Cuánto conocimiento se necesita?
13. ¿Cuál es el elemento que corona la fe salvadora?
14. ¿ Quién es el objeto de la fe salvadora '?
15. ¿Posee siempre el cristiano la seguridad de la salvación?
16. ¿Cómo puede cultivar esta seguridad?

LECCIÓN: 21

LA JUSTIFICACIÓN

NATURALEZA Y ELEMENTOS DE LA JUSTIFICACIÓN

La justificación puede ser definida como el acto legal por el cual Dios declara justo al pecador sobre la base de la perfecta justicia de Jesucristo. No es un acto o proceso de renovación, como lo son la regeneración, la conversión o la santificación, y no afecta la condición, sino el estado del pecador. Difiere de la santificación en varios aspectos: la justificación tiene lugar fuera del pecador, ante el tribunal de Dios, quitando la culpa del pecado, y es un hecho completo de una vez y para siempre; mientras que la santificación tiene lugar en el hombre, quitando la inmundicia del pecado, y es un proceso continuado durante toda la vida. Distinguimos dos elementos en la justificación, que son:

EL PERDÓN DE LOS PECADOS SOBRE LA BASE DE LA JUSTICIA DE JESUCRISTO

El perdón concebido se aplica a todos los pecados, pasados, presentes y futuros, y por lo tanto no puede ser repetido. Salmo 103-12; Isa. 44-22; Rom. 5:21, 8-1, 32-34; Ef. 10: 14. Esto no significa que no necesitamos orar más por perdón, pues la consciencia del pecado queda más refinada que nunca, creando un sentimiento de separación y repulsa del pecado, y a causa de la debilidad humana resulta necesario buscar repetidamente, la consoladora seguridad del perdón. Sal. 25:7; 32:5; 51:1; Mat. 6:12; Santo 5:15; La Juan 1:9.

LA ADOPCIÓN COMO HIJOS DE DIOS

En la justificación Dios adopta a los creyentes como hijos suyos, les pone en la posición de hijos y les da todos los derechos de tales, incluyendo el de una herencia eterna. Rom. 8: 17; 1.a Ped. 1:4. Esta adopción legal de los creyentes debe ser distinguida de su adopción moral por la regeneración y la santificación.
El primer aspecto se ha definido en Juan 1:12, 13, y el segundo en Romanos 8: 15, 16. En Gal.. 4:5, aparece el primero, ambos en Gal.. 4:5, 6, por orden correlativo.

EL CUÁNDO Y CÓMO DE LA JUSTIFICACIÓN

La palabra justificación no es usada siempre en el mismo sentido, algunos hablan de cuatro aspectos de la justificación.
1. Justificación desde la Eternidad.
2. Justificación en la resurrección de Cristo.
3. Justificación por la fe.
4. Justificación pública en el juicio final.
Como explicación a este cuádruplo aspecto de la Justificación, puede decirse que en un sentido ideal, la justicia de Cristo ya es aplicada a los creyentes, en el consejo de la Redención, y por lo tanto desde la eternidad; pero no es esto lo que quiere decir la Biblia cuando habla de la justificación del pecador. Debemos distinguir entre lo que fue decretado en el eterno consejo de Dios y lo que es realizado en el curso de la historia.
También hay alguna razón para hablar de la justificación en la resurrección de Cristo. En cierto sentido puede ser dicho que la resurrección fue la justificación de Cristo, la declaración de que su obra era perfecta, y aceptada por Dios, y en El todo el conjunto de los creyentes fue justificado. Pero esta es una transacción general y puramente objetiva, que no debe ser confundida por la justificación personal de cada pecador.
Cuando la Biblia habla de la justificación del pecador, se refiere generalmente a la aplicación subjetiva y personal, o sea a la apropiación de la gracia justificadora de Dios. Generalmente se dice que somos justificados por fe. Esto significa que tiene lugar en el momento cuando aceptamos a Cristo por fe. La fe ha sido llamada el instrumento o el órgano que se apropia la justificación decretada por Dios. Por fe el hombre se apropia, esto es: toma para sí, la justicia de Cristo, y sobre esta base es justificado ante Dios. La fe le justifica en cuando toma posesión de Cristo. Rom. 4:5; Gal.. 2:16.
Debemos guardarnos contra el error del católico romano, y de los Arminianos, que dicen que el hombre es justificado sobre la base de su propia justicia inherente, o por su fe. Ni la propia justicia del hombre, ni su propia fe pueden ser base de su justificación. Esta se halla tan solamente en la perfecta justicia de Jesucristo. Rom. 3:24; 10:4; 2.a Cor. 5:21 y Fil. 3:9.

OBJECIONES A LA DOCTRINA DE LA JUSTIFICACIÓN

Se han presentado varias objeciones a esta doctrina. Se dice que si el hombre es justificado sobre la base de los méritos de Cristo, no es salvo por gracia. Pero la justificación con todo lo que incluye, es una generosa obra de Dios. El don de Cristo.
El hecho de que Dios nos aplique su justicia, y su modo de tratar a los pecadores como justos, en virtud de este plan de salvación, es todo ello gracia desde el principio al fin. También se dice que es indigno de Dios el declarar justos a los pecadores, pero Dios no declara que los justificados son justos por sí mismos, sino que son vestidos con la justicia de Jesucristo.
Finalmente se arguye que esta doctrina es a propósito para hacer a la gente indiferente en cuanto a su vida moral. Si son justificados, sin consideración a sus obras, ¿por qué tendrían que tener cuidado en cuanto a su vida moral ya su piedad? Pero la justificación pone los fundamentos para una vida de comunión con Cristo, y es la más segura garantía para una vida verdaderamente santa. El hombre que vive realmente en unión con Cristo, no puede ser indiferente a sus deberes morales, Rom. 3:5-8.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

LA JUSTIFICACIÓN EN GENERAL
1. Rom. 3:24. «Siendo justificados gratuitamente por su gracia, por la Redención que es en Cristo Jesús».
2. 2ª Cor... 5:21. «Al que no conoció pecado, hizo pecado por nosotros; para que nosotros pudiéramos ser hechos justicia de Dios en El».
LA JUSTIFICACIÓN POR FE, NO POR OBRAS
1. Rom. 3:28. «Así que concluimos ser el hombre justificado por fe sin las obras de la ley».
2. Rom. 4:5. «Mas al que no obra pero cree en Aquel que justifica al impío, la fe le es contada por justicia».
3. Gal. 2:16. «Sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo para que fuésemos justificados para la fe de Cristo y no por las obras de la Ley, por cuanto por las obras de la ley ninguna carne será justificada».
LA JUSTIFICACIÓN Y EL PERDÓN DE LOS PECADOS
1. Salmo 32:1, 2. «Bienaventurado es el hombre cuyas iniquidades son perdonadas y. borrados sus pecados, bienaventurado aquel a quien Jehová no imputa iniquidad y en cuyo espíritu no hay superchería».
2. Hechos 13:38-39. «Seaos pues notorio, varones hermanos, que por este os es anunciada remisión, de pecados; y de todo lo que por la ley de Moisés no pudisteis ser justificados, en éste es justificado todo aquel que creyere».
LA ADOPCIÓN DE HIJOS, HEREDEROS DE LA VIDA ETERNA
1. Juan 1:12. «Mas a todos los que le recibieron, dióles potestad de ser hechos hijos de Dios, a los que creen en su nombre».
2. Gálatas 4:4-5. «Mas venido el cumplimiento del tiempo Dios envió a su hijo hecho de mujer, hecho súbdito a la ley, para que redimiese a los que estaban debajo de la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos».
LA JUSTIFICACIÓN BASADA EN LA JUSTICIA DE CRISTO
1. Rom. 3:21-22. «Mas ahora sin la ley, la justicia de Dios se ha manifestado, testificada por la ley y por los profetas: la justicia de Dios por la fe de Jesucristo, para todos los que creen en El; porque no hay diferencia».
2. Rom. 5:18. «Así que de la manera que por un delito vino la culpa a todos los hombres para condenación, así por una justicia vino la gracia a todos los hombres para justificación de vida».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Qué frutos de la justificación se mencionan en Rom.5:1-5?
2. ¿Enseña Santiago que el hombre es justificado por las obras? Santg 21:25.
3. ¿A qué objeciones contra la doctrina de la justificación responde Pablo en Rom. 3:5-28?
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Qué es la justificación?
2. ¿En qué se diferencia de la santificación?
3. ¿Qué elementos comprende?
4. ¿Hasta dónde son perdonados los pecados en la justificación?
5. ¿Por qué deben los creyentes continuar orando por perdón?
6. ¿Qué incluye la adopción de hijos?
7. ¿Podemos hablar de justificación desde la eternidad y por la resurrección de Cristo?
8. ¿Cómo se relaciona la fe con la justificación? ¿Cuál es el punto de vista Arminiano?
9. ¿Cuáles son las objeciones que suelen oponerse a esta doctrina? ¿Cómo puede usted responderlas?

LECCIÓN: 22

SANTIFICACIÓN Y PERSEVERANCIA

La doctrina de la justificación conduce naturalmente a la de la santificación. El estado justificado reclama una vida de santificación, consagrada al servicio de Dios.

NATURALEZA Y CARACTERÍSTICAS DE LA SANTIFICACIÓN.

La santificación puede ser definida como la operación del Espíritu Santo, que mediante la divina gracia purifica al pecador, renueva toda su naturaleza a la imagen de Dios y le capacita para realizar buenas obras. Difiere de la justificación en que tiene lugar en la vida interior del hombre, y no es un acto legal, sino una nueva creación.
Generalmente es un proceso largo, y nunca produce la completa perfección en esta vida. Aunque es decididamente una obra sobrenatural de Dios, el creyente puede y debe cooperar en ella por un uso diligente de los medios que Dios ha puesto a su disposición, 2.a Cor. 7: 1; Col. 3 6-14; 1.a Pedro 1:22.
La santificación no consiste en una simple supresión de lo que ya fue abandonado en la regeneración, sino que implica fortificar, acrecentar e intensificar la nueva vida.
Consta de dos partes: la supresión de las contaminaciones y corrupción de la naturaleza humana, Rom. 6:6; Gal. 5:24, y el desarrollo gradual de la nueva vida de consagración a Dios, Rom. 6:4-5; Col. 2:12; 3:1, 2; Gal. 2:19. Puesto que tiene lugar en el corazón del hombre, afecta naturalmente a toda su vida, Rom. 6:12; 1.a Cor... 6:15, 20; 1.a Tes. 5:23.
El cambio en el hombre interior ha de producir obligatoriamente un cambio en su vida exterior. Que el hombre tiene que cooperar en la obra de santificación se desprende de las repetidas advertencias contra el mal y las tentaciones, Rom. 12:9, 16 y 17; 1.a Cor... 6:9, 10; Gal. 5:16-23 y de las constantes exhortaciones a una vida santa, Miq. 6:8; Juan 15:4-7; Rom. 8:12, 13; 12:1 y Gal. 6:7, 8, 15.

EL CARÁCTER IMPERFECTO DE LA SANTIFICACIÓN EN ESTA VIDA

Aun cuando la santificación afecta a todas las partes del hombre, sin embargo, el desarrollo espiritual de los creyentes permanece imperfecto durante toda su vida.
Tenemos que luchar contra el pecado mientras vivimos, 1ª Reyes 8:46; Prov. 20:9; Santo 3:2 y 1ª Juan 1:8. La vida del creyente se caracteriza por una lucha constante entre la carne y el espíritu. Aun los mejores creyentes tienen que confesar sus pecados, Job. 9; 3:20; Salmo 32:5; 130:3; Proverbios 20:9; Isaías 64:6; Daniel 9:7; Romanos 7:14 y 1.a Juan 1:9. En todas estas citas hallamos a los creyentes orando por el perdón, Salmo 51:1-2; Daniel 9:16, o exhortados a ello, Mateo 6: 12-13; Santiago 5:15, y luchando para alcanzar una mayor perfección, Romanos 7:7, 26; Gálatas 5:17; Filipenses 3:12 y 14.
Esta verdad es negada por los llamados perfeccionistas, que sostienen que el hombre puede alcanzar la santidad en esta misma vida. Se fijan en el hecho de que la Biblia manda a los creyentes ser perfectos, Mateo 5:48; 1. Pedro 1:16; Santiago 1:4 y habla de algunos como perfectos, Génesis 6:9; Job 1:8; 1.a Reyes 15:14; Filipenses 3:15 y también en la declaración de que aquel que es nacido de Dios no peca, 1.a Juan 3:6, 8, 9, 15 y 18. Pero el hecho de que tenemos que esforzamos para alcanzar la perfección no prueba que algunos sean ya perfectos.
Además la palabra «perfecto» no significa siempre una persona completamente libre de pecado, Noé, Job, Asa fueron llamados perfectos, pero su historia demuestra claramente que no eran absolutamente sin pecado. Y el apóstol Juan quiere significar o bien que el nuevo hombre no peca, o que los creyentes no viven en el pecado. Notemos que el mismo declara: «Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y no hay verdad en nosotros, 1 Juan 1:8.

SANTIFICACIÓN Y BUENAS OBRAS

La santificación conduce naturalmente a una vida de buenas obras. Estas pueden ser llamadas los frutos de la santificación. Las tales obras no son perfectas en sí mismas ni proceden de una perfecta santificación, sino que brotan del principio de amor y fe en Dios que existe en el alma, de acuerdo con una consciente conformidad con la voluntad de Dios según nos ha sido revelada, Deut. 6:2; Mateo 7: 17 y 18; 12:33, 35 y Heb. 11:6, y son hechas 1.a Sam. 15 :22; Santo 2 :8, teniendo como objetivo final la gloria de Dios, 1ª Cor... 10:31; Col. 3:17, 23. Solamente los que son regenerados por el Espíritu de Dios pueden realizar tales buenas obras. Esto no significa, sin embargo, que los no regenerados no pueda hacer el bien en ningún sentido de la palabra.
Véase 2ª Reyes 10:29, 30; 12:2; 14:3; Lucas 6:33 y Rom. 2:14. En virtud de la gracia común de Dios los no regenerados pueden realizar obras que están de acuerdo externamente con la Ley y sirven a sus propósitos loables; pero estas obras son siempre radicalmente defectuosas porque están separadas de la raíz espiritual del amor a Dios y no significan una obediencia interior efectiva a la Ley divina ni tienen como principal propósito la gloria de Dios. En oposición con los Católico-Romanos debemos sostener que las buenas obras del creyente no son meritorias, Lucas 17:9-10; Efesios 2:8-10 y Tito 3:5; aun cuando Dios promete recompensarlas con recompensas abundantes y generosas, 1.a Corintios 3:14; Hebreos 11:26.
En oposición a los antinominianos, debemos hacer hincapié en la necesidad de las buenas obras, Colosenses 1:10; 2. Timoteo 2:21; Tito 2:14 y Hebreos 10:24.

LA PERSEVERANCIA DE LOS SANTOS

La expresión «perseverancia de los santos» sugiere naturalmente una actividad continua de los creyentes por la cual ellos perseveran en el camino de salvación. Con toda evidencia, sin embargo, la perseverancia a que se refiere es menos una actividad de los creyentes que una obra de Dios en la cual los creyentes deben participar.
Estrictamente hablando, la seguridad de la salvación del hombre consiste, o se apoya en el hecho de que Dios persevera. La perseverancia puede ser definida como la operación continua del Espíritu Santo en el creyente por medio de la cual la obra de la gracia divina una vez empezada en el corazón es continuada y hecha completa.
Esta doctrina está claramente enseñada en las Escrituras, Juan 12:28, 29; Romanos 11:29; Filipenses 1: 6; 2.a Tesalonicenses 3:3; 2.a Timoteo 1:12; 4:18, y es solamente cuando nosotros creemos en esta perseverancia de, Dios que nuestra vida puede alcanzar la seguridad de la salvación, Hebreos 3:14; 6:10 y 2.a Pedro 1:10.
Fuera de los círculos reformados esta doctrina no encuentra aceptación. Dícese que es contraria a las Escrituras las cuales nos advierten en cuanto a la apostasía. Heb. 2: 1; 10:26 y exhorta a los creyentes a continuar en el camino de la salvación. Mat. 24:13; Heb. 3:14, y aun nos presenta casos de apostasía: 1.a Tim. 1:19-20; 2.a Tim. 2:17, 18 y 4:10. Tales exhortaciones y advertencias parecen asumir la posibilidad de una caída, y en algunos casos parecen probarlo completamente. Pero estas advertencias prueban solamente que Dios obra usando medios y quiere que el hombre coopere en la obra de la perseverancia. No hay prueba de que los apostatas que se mencionan en la Escritura fuesen realmente creyentes. Rom. 9:6; 1.a Juan 2:19; Apoc.3:1.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

LA SANTIFICACIÓN COMO OBRA DE DIOS.
1. 1ª Tes. 5:23. «El Dios de paz os santifique en todo para que vuestro espíritu alma y cuerpo sea guardado entero y sin reprensión para la Venida de Nuestro Señor Jesucristo.
2. Hebreos 2:11. «Porque el que santifica Y los que son santificados de uno son todos: por lo cual no se avergüenza de llamarlos hermanos».
LA COOPERACIÓN DEL HOMBRE EN LA SANTIFICACIÓN
1. 2ª Cor. 7:1. «Así que amados, pues tenemos tales promesas, limpiémonos de toda inmundicia de carne y de espíritu, perfeccionando la santificación en el temor de Dios».
2. Heb. 14:14. «Seguid la paz con todos y la santidad, sin la cual ninguno verá al Señor».
LA MORTIFICACIÓN DEL VIEJO HOMBRE
1. Rom. 6:6. «Sabiendo esto, que nuestro viejo hombre, juntamente fue crucificado con El, para que el cuerpo del pecado sea desecho a fin de que no sirvamos más al pecado».
2. Gal. 5:24. «Así que los que son de Cristo: han crucificado la carne con sus afectos y concupiscencias.
LA VIVIFICACIÓN DEL NUEVO HOMBRE
1. Ef. 4:24. «Y vestir el nuevo hombre que es creado según Dios en justicia y santidad de verdad».
2. Col. 3:10. «Y revestidos del nuevo, el cual por el conocimiento es renovado conforme a la imagen del que lo crió».
SANTIFICACIÓN INCOMPLETA EN ESTA VIDA.
1. Rom. 7: 18. «Y yo sé que en mí (es a saber en mi carne), no mora el bien: porque tengo el querer, mas efectuar el bien no lo alcanzo».
2. Fil. 3:12. «No que ya lo haya alcanzado, ni que ya sea perfecto; mas prosigo al blanco para ver si alcanzo aquello para lo cual fui también alcanzado de Cristo Jesús».
LA NATURALEZA DE LAS BUENAS OBRAS
1. 1a Sam. 15:22. «Y Samuel dijo: ¿Tiene Jehová tanto contentamiento con los holocaustos y víctimas, como en obedecer a las palabras de Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios; y el prestar atención que el sebo de los carneros».
2. 1 Cor... 10:31. «Así que comáis o bebáis o hagáis otra cosa, hacedlo todo a gloria de Dios».
3. Heb. 11:6. «Sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que a El se allega, crea que lo hay y que es galardonador de los que le buscan».
LA PERSEVERANCIA DE LOS SANTOS
1. Juan 10:28-29. «Y yo les doy vida eterna: y no perecerán para siempre, ni nadie las arrebatará de mi mano; mi Padre que me las dio mayor que todos es, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre».
2. 2ª Tim. 1:12. «Por 10 cual asimismo padezco esto: mas no me avergüenzo porque yo sé a quién he creído, y estoy cierto que es poderoso para guardar mi depósito para aquel día».
3. 2ª Tim. 4:18. «Y el Señor me librará de toda obra mala y me preservará para su Reino Celestial. Al cual sea gloria por los siglos de los siglos. Amén».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Puede usted sacar alguna conclusión de los siguientes pasajes acerca del tiempo en que obtendremos la santificación completa? Fil. 3:21; Heb. 12:23; Apoc. 4:5; 21-27.
2. ¿A qué partes del hombre afecta la santificación según Jer. 31:34; Fil. 2:13: Gal. 5:24; Heb. 9:14?
3. ¿Qué significa la palabra perfecto en los siguientes pasajes? 1 Cor... 2:6; 3:1, 2; Heb. 5:14; 2.a Tim. 3:16?
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Qué es la santificación y en qué difiere de la justificación?
2. ¿Es obra de Dios o del hombre?
3. ¿Cuáles son las dos partes que constituyen la santificación?
4. ¿Qué prueba hay de que es incompleta en esta vida?
5. ¿Quiénes niegan esto y sobre qué base? ¿Cómo puede usted responderles?
6. ¿Qué son las buenas obras en el sentido estricto de la palabra?
7. ¿Hasta dónde puede realizar buenas obras una persona no regenerada?
8. ¿Son meritorias o no las buenas obras?
9. ¿No se nos dice que serán recompensadas?
      10. ¿En qué sentido son necesarias las buenas obras?
      11. ¿Qué significa la perseverancia de los santos?
      12. ¿Cómo puede probarse esta doctrina?

LECCIÓN: 23

NATURALEZA DE LA IGLESIA

DESCRIPCIÓN GENERAL DE LA IGLESIA

La principal palabra que se usa en el Antiguo Testamento para designar al pueblo de Dios, se deriva del verbo «llaman, y en el Nuevo Testamento la palabra empleada para referirse a la Iglesia, significa «llamar fuera». Ambas se refieren a una asamblea de personas llamadas por Dios.

DIFERENTES SIGNIFICADOS DE ESTA PALABRA EN EL NUEVO TESTAMENTO

Generalmente indica una iglesia local, ya sea reunida para culto o no. Hech. 5: 11; 11:26; Rom. 16:4; 1.a Cor... 11:18; 16:1. Algunas veces la expresión «La iglesia que está en su casa», se refiere a alguna iglesia doméstica o al grupo de creyentes que se reunían en un hogar privado. Romanos 16:5, 23; 1.a Cor. 16:19; Col. 4:15, pero en el sentido más general indica a todo el cuerpo de creyentes, en el cielo o en la tierra, Efesios 1:22; 3; 10, 21; 5:23 y Colosenses 1:18-24.

EL SENTIDO DE LA PALABRA IGLESIA

Los católicos romanos difieren de los protestantes con respecto a la naturaleza esencial de la Iglesia. Los primeros creen que indica una organización externa y visible que consiste de los sacerdotes, juntamente con los obispos, arzobispos, cardenales y el Papa; los protestantes rompieron con este concepto externo y buscaron el sentido de Iglesia, en una comunión invisible y espiritual de los santos.
La Iglesia, en su naturaleza esencial, incluye a los creyentes de todas las edades y a nadie más. Es el cuerpo espiritual de Jesucristo, en el que no hay lugar para los no creyentes.

DISTINCIONES QUE SE APLICAN A LA IGLESIA

Al hablar de la Iglesia en términos generales es necesario considerar algunas distinciones.
LA IGLESIA MILITANTE Y LA TRIUNFANTE
La Iglesia que existe actualmente en la tierra es la Militante, porque está llamada, y se halla actualmente empeñada en una guerra santa. La que está en el Cielo es la Triunfante, ya que ha cambiado la espada por la palma de victoria.
LA IGLESIA INVISIBLE Y LA VISIBLE
Esta distinción se aplica a la misma iglesia que se halla sobre la tierra, la cual es invisible en lo que se refiere a su naturaleza espiritual, de modo que es imposible determinar con exactitud quiénes pertenecen o no a ella; sin embargo, se hace visible en la profesión y conducta de sus miembros; por el ministerio de la Palabra, los sacramentos y en su organización y gobierno externo.
LA IGLESIA COMO ORGANISMO Y COMO INSTITUCIÓN
Esta distinción se aplica sólo a la Iglesia Visible. Se caracteriza, como organismo, por la vida de comunión de los creyentes, y por su oposición al mundo; y como organización por sus oficios, administración de la Palabra y de los sacramentos y por ciertas formas de gobierno eclesiástico.

DEFINICIONES DE LA IGLESIA

La Iglesia Invisible puede ser definida como la compañía de los elegidos, llamados por el Espíritu de Dios, o simplemente, como la comunión espiritual de los creyentes; y la Visible puede definirse como la comunidad o conjunto de aquellos que profesan la fe verdadera, juntamente con sus hijos. Debe tenerse en cuenta que la membresía de unos y otros no es exactamente igual
LOS ATRIBUTOS Y MARCAS DE LA IGLESIA
Hay tres atributos especiales de la Iglesia y asimismo tres marcas o características externas.
SUS ATRIBUTOS. SON LOS TRES SIGUIENTES
1. Su unidad. Según el católico-romano esta unidad consiste en una imponente organización mundial, mas para los protestantes es la unidad espiritual del cuerpo de Jesucristo.
2. Su santidad. Los católico-romano hacen consistir la santidad de la Iglesia en sus santos dogmas, sus preceptos morales, su culto y su disciplina; pero los Protestantes hacen radicar la santidad en los propios miembros de la Iglesia como santos en Cristo, es decir, santos en principio, al ser poseedores de la nueva vida que está destinada a ser perfectamente santa.
3. Su universalidad. Roma hace de este punto una pretensión especial, porque su Iglesia está esparcida por toda la tierra, y tiene mayor número de miembros que todas las denominaciones evangélicas juntas. Los Protestantes declaran empero que únicamente la Iglesia Invisible de Cristo es realmente la Iglesia Católica, porque incluye a todos los creyentes de todas las edades y de todos los países.

SUS MARCAS O CARACTERÍSTICAS EXTERNAS

Mientras que los atributos pertenecen principalmente a la iglesia invisible, las marcas o señales pertenecen a la iglesia visible y sirven para distinguir la verdadera iglesia de la falsa. También son tres.
1. La verdadera predicación de la palabra de Dios. Esta es la señal más importante de la Iglesia. La Juan 4; 1-3; 2: Juan 9. No significa que la predicación tiene que ser perfecta y absolutamente pura sino que debe ser verdadera en cuanto a los fundamentos de la religión cristiana, y que ha de ejercer una influencia controladora en cuanto a fe y práctica.
2. La Recta administración de los sacramentos. Los sacramentos no pueden ser separados de la Palabra, como hacen los católicos. Deben ser administrados por ministros legales, según la institución divina; sólo pueden ser administrados a los creyentes y a sus descendientes, Mateo 18:19; Marcos 16:16; Hechos 2:42; 1 Corintios 11:23, 30.
3. El fiel ejercicio de la disciplina. La disciplina es necesaria para mantener la pureza de la doctrina y salvaguardar la santidad de los sacramentos. La palabra de Dios insiste en esto, Mateo 18:18; 1.a Corintios 5: 1-13; 14:33, 40; Apoc. 2:14, 15, 20.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA PASAJES QUE TESTIFICAN SOBRE:

LA UNIDAD DE LA IGLESIA
1. Juan 10:16. «Otras ovejas tengo que no son de este redil las cuales también me conviene traer, y ellas oirán mi voz, y habrá un rebaño y un pastor».
2. Juan 17:20. «N o ruego solamente por estos, sino por los que han de creer en Mí por ola Palabra de ellos, para que sean todos una cosa».
3. Efesios 4:4-6. «Un cuerpo y un Espíritu, así como sois llamados a una misma esperanza de vuestra vocación. Un Señor, una fe, un bautismo; un Dios y Padre de todos, el cuales sobre todas las cosas y por todas las cosas, y en todos vosotros».
LA SANTIDAD DE LA IGLESIA
1. Éxodo 19:6. «Y seréis para mí un reino de sacerdotes y una nación santa».
2. 1ª Pedro 2:9. «Pero vosotros sois una raza escogida, real sacerdocio, gente santa, pueblo adquirido, para que anunciéis las virtudes de Aquel que os ha llamado de las tinieblas a su luz admirable».
LA CATOLICIDAD DE LA IGLESIA
1. Salmo 2:8. «Pídeme y te daré por heredad las gentes y por posesión tuya los reinos de la tierra».
2. Apoc. 9:7. «Después de estas cosas miré y he aquí una gran compañía 'la cual ninguno podía contar, de todas las gentes, linajes, pueblos y lenguas, que estaban delante del trono y del Cordero, vestidos de ropas blancas y palmas en sus manos».
LA NECESIDAD DE ADHERIRSE A LA VERDAD
1. 2ª Tim. 1:13. «Retén la forma de las sanas palabras que has oído de mí, en la fe y amor que es en Cristo Jesús».
2. 2ª Timoteo 2:15. «Procura diligentemente presentarte a ti mismo como obrero aprobado, que no tiene de qué avergonzarse, que traza bien la palabra de verdad».
3. 1ª Timoteo 2:1. «Habla tú las cosas que pertenecen a la sana doctrina».
LA NECESIDAD DE LA RECTA ADMINISTRACIÓN DE LOS SACRAMENTOS.
1. Hechos 19:4 y 5. «Pablo dijo: Juan bautizó con el bautismo de arrepentimiento diciendo al pueblo que creyesen en aquel que había de venir después de él, es a saber en Jesús el Cristo. Y cuando oyeron esto fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús». 1ª Corintios 11:28-30. «Cada uno examínese a sí mismo y coma de aquel pan y beba de aquella copa, porque el que come y bebe indignamente juicio come y bebe para sí, no discerniendo el cuerpo del Señor. Por esto hay entre vosotros muchos debilitados y enfermos y muchos duermen».
LA NECESIDAD DE LA DISCIPLINA
1. Mateo 16:19. «Ya ti daré las llaves del Reino de los Cielos, y todo lo que ligares en la tierra será ligado en el Cielo, y todo lo que desatares en la tierra será desatado en el Cielo».
2. 1ª Timoteo 3:10-11. «Rehúsa hombre hereje después de una o dos amonestaciones, sabiendo que el tal es trastornado y peca».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Existió la Iglesia antes de Pentecostés? Véase Mateo 18:17; Hechos 7:38.
2. ¿Se usa la palabra iglesia en singular en él Nuevo Testamento para significar un grupo de iglesias 1 Véase Hechos 9:31?
3. ¿Qué motivos para disciplina había en la iglesia de Corinto? 1a Corintos 5:1- 5,13; 17:34; 2.a Corintios 2:5-11.
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Qué significa la palabra iglesia en la Escritura según su etimología?
2. ¿Qué diferentes significados tiene esta palabra en el Nuevo Testamento?
3. ¿En qué difieren los católicos de los protestantes en el concepto de iglesia?
4. ¿Cuál es la diferencia entre la Iglesia Militante y la Triunfante?
5. ¿A qué iglesia se aplica la distinción de visible e invisible?
6. ¿En qué sentido se llama a la Iglesia invisible?
7. ¿En qué se diferencia la iglesia como organismo y como institución?
8. ¿Cómo podemos definir la Iglesia Invisible y la Visible?
9. ¿Cuáles son los atributos de la iglesia?
      10. ¿En qué se diferencia nuestro concepto de los católicos?
      11. ¿Cuáles son las marcas de la iglesia y para qué sirven?
      12. ¿Se refieren estas marcas a la Iglesia Invisible o a la Visible?
      13. ¿Cómo debemos concebir la verdadera predicación de la Palabra?
      14. ¿Qué significa la recta administración de los sacramentos?
      15. ¿Por qué es necesaria la disciplina?

LECCIÓN: 24

GOBIERNO Y AUTORIDAD DE LA IGLESIA

Cristo es la cabeza de la Iglesia, Y la razón de toda su autoridad. Mat. 23:10; Juan 13:13; 1.a Cor... 12:5; Efe. 1:20-23; 4:11, 12; 5:23, 24. El gobierna la Iglesia, no por la fuerza, sino por Su Palabra y por el Espíritu. Todos los oficiales de la Iglesia, se hallan revestidos con la autoridad de Cristo, y deben someterse ellos mismos al control de Su Palabra.

LOS OFICIALES DE LA IGLESIA

Los oficiales de la Iglesia mencionados en el Nuevo Testamento, son de dos clases:

OFICIALES EXTRAORDINARIOS

De éstos los más importantes fueron los apóstoles. En el sentido más estricto, este título se aplica sólo a los doce escogidos por Jesús, ya Pablo; pero también es dado a algunos otros hombres del período apostólico. Hechos 14:4, 14; 1a Cor. 9:5, 6; 1ª Cor... 8:23; Gál. 1:19. Los apóstoles tenían ciertas cualidades especiales: Habían sido llamados directamente por Cristo, Gál. 1:1; vieron a Cristo después de su resurrección; 1 Cor. 9:1; tenían conciencia de ser inspirados, 1ª Cor. 2:13; realizaban milagros, 2ª Cor. 12:12; y eran ricamente bendecidos en sus labores, 1.a Cor. 9:1. El Nuevo Testamento habla también de profetas que 'eran hombres especialmente dotados para hablar Y edificar la Iglesia, y ocasionalmente predecían sucesos futuros, Hechos 11:28; 13, 1,2; 15:32; Ef. 4:11. Y finalmente se mencionan los evangelistas, que auxiliaban a los apóstoles en su trabajo, Hech. 21:8; Efe. 4: 11; 2ª Tim. 4:5.

OFICIALES ORDINARIOS

Se hace frecuente mención de los ancianos, especialmente en los Hechos de los Apóstoles, Hechos 11 :30; 14 :23; 15:2; 6 :22; 16:4; 20: 17; 21: 18; con ellos se mencionan los obispos, nombre que se emplea para designar a la misma clase de oficiales, Hechos 20:17, 28; 1.a Tim. 3:1; 5:17, 19; Tito 1 :5, 7; 1:' Pedro 5 :1-2.
Aunque ambos nombres se aplicaban al mismo cargo, la palabra anciano parece hacer énfasis acerca de su edad, y el nombre de obispo a su obra como sobreveedores.
Los ancianos, no eran todos maestros, pero la función de enseñar, entraba gradualmente en su oficio. Efesios 4:11; 1.' Tim. 5:17; 2.a Tim. 2:2. Según 1.a Tim. 5:7, parece que algunos ancianos simplemente gobernaban, mientras que otros enseñaban. En adición a éstos, el Nuevo Testamento habla también de diáconos, Fil. 1:1; 1.a Tim. 3:8, 10, 12. Prevalece la opinión de que esta institución procede de Hechos 6:1, 6.

LAS ASAMBLEAS ECLESIÁSTICAS

Las Iglesias reformadas tienen varios cuerpos gobernantes, de relación gradual entre sí. Son conocidos como Consistorio, Clase y Sínodo. El Consistorio lo constituyen el ministro y los ancianos de la Iglesia local; el «Clasis» lo forman un ministro y un anciano de cada Iglesia, dentro de un distrito determinado. El Sínodo está constituido por un ministro y un anciano de cada una de los Clasis.

EL GOBIERNO DE LA IGLESIA LOCAL

Es de carácter representativo. El ministro y los ancianos, elegidos por el pueblo, forman un Concilio o Consistorio para el gobierno de la Iglesia. Hechos 14:23; 20:17 y Tito 1:5. Aun cuando los ancianos son elegidos por el pueblo, no reciben su autoridad de sus electores, sino de Jesucristo, el Señor de la Iglesia. Cada Iglesia local, es una Iglesia completa, plenamente equipada para gobernarse a sí misma, pero al afiliarse con otras Iglesias, para formular acuerdos comunes, dejan de ser enteramente independientes. El orden eclesiástico, sirve para preservar los derechos e intereses de la Iglesia local, así como los derechos e intereses colectivos de las Iglesias afiliadas.

LAS ASAMBLEAS MAYORES

Al asociarse las Iglesias locales para dar mayor expresión a la unidad de la Iglesia, se hacen necesarias asambleas mayores, como las de los C1asis y Sínodos. El Concilio de Jerusalén, descrito en Hechos 15, tiene el carácter de una asamblea mayor. Los representantes inmediatos de los fieles, que forman los consistorios, son representados por un número limitado en los Clasis, y éstas a su vez, lo son en los Sínodos.
Las asambleas eclesiásticas, naturalmente tienen que tratar solamente de asuntos de doctrina y moral, del gobierno de la Iglesia y de la disciplina, sin embargo, las asambleas mayores deben ocuparse a veces de asuntos que por su naturaleza pertenecen a asambleas provinciales o menores, pero que por alguna razón no han podido ser solucionados en aquéllas, así como de asuntos que por su naturaleza pertenecen a las asambleas mayores de las provincias, por referirse a las Iglesias en general. Las decisiones de las asambleas mayores, no son simplemente amonestativas, sino autoritarias, a menos que explícitamente se declare que tienen solamente carácter de advertencia.

LA AUTORIDAD DE LA IGLESIA

La autoridad de la Iglesia es espiritual, porque es dada por el Espíritu Santo, Hechos 20:28. Es una manifestación de la autoridad del Espíritu, Juan 20:22, 23. Corresponde exclusivamente a los creyentes, 1a Cor... 5:12, 13, y solamente puede ser ejercitada por medios espirituales, 2.a Corintios 10:4. Hay también una autoridad ministerial, que nombre por los ministros de la Palabra. La Autoridad de la Iglesia es triple:

AUTORIDAD DOGMÁTICA O DE ENSEÑANZA

La Iglesia está encargada de mantener la verdad y de transmitirla fielmente de una generación a otra, y defenderla contra los esfuerzos de la incredulidad, 1." Timoteo 1:3, 4; 2.a Tim. 1:13; Tít. 3:9-11. Debe predicar la Palabra incesantemente entre todas las naciones del mundo, Isa. 3:10, 11; 2.a Cor... 5:20; 1.' Tim. 4:13; 2.' Tim. 2:15; 4:2; Tít. 2:1-10. Debe formular los credos y confesiones de fe y procurar la educación de sus futuros ministros, 2.a Tim. 2:2.

AUTORIDAD DE GOBIERNO

Dios es un Dios de orden, y desea que todas las cosas en la Iglesia sean hechas decentemente y Con orden, 1.a Cor... 14:33, 40. Por esta razón ha provisto reglas acerca de los asuntos de la Iglesia y ha dado autoridad a la Iglesia para hacer efectivas las leyes de Cristo, Juan 1:15-17. Hech. 20: 28; 1a Ped. 5:2. Esto incluye autoridad para ejercer la disciplina, Mat. 16:19; 18:18; Juan 20:23; 1a Cor... 5:2, 7 ,13; 2.a Tes. 3:14, 15; La Tim. 1:20, Tít. 3:10.
El propósito de la disciplina en la Iglesia es doble. En primer lugar cumplir la ley de Cristo respecto a la admisión y exclusión de miembros, y promover la edificación espiritual de los propios miembros, asegurando su obediencia a las leyes de Cristo. Si hay miembros enfermos espiritualmente, la iglesia debe buscar su curación, pero si fracasa en este empeño tiene que cortar los miembros contagiados. Debe sancionar los pecados públicos aun cuando no haya acusación formal; en el caso de pecados privados debe insistir en la aplicación de la regla dada en Mateo 18:15-18.

AUTORIDAD PARA EL MINISTERIO DE LA MISERICORDIA.

Cristo envió a sus discípulos no sólo a predicar sino también a curar toda clase de enfermedades. Mateo 10: 1, 8; Lucas 9:1, 2; 10:9, 17. Entre los primitivos cristianos había quienes tenían el don de sanidades, 1.a Cor... 12:9, 10, 28, 30, Este don especial terminó con la época apostólica. Desde entonces el ministerio de la misericordia quedó más bien limitado al cuidado de la Iglesia para los pobres. El Señor exhortó a esta tarea en Mateo 26:11; Marcos 14, 7. La iglesia Primitiva practicó una clase de comunidad de bienes de modo que nadie tuviera falta en cuanto a las necesidades de la vida, Hechos 4:34.
Más tarde se nombraron siete varones «para servir a las mesas», esto es, para proveer a una distribución más equitativa de lo que era traído para los pobres, Hechos 6:1-6. Después de esto los diáconos son mencionados repetidamente en Rom. 16:1, Fil. 1:1; 1.a Tim. 3: 12. Se hace gran énfasis en dar o recoger colectas para los pobres, Hechos 29:20, 35; 1.a Cor. 16:1, 2; 2.a Cor... 8:13-15; 9:1, 6,7; Gál. 2:10; 6:10; Ef. 4:28; 1 Tim. 5:10,16; Santo 1:27; 2:15,16; 1 Juan 3:17.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

QUE CRISTO ES LA CABEZA DE LA IGLESIA
1. Ef. 1:22, 23. «Y El diólo por cabeza sobre todas las cosas a la Iglesia la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquel que hinche todas las cosas en todo».
2. Colasen se s 1:18. «Y El es la cabeza del cuerpo que es la Iglesia. El que es el principio, el primogénito de los muertos para que en todo tengan el primado».
LAS SEÑALES ESPECIALES DEL APOSTOLADO
1. 1. a Cor... 9:1, 2. « ¿No soy apóstol? ¿No soy libre? ¿No he visto a Jesús el Señor, nuestro? ¿No sois vosotros mi obra en el Señor? Si a los otros no soy apóstol a vosotros ciertamente lo soy, porque el sello de mi apostolado sois vosotros en el Señor».
2. 2ª Cor. 12:12. «Con todo esto las señales del apóstol han sido hechas entre vosotros con toda paciencia, en señales y en prodigios y en maravillas».
EL OFICIO DE ANCIANO U OBISPO
1. Hechos 14:23. «Y habiéndoles constituido ancianos en cada una de las iglesias, y habiendo orado con algunos les encomendaron al Señor a quien habían creído».
2. 1a Timoteo 3:1. «Palabra fiel, si alguno apetece obispado buena obra desea».
3. Tito 1:5. «Por esta causa te dejé en Creta, para que corrigieses lo que falta y pusieses ancianos por las villas, así como yo te mandé».
LA FUNCIÓN DOCENTE DE ALGUNOS ANCIANOS
1. 1a Tim. 5:17. «Los ancianos que gobiernan bien, sean tenidos por dignos de doblada honra, mayormente los que trabajan en predicar y enseñar».
2. 2ª Tim. 2:2. «Y lo que has oído de mí entre muchos testigos, esto encarga a los hombres fieles, que serán idóneos para enseñar también a otros».
EL OFICIO DE DIÁCONO / EL CARÁCTER ESPIRITUAL DE LA OBRA DE LOS ANCIANOS
1. 1a Tim. 3:10. «Y estos también sean antes probados; y así ministren si fueren sin crimen».
2. Hechos 20:28. «Por tanto mirad por vosotros y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la Iglesia del Señor la cual ganó por su sangre».
3. 1a Pedro 5:2, 3. «Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros teniendo cuidado de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta sino de un ánimo pronto; y no teniendo señorío sobre las heredades del Señor, sino siendo dechados de la grey».
AUTORIDAD PARA EJERCER LA DISCIPLINA
1. Mateo 18:18. «De cierto os digo que todo lo que ligareis en la tierra será ligado en el Cielo; y todo lo que desatareis en la tierra, será desatado en el Cielo».
2. Juan 20:23. «A quienes remitiereis los pecados, les son remitidos; a quienes los retuviereis, serán retenidos».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Qué hombres, además de los doce y Pablo son llamados apóstoles? Hechos 14:4, 14; 1a Cor... 9:5, 6; 2. Col. 28:23; Gál. 1:19.
2. ¿A quiénes se llama evangelistas en la Biblia? Hechos 2: 18; 2. a Tim. 4:5.
3. ¿Qué curso de disciplina es indicado con respecto a pecados privados en Mateo 18: 15, 17?
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Quién es la cabeza de la Iglesia y sobre qué norma la gobierna?
2. ¿Qué oficiales extraordinarios había en la Iglesia Apostólica?
3. ¿Cuáles eran las características de los apóstoles?
4. ¿Qué hacían los profetas y los evangelistas?
5. ¿Cuáles eran los oficiales ordinarios?
6. ¿Qué otro nombre Se aplicaba al cargo de anciano? ¿Predicaban todos?
7. ¿Cuándo fue instituido el oficio de diácono?
8. ¿Cuántas clases de asambleas eclesiásticas hay?
9. ¿Hasta dónde es independiente cada iglesia local?
  10. ¿Hay ejemplo en las Escrituras de otras asambleas mayores? ¿Dónde?
  11. ¿Cómo están constituidas y qué asuntos les corresponde tratar?
  12. ¿Son sus decisiones meramente de consejo o amonestativas?
  13. ¿Qué diferentes clases de autoridad tiene la Iglesia? ¿En qué consiste cada una de ellas? 
  14. ¿Cuál es el propósito de la disciplina de la Iglesia? ¿Qué entendemos por ministerio de Misericordia en la Iglesia?

LECCIÓN: 25

LA PALABRA DE DIOS Y LOS SACRAMENTOS EN GENERAL

La Palabra de Dios es el más importante medio de gracia, aun cuando los católicos atribuyen este honor a los sacramentos.

LA PALABRA DE DIOS Y EL ESPÍRITU SANTO

Si bien la expresión «medios de Gracia» tiene un significado más amplio, se usa aquí para designar los medios que emplea la Iglesia de un modo directo. Cuando nos referimos aquí a la Palabra de Dios no nos referimos a la Segunda Persona de la Trinidad, o sea Cristo, quien es llamado el Verbo en Juan 1:1; ni a la palabra creadora que se menciona en el Salmo 33 :6, sino a la Palabra de Dios contenida en la Sagrada Escritura Y predicada por la Iglesia. 1.' Pedro 1:25. Es llamada la Palabra de Gracia, y por tanto es el más importante de los medios de Gracia. Aunque su énfasis principal es en la predicación también puede ser traída a los hombres por otros medios. En el hogar, en la escuela, por medio de conversación y literatura religiosa.
La Palabra De Dios se hace efectiva como medio de Gracia tan sólo por la operación del Espíritu Santo. La Palabra por sí sola no es suficiente para obrar la fe y la conversión, pero es el instrumento necesario. Aun cuando el Espíritu Santo puede hacerlo, generalmente no obra aparte de la Palabra de Dios. Y la predicación de la Palabra fructifica por la operación del Santo Espíritu.

LAS DOS PARTES DE LA PALABRA, COMO MEDIO DE GRACIA

Son la Ley y el Evangelio. La Ley, como medio de Gracia, sirve al propósito de traer los hombres a la convicción de pecado, Rom. 3:20, haciéndoles conscientes de su incapacidad para responder a las demandas de la Ley. De este modo es su tutor para llevarle a Cristo, Gálatas 3:24. En segundo lugar constituye también regla de fe para los creyentes, recordándoles sus deberes y guiándoles por el camino de vida y salvación.
El Evangelio es la clara presentación del camino de salvación revelado en Jesucristo. Exhorta al pecador a venir a Cristo con fe y arrepentimiento, y promete a todos aquellos que verdaderamente se arrepienten y creen todas las bendiciones de la salvación, para el presente y el futuro. Es el poder de Dios para salvación a toda aquel que cree. Rom. 1:16; 1.a Cor... 1:18.

LOS SACRAMENTOS EN GENERAL

La Palabra de Dios es completa como medio de gracia; pero los sacramentos no lo son sin la Palabra. Esto tiene que ser mantenido en oposición a los católicos romanos quienes enseñan que los sacramentos son medios esenciales de salvación. La Palabra y los Sacramentos difieren en los siguientes detalles:
1. La Palabra de Dios es absolutamente necesaria, mientras que los sacramentos no lo son.
2. La Palabra sirve para engendrar y fortificar la fe, mientras que los sacramentos sólo pueden fortificarla, no engendrarla.
3. La Palabra es para todo el mundo, mientras que los sacramentos son sólo para los creyentes y su descendencia.

MERECEN ATENCIÓN LOS SIGUIENTES PUNTOS

LAS DIVERSAS PARTES DE LOS SACRAMENTOS
Se distinguen tres cosas en los sacramentos, que son:
1: La señal visible o externa. Cada uno de los sacramentos requiere un elemento externo. Agua en el bautismo; pan y vino en la Cena del Señor. El que recibe estos signos externos recibe el sacramento, pero no todo el ni la parte más importante, a menos que llene las condiciones requeridas.
2.  La gracia interna y espiritual que lo acompaña. Un signo o símbolo externo señala e inclina nuestra atención a lo que significa y este es el lado interno del sacramento. Este significado puede ser «La justicia que es por la fe», Rom. 4:11. El perdón de los pecados. Marcos 1:14. Arrepentimiento y fe, Marcos 1:4; 16:16, o «Comunión con Cristo en su muerte y resurrección», Rom. 6:3, 4; Col. 2:11, 12.
3. La unión entre el signo y lo que significa. Esto último constituye realmente la esencia del sacramento. Cuando el sacramento es recibido con fe, la gracia de Dios lo acompaña. El sacramento puede ser definido de este modo: Es una ordenanza santa, instituida por Cristo, en la cual la gracia de Dios en Cristo es representada por medio de signos sensibles, siendo sellada y aplicada a los creyentes, quienes a su vez expresan por medio de ellos su fe y obediencia a Dios.
EL NÚMERO DE LOS SACRAMENTOS
En el tiempo del Antiguo Testamento había sólo dos sacramentos, la circuncisión y la Pascua. El primero fue instituido en días de Abraham y el último en tiempos de Moisés. Ambos eran sacramentos sangrientos, en armonía con la dispensación del Antiguo Testamento. La Iglesia del Nuevo Testamento tiene también dos sacramentos, que son: El bautismo y la Cena del Señor; ambos no sangrientos.
Después que Cristo realizó su perfecto sacrificio ya no es necesaria la efusión de sangre. La Iglesia Romana ha ampliado el número de sacramentos, sin razón bíblica para ello, añadiendo la confirmación, la penitencia, el orden, el matrimonio y la extremaunción.

COMPARACIÓN ENTRE LOS SACRAMENTOS DEL ANTIGUO Y DEL NUEVO TESTAMENTO

La Iglesia de Roma sostiene que hay una diferencia esencial: Dicen que los antiguos eran simplemente típicos y afectaban tan sólo a la situación legal del recipiente y no a su condición espiritual, dependiendo su efectividad de la fe de aquellos que lo realizaban; mientras que los del Nuevo Testamento conceden gracia espiritual a los corazones de los que los practican, sea cual fuere su condición espiritual, simplemente en virtud de una eficacia sacramental. Nosotros creemos que no hay diferencia esencial con aquéllos, no existiendo la gracia sacramental «ex-opereoperato», Romanos 4:11; 1a Cor... 5:7; 10:1-4; Col. 2:11. Sin embargo, hay algunas diferencias de carácter dispensacional.
1. Los sacramentos del Antiguo Testamento tenían un aspecto nacional en adición a su significado espiritual.
2. Aquellos señalaban adelante, al sacrificio de Cristo que había de venir, mientras que los del Nuevo Testamento señalan atrás, al completo sacrificio realizado.
3. Aquellos no proporcionaban al recipiente una medida tan rica de gracia espiritual como lo hacen los sacramentos del Nuevo Testamento.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

LA PALABRA DE DIOS COMO MEDIO DE GRACIA
1. Rom. 10: 17. «Luego, la fe es por el oír y el oír por la Palabra de Dios.
2. 1. a Cor... 1:18. «Porque la Palabra de la cruz es locura a los que se pierden, mas no a los que se salvan, es a saber a nosotros es potencia de Dios».
LA DOBLE FUNCIÓN DE LA LEY
1. Rom. 3:20. «Porque por las obras de la ley ninguna carne se justifica delante de El; porque por la ley es el conocimiento del pecado».
2. Rom. 7:7. « ¿Qué pues diremos? ¿La Leyes pecado? En ninguna manera, empero yo no conocí el pecado sino por la Ley, porque tampoco conocí la concupiscencia, si la ley no dijera: no codiciarás».
3. 1a Juan 5:3. «Porque este es el amor de Dios, que guardemos sus mandamientos, y sus mandamientos no son penosos».
LA FUNCIÓN DEL EVANGELIO
1. Romanos 1:16. «Porque no me avergüenzo del Evangelio, porque es potencia de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente y también al griego».
2. 1 Cor... 1:18. (Citado arriba en punto a).
EL SIGNIFICADO ESPIRITUAL DE LOS SACRAMENTOS
1. Rom. 4:11. «Y recibió la circuncisión por señal, por sello de la justicia de la fe que tuvo en la circuncisión».
2. 1a Cor... 5:7. «Pues nuestra Pascua que es Cristo fue sacrificada por nosotros».
3. Col. 2:12. «Sepultados juntamente con él en el bautismo, en el cual también resucitasteis Con él, por la fe de la operación de Dios que le levantó de los muertos».
4. Juan 6:51. «Yo soy el pan vivo que he descendido del cielo; si alguno comiere de este pan vivirá para siempre, y el pan que yo daré es mi carne la cual yo daré por la vida del mundo».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Es la Ley también una regla de conducta para los creyentes del Nuevo Testamento? Mat. 5:17-19; Rom. 13:10; Ef. 6:2; Santo 2:8-11; 1.a Juan 3:4; 5-3.
2. ¿Puede usted probar que los sacramentos son solamente para los creyentes y su descendencia? Gén. 17:10; Éx. 12:43-45; Marc. 16:16; Hech. 2:39; 1.a Cor. 11:28-29.
3. ¿Qué disputa se levantó en la Iglesia primitiva acerca de la circuncisión? Hech. 15; Gál. 2:3-9.
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Qué significa la expresión «medios de gracia»?
2. ¿Qué queremos significar cuando hablamos de la «Palabra de Dios como medio de Gracia»?
3. ¿Por qué es la Palabra el más importante medio de gracia?
4. ¿Cuál es la relación entre la Palabra y el Espíritu?
5. ¿Cuál es la función de la Ley como medio de gracia?
6. ¿Cuál es la función del Evangelio?
7. ¿Cómo se relacionan los sacramentos con la Palabra de Dios?
8. ¿En qué se diferencia la Palabra de Dios de los sacramentos, como medio de gracia?
9. ¿Qué es un sacramento?
      10. ¿Cuáles son las partes que componen un sacramento?
      11. ¿Qué es el símbolo externo en cada uno de los sacramentos?
      12. ¿Qué hecho significa cada uno de ellos?
      13. ¿Cómo se relacionan la señal y la cosa significada en cada uno de los sacramentos?

LECCIÓN: 26

EL BAUTISMO CRISTIANO

Cristo instituyó el bautismo después de su resurrección, Mat. 28:19; Marc. 16:16, y encargó a sus discípulos bautizar a los que se hicieran discípulos «en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo», esto es, en nombre de la Trinidad. Aun cuando El no se propuso prescribir una fórmula, la Iglesia ha escogido las palabras de la institución. La fórmula actual está en uso desde principios del segundo siglo. Los protestantes consideran legítimo el bautismo administrado por un ministro del Evangelio debidamente nombrado por una Iglesia, y en el nombre del «Dios Trino».
Los Católico-Romanos, considerando el bautismo como absolutamente indispensable para la salvación, permiten sea administrado, en caso de peligro de muerte, por quienes no son sacerdotes, particularmente por las comadronas.

EL MODO PROPIO DEL BAUTISMO

Los bautistas no solamente sostienen que el modo propio del bautismo es por inmersión, sino que afirman que la inmersión es esencial. Para ellos el bautismo administrado de otra manera no es bautismo. Sostienen que la idea fundamental del bautismo es la muerte y resurrección con Cristo, Rom. 6:3-6; Col. 2: 12, y que esto es expresado simbólicamente tan sólo por medio de la inmersión.
Pero la Escritura enseña claramente que la idea esencial en el símbolo del bautismo es la purificación, Ezeq. 36:25; Juan 3:25-26; Hech (22:16; Tito. 3:5; Heb. 10:22; 1 Pedro 3:21, y esto puede ser simbolizado tanto por la aspersión como por la inmersión, Lev. 14:7; Núm. 8:7; Ezeq. 36:25; Heb. 9:19-22; 10:22. Por consecuencia el modo del bautismo no es cuestión material; puede ser administrado por inmersión, pero también por rociamiento o aspersión. Los bautistas afirman que el Nuevo Testamento solamente aprueba el bautismo por inmersión, pero no pueden probar su argumento.
Jesús no prescribió una forma determinada de bautismo, y la Biblia no determina ninguna forma particular. La palabra «baptizo» empleada por Jesús, no significa necesariamente sumergir, sino que significa también purificar por medio de lavamiento. No hay un solo caso de bautismo mencionado en el Nuevo Testamento en el cual sea absolutamente seguro que fue administrado por inmersión.
Es muy improbable que las multitudes que acudieron a Juan el Bautista y los tres mil que creyeron el día de Pentecostés fueran bautizadas de este modo. Ni es muy presumible que fue aplicado de este modo en los casos que se mencionan en Hechos, 9:18; 10:47 y 16:33-34.

LOS SUJETOS APTOS PARA EL BAUTISMO

Hay dos clases de personas a quienes es aplicado el bautismo, adultos y niños.

EL BAUTISMO DE ADULTOS

El propósito del bautismo fue para los adultos y sus descendientes. En las palabras de la institución Jesús pensaba indudablemente en el bautismo de los adultos en primer lugar, pues era solamente con éstos que los discípulos podían empezar su labor misionera. Su instrucción implica que el bautismo tenía que ser precedido por una profesión de fe, Marcos 6:16. El día de Pentecostés los que recibieron la Palabra predicada por Pedro fueron bautizados, Hechos 2:41, véase también 8:37 y 16:31-34.
La Iglesia debe requerir una profesión de fe a todos los adultos que piden el bautismo. Cuando se hace tal confesión ha de ser aceptada por la Iglesia como verdadera, a menos que existan buenas razones para dudar de la sinceridad del profesan te.

EL BAUTISMO INFANTIL

Los bautistas niegan el bautismo infantil porque los niños no pueden ejercer fe, y a causa de que el Nuevo Testamento no contiene ningún mandato de bautizar niños, ni presenta un solo ejemplo de tal clase de bautismo. Sin embargo, esto no prueba de que no sea bíblico.
1. LA BASE ESCRITURAL PARA EL BAUTISMO INFANTIL.
El bautismo infantil no se basa en ningún pasaje de las Escrituras, sino en una serie de consideraciones. El Pacto hecho con Abraham era un pacto espiritual, aunque también tenía un aspecto nacional. Rom. 4:16, 18; Gál. 3:8, 9, 14. Este pacto todavía está en vigor, y es esencialmente el mismo que el «Nuevo Pacto» de la dispensación presente. Rom. 4:13-19; Gál. 3:15-18; Heb. 6: 13-18.
Los niños participaban de las bendiciones del Pacto, recibían el signo de la circuncisión y eran reconocidos como parte de la congregación de Israel. 2. a Cor. 20:-3; Joel. 2:16. En el Nuevo Testamento la circuncisión es sustituida por el bautismo, como signo y señal de entrada en el Pacto, Hech. 2:39; Col. 2:11, 12. El «Nuevo Pacto» es presentado en la Escritura como más generoso que el Antiguo, Is. 54:13; Jer. 31:34; Heb. 8:11, y por lo tanto difícilmente excluiría a los niños. Esto es también improbable en vista de pasajes como Mat. 19:14; Hech. 2:39; La Cor... 7:14. Además, leemos que familias enteras fueron bautizadas y es poco probable que en tales familias no hubiera niños, Hech. 16:15; 16:33; 1.a Cor. 1:16.
2. EL FUNDAMENTO Y EFICACIA DEL BAUTISMO INFANTIL.
En los círculos reformados algunos sostienen la teoría de que los niños son bautizados sobre la base de una regeneración presuntiva, o sea sobre la suposición (no la seguridad de que ellos son ya regenerados. Otros afirman que son bautizados sobre la base del Pacto de la promesa de Dios, que comprende también a ellos y por lo tanto ello significa una promesa de regeneración. Este último punto de vista parece preferible. La promesa del Pacto es la única cosa que ofrece una base objetiva para el bautismo de los niños, pero surge la cuestión: ¿Cómo puede obrar el bautismo, como medio de Gracia y fortificar una vida espiritual que todavía no existe?
La respuesta es que, puede fortificar la vida regenerada si ya existe en el niño, y asimismo, más tarde su fe, cuando el significado del bautismo pueda ser más claramente comprendido. Su eficacia no se limita necesariamente al momento mismo de su administración:

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

LA INSTITUCIÓN DEL BAUTISMO
1. Mateo 28:19. «"Por tanto id y doctrinad a todos los gentiles, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo».
2. Marcos 16:15 y 16. «Id por todo el mundo y predicad el Evangelio a toda criatura, el que creyere y fuere bautizado será salvo; mas el que no creyere será condenado».
EL BAUTISMO COMO UN SÍMBOLO DE PURIFICACIÓN
1. Hechos 22:16. « ¿Por qué te detienes? Levántate, bautízate y lava tus pecados invocando su nombre».
2. 1a Pedro 3:21. «A la figura de la cual el bautismo que ahora corresponde nos salva (no quitando las inmundicias de la carne, sino como demanda de una buena conciencia delante de Dios), por la resurrección de Jesucristo».
LA SUBSTITUCIÓN DEL BAUTISMO POR LA CIRCUNCISIÓN. LA APLICACIÓN PERMANENTE DEL PACTO DE ABRAHAM
1. Colosenses 2:11-12. «En el cual también sois circuncidados de circuncisión, no hecha con manos, con el despojamiento del cuerpo de los pecados de la carne, en la circuncisión de Cristo; sepultados juntamente con él en el bautismo, en el cual también resucitasteis con El, por la fe de la operación de Dios que lo levantó de los muertos».
2. Rom. 4:16. «Por tanto es por la fe, para que sea por gracia; para que la promesa sea firme a toda simiente, no solamente al que es de la Ley, mas también al que es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros».
3. Gál. 3:29. «Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente la simiente de Abraham sois, y conforme a la promesa los herederos».
INCLUSIÓN DE LOS NIÑOS EN LA IGLESIA DEL NUEVO TESTAMENTO
1. Mat. 19:14. «Y Jesús dijo: Dejad a los niños y no les impidáis de venir a Mí, porque de los tales es el Reino de los Cielos».
2. Hech. 2:39. «Pues para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos y para los que están lejos, para todos cuantos el Señor nuestro Dios llamare».
3. 1. a Cor. 7:14. «Pues el marido no creyente es santificado en la esposa, y la esposa no creyente es santificada en el marido creyente; de otro modo vuestros hijos serían inmundos, empero ahora son santos».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. ¿Prueban los siguientes pasajes que los discípulos no usaban la fórmula trinitaria en el bautismo? Hechos 2:38; 8:16; 10:48; 19:5.
2. ¿Cómo puede compararse el significado espiritual del bautismo con el de la circuncisión? Véase Deut. 30:6; Jer. 4:4 con Hechos 2:38 y 22:16.
3. ¿Puede usted probar que la circuncisión fue abolida en el Nuevo Testamento? Hechos 15; Gal. 2:3; 5:2,3; 5:22, 3; 6:12,13.
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Cuándo instituyó Cristo el bautismo?
2. ¿Cuál es el significado del bautismo al practicarse en el nombre de alguien?
3. ¿Las palabras de Cristo significan una fórmula?
4. ¿Qué cosa consideran los bautistas esenciales en el simbolismo del bautismo?
5. ¿Cuál es la cosa verdaderamente esencial?
6. ¿Prescribió Cristo algún modo de bautizar?
7. ¿Puede la inmersión ser probada de un modo indubitable por las Escrituras?
8. ¿Quiénes son los administradores propios para el bautismo?
9. ¿Cuál es el punto de vista de Roma?
  10. ¿Cuál es la condición indispensable para bautizar un adulto?
  11. ¿Puede el bautismo infantil ser probado por la Escritura?
  12. ¿Qué puntos de vista existen acerca del fundamento del bautismo infantil?
  13. ¿Cuál de ellas debe ser preferida, y por qué?
  14. ¿Cómo puede el bautismo infantil ser un medio de gracia?

LECCIÓN: 27

LA CENA DEL SEÑOR

La Cena del Señor fue instituida en ocasión de la Pascua, poco antes de la muerte de Jesús. Mat. 14:22, 25; Luc. 22:19, 20; 1 Cor... 11:23-25. El nuevo sacramento estaba unido en su parte esencial con la comida de la Pascua. El pan que se comía juntamente con el cordero, fue consagrado a un nuevo uso y asimismo el vino de la tercera copa, que se llama «la copa de bendición».
El pan partido simbolizaba el cuerpo destrozado del Señor, y el vino su Sangre derramada. El hecho material de comer y beber significaba una apropiación espiritual de los frutos del sacrificio de Cristo; y el sacramento entero es un constante recuerdo de su muerte redentora.

LA CENA DEL SEÑOR COMO SEÑAL Y SELLO

Como todo sacramento, la Cena del Señor es ante todo una señal. No solamente en cuanto a los elementos visibles del pan y el vino, sino en la acción misma de participar de ella. Es una representación simbólica de la muerte del Señor. 1 Cor. 11:26 y simboliza la participación del creyente en el Cristo crucificado y en la vida y fortaleza que proceden del resucitado Redentor. Además de esto, es un acto de profesión de fe por parte de los que participan.
Con este acto expresan su fe en Cristo como su Salvador y su homenaje a él como Rey. Pero la Cena del Señor, más que símbolo es también un sello de aquello que significa, y una promesa de su realización. Da a los creyentes la seguridad de que son objeto del gran amor de Cristo revelado en su sometimiento a una muerte amarga y vergonzosa, y es una garantía de que todas las promesas del Pacto y todas las riquezas del Evangelio, son suyas; no solamente en esperanza, sino como actuales poseedores de ellas.

LA PRESENCIA DE CRISTO EN LA CENA DEL SEÑOR

Esta cuestión ha sido largamente debatida y constituye todavía la mayor diferencia de opinión entre los cristianos. Cuatro puntos de vista merecen nuestra consideración.
EL PUNTO DE VISTA DE ROMA.
La Iglesia Romana concibe la presencia de Cristo en la Cena del Señor en un sentido físico. Sobre la base de las palabras de Jesús «Este es mi cuerpo», sostiene que el pan y el vino son cambiados o transubstanciados en el cuerpo y la sangre de Cristo, aunque continúen con la apariencia y gusto de pan y vino. Esta opinión es empero susceptible a diversas objeciones:
1. Estando Jesús en carne ante sus discípulos, no podía decir que tenía su cuerpo en su propia mano
2. La Escritura habla del pan como pan, después del supuesto cambio. 1.a Cor... 10 :17; 11 :26-18
3. Es contrario al sentido común creer que lo que aparece, huele y tiene el gusto de pan y de vino es sangre y carne.
EL PUNTO DE VISTA LUTERANO
Los luteranos sostienen que aun cuando el pan y el vino permanecen tal como son, la persona entera de Cristo, con su cuerpo y sangre están presentes en, bajo, y juntamente con tales elementos. Cuando Cristo tenía el pan en su mano, sostenía su cuerpo juntamente, y por lo tanto podía decir «esto es mi cuerpo».
Todo aquel que recibe el pan recibe el cuerpo de Cristo, sea creyente o no. Esta opinión aventaja, no mucho a la doctrina Católica-romana, Y atribuye a las palabras de Jesús el significado poco natural de «esto acompaña mi cuerpo». Además, requiere la noción imposible de que el cuerpo, no solamente el espíritu de Cristo, es omnipresente.
EL PUNTO DE VISTA ZWINGLIANO
Zwinglio negaba la presencia corporal de Cristo en la Cena del Señor, pero admitía que El se halla espiritualmente presente en los elementos, en virtud de la fe de los creyentes. Algunas de sus afirmaciones, sin embargo, parecen indicar que también veía en ello un seno o promesa de lo que Dios hace para el creyente en Cristo.
EL PUNTO DE VISTA DE CALVINO
Calvino adoptó una posición intermedia: Enseñó que la presencia de Cristo en la Cena del Señor en vez de física y local es de carácter espiritual, distinguiéndose de Zwinglio, puso mayor énfasis en el significado más profundo del sacramento; vio en él un sello y promesa de lo que Dios hace para el creyente, más bien que una simple promesa de consagración por parte del creyente a Dios. Las virtudes y efectos del sacrificio de Cristo sobre la cruz están presentes de un modo espiritual y son transmitidos a los creyentes por el poder del Espíritu Santo.

LAS PERSONAS PARA QUIENES LA CENA DEL SEÑOR ES INSTITUIDA

La Cena del Señor no fue instituida para todos indistintamente, sino tan sólo para los creyentes que comprenden su significado espiritual. Los niños que no han negado a la edad del discernimiento no son aptos para participar de ella. Aun verdaderos creyentes pueden hallarse en tal condición espiritual que no pueden tomar su lugar dignamente en la Mesa del Señor y deberían por tanto examinarse a sí mismos cuidadosamente, antes de hacerlo. 1ª Cor. 11:28-32.
Los no creyentes se hallan naturalmente excluidos de la Cena del Señor. La gracia que se recibe en el sacramento no difiere de la que se recibe por medio de la Palabra. El sacramento intensifica empero la efectividad de la Palabra y la medida de gracia recibida. El goce de sus beneficios espirituales depende de la fe del participante.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

LA INSTITUCIÓN DE LA CENA DEL SEÑOR. LA CENA DEL SEÑOR COMO SEÑAL Y SELLO
1. 1ª Cor... 11:23-27. «Pues yo recibí del Señor lo que también os he enseñado, que el Señor Jesús la noche que fue entregado tomó pan y habiendo dado gracias lo partió y dijo: Esto es mi cuerpo, que es dado por vosotros, haced esto en memoria de Mí. Asimismo tomó también la copa después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre: haced esto cuantas veces lo bebiereis en memoria de Mí; pues cuantas veces comiereis este pan y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que El venga».
2. Mat. 26:26, 27. «y comiendo ellos Jesús tomó pan y habiendo dado gracias lo partió y lo dio a los discípulos diciendo: Tomad, comed esto es mi cuerpo. Asimismo tomó la copa y habiendo dado gracias la dio a ellos diciendo, bebed de él todos: pues esto es mi sangre del Nuevo Pacto la cual es derramada por muchos para la remisión de pecados».
3. 1ª Cor. 10:16. «La copa de bendición que bendecimos ¿no es la comunión de Cristo? ¿El pan que partimos no es la comunión del cuerpo de Cristo?»
LA CENA DEL SEÑOR COMO ACTO DE PROFESIÓN. NECESIDAD, DE PROPIO EXAMEN PARA PARTICIPAR DIGNAMENTE.
1. 1ª Cor. 11:26. «Pues todas las veces que comiereis este pan y bebiereis de esta copa la muerte del Señor anunciáis hasta que El venga.
2. 1ª Cor. 11:27-29. «Por lo tanto, cualquiera que comiere del pan o bebiere de la copa del Señor indignamente será culpado del cuerpo y de la sangre del Señor; por tanto pruébese cada uno a sí mismo y coma así de aquel pan y beba de aquella copa, porque el que come y bebe, juicio come y bebe para sí, no discerniendo el cuerpo».
PARA ESTUDIO BÍBLICO ADICIONAL
1. Las palabras de Jesús en Juan 6:48-58, ¿tienen referencia a la Cena del Señor?
2. ¿La expresión «romper el pan» se refiere necesariamente a la Cena del Señor? Hechos 2:42, 20; 7:20, 7,11; 27:35; 1.a Cor... 10:16.
3. ¿Puede usted mencionar otros casos en los cuales el verbo «ser» no puede ser tomado literalmente? Juan 10:7; 11:25; 14:6; 15:1.
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿En qué sentido es una señal la Cena del Señor?
2. ¿Qué significa el sacramento y en qué sentido es un sello?
3. ¿Cuál es el punto de vista Católico-romano acerca de la presencia de Cristo en la Cena del Señor?
4. ¿Cómo lo conciben los luteranos?
5. ¿Qué objeciones pueden hacerse a estos puntos de vista?
6. ¿Cuál es el concepto Zwingliano de la Cena del Señor?
7. ¿En qué difiere el concepto de Calvino?
8. ¿Cómo concibe Calvino la presencia del Señor?
9. ¿En qué difiere la gracia que se recibe por este sacramento con la que se recibe por medio de la Palabra?
        10. ¿Para quién fue instituida la Cena del Señor?
        11. ¿Quiénes deben ser excluidos de la Mesa del Señor?

LECCIÓN: 28

LA MUERTE FISICA Y EL ESTADO INTERMEDIO

LA MUERTE FÍSICA, ES REPRESENTADA DE VARIAS MANERAS EN LA SAGRADA ESCRITURA

Se habla de ella como muerte del cuerpo, distinguiéndola de la del alma, Mat. 10:28; Luc. 12:4, como de la terminación o pérdida de la vida física o animal, Luc. 6:9; Juan 12:25, y como separación del alma del cuerpo, Ecle. 12:7; Santiago 2:26. Nunca se la menciona como aniquilación, sino como término de la vida física por la separación de cuerpo y alma. Los Pelagianos y Socinianos, enseñan que el hombre fue creado mortal, pero esto no está en armonía: con la Escritura, la cual nos enseña que la muerte es resultado y castigo del pecado. Gén. 2: 17; 3: 19; Rom. 5: 12, 17; 6:23.
En vez de ser algo natural, la muerte es una expresión de la cólera divina) Sal. 90:7, 11; es un juicio divino, Rom. 1:32, una condenación del pecado, Rom. 5:16 y una maldición, Gál. 3:13, que llena los corazones de los hombres de miedo y temor. Pero puesto que la muerte es el castigo del pecado, y los creyentes son redimidos de la culpabilidad del pecado, surge naturalmente esta pregunta, ¿por qué pues han de morir? Está claro que para ellos la muerte no significa un castigo, sino que ha de ser considerada como un importante elemento en el proceso de santificación y glorificación. Es la consumación de su morir al pecado.

EL ESTADO INTERMEDIO

Difieren mucho las opiniones respecto a la condición del ser humano entre la muerte y la resurrección general. Las teorías más importantes merecen un breve comentario aquí.

LA IDEA MODERNA DEL SHEOL-HADES

La idea que más prevalece hoy día es que al morir los piadosos como los impíos, descienden a un lugar intermedio que el Antiguo Testamento llama Sheol, y el Nuevo Testamento Hades. N o es un lugar de recompensa ni de castigo, sino un sitio donde todos participan de la misma suerte. Una mansión triste, donde la vida es tan sólo un débil reflejo de la vida sobre la tierra, un lugar de consciencia debilitada, de soporífera inactividad, donde la vida ha perdido su interés, y los goces del vivir se convierten en tristeza.
Pero esto es una representación poco espiritual del Hades. Si  los términos Sheol y Hades se refieren a un lugar al cual descienden tanto los píos como los impíos, ¿cómo sería tal lugar objeto de advertencia a los impíos? Salmo 9:17, Prov. 5:5; 7:27; 9:18; 15:24; 23:14. ¿Y cómo puede la Escritura hablar de la ira de Dios ardiendo en tal lugar? Deut. 32:22. Fue en el Hades que el rico alzó sus ojos, Lucas 16:23, y se le llama «lugar de tormento», ver 28.
Es pues mucho mejor suponer que las palabras Sheol y Hades, no son usadas siempre en la Escritura en el mismo sentido; sino que algunas veces significan la tumba, Gén. 43:28, Salmo 16:10. Otras veces, el estado o condición de los muertos expresado como un lugar, 1.a Sam. 2:6 y Salmo 89:48, mientras que otras veces se usa esta expresión para referirse al castigo eterno, Deut. 32:22; Salmo 9: 17 y Prov. 9:18.
EL PURGATORIO
El Limbus Patrum y el Limbus Infantum. Según la Iglesia de Roma, las almas de aquellos que son perfectos al llegar la muerte, son admitidas en el Cielo, Mat. 25 46 y Fil. 1: 23, pero aquellos que no son perfectamente limpios al llegar la muerte -y esta es la condición de la mayoría de los creyentes- entran en un lugar de purgación llamado Purgatorio. La duración de su estancia varía según cada caso individual, Y puede ser acortada por las oraciones, buenas obras Y misas pagadas por amigos o parientes piadosos. Esta doctrina no tiene apoyo en la Escritura.
El Limbus Patrum, es otro lugar donde según Roma, los santos del Antiguo Testamento estuvieron detenidos hasta que Cristo los libertó entre su muerte y su resurrección. El Limbus Infantum es la supuesta morada de todos los niños no bautizados. Estos quedan allí sin ninguna esperanza de liberación, sin sufrir ciertamente ninguna clase de castigo, pero excluidos de las bendiciones del cielo. Ninguna de estas opiniones tiene apoyo en la Escritura.

EL SUEÑO DE LAS ALMAS

La idea de que por la muerte entran las almas a un estado de reposo inconsciente fue defendida por varias sectas en tiempos pasados, y es ahora la doctrina favorita de los Irvingitas de Inglaterra, Y de los Rusellistas Y Adventistas de nuestros días. Citan en su apoyo las frases de la Escritura que hablan de la muerte como un sueño. Mat. 9:24; Hechos 7:60; 1.a Tes. 4:13, o donde parece decir que los muertos son inconscientes, Sal. 6:5; 30:9; 115:17; 146: 4.
Pero los primeros textos se refieren a la muerte como un sueño, por la semejanza que hay entre un cuerpo muerto y uno que duerme, y los últimos tratan simplemente de hacer hincapié en el hecho de que los muertos no pueden tomar parte en las actividades del mundo presente; en cambio se dice de los creyentes que gozan de una vida consciente inmediatamente después de la muerte, Lucas 16:19-31; 24:43; 2.a Cor. 5:8; Fil. 1:23; Apoc.6:9.

LA ANIQUILACIÓN Y LA INMORTALIDAD CONDICIONAL

Según estas doctrinas no hay existencia consciente después de la muerte, ni habrá existencia de ninguna manera para los impíos. El aniquilacionismo enseña que el hombre fue creado inmortal, pero que los que continúan en pecado se hallan desposeídos del don de la inmortalidad. Y serán finalmente destruidos o dejados para siempre en un estado de inconsciencia. Según la doctrina de la inmortalidad condicional, el hombre fue creado mortal Y sólo los creyentes reciben el don de la inmortalidad en Cristo.
Los impíos perecerán completamente, o perderán todo estado de conciencia. Se pretende hallar apoyo para estas doctrinas en el hecho de que la Biblia presenta la vida eterna como un don de Dios en Cristo, Juan 10:27, 28; Rom. 2:7; 6:23 y amenaza a los pecadores con la muerte y la destrucción, Salmo 73:27; Mal. 4:1; 2.a Pedro 2:12. Pero la Biblia claramente enseña que los pecadores continuarán existiendo, Mat. 25:46; Apoc. 14:11; 20:10, y que habrá grados de castigo para los impíos, Luc. 12:47, 48; Rom. 2:12.

LA TEORÍA DE UNA SEGUNDA PRUEBA

Algunos teólogos sostienen la idea de que los que mueren en sus pecados tendrán otra oportunidad de aceptar a Cristo después de la muerte. Nadie perecerá -dicen sin haberle sido ofrecida la oportunidad favorable de conocer y aceptar a Cristo Jesús. Apelan para ello a pasajes como Ef. 4:8 y 9; 1.a Cor... 15:24, 28; Fil. 2:9, 11; Col. 1:19 y 20; 1 Pedro 3:19; 4:6. Pero estos textos no prueban semejante idea. Por otra parte, la Escritura presenta el estado de los no creyentes después de la muerte como un estado fijo, que no puede ser alterado, Ecle. 11: 3; Luc. 16:19-31; Juan 8:21, 24; 2.a Pedro 2:4, 9; Judas 7:13. Su juicio depende de lo que hicieron estando en la carne, Mat. 7:22, 23; 10:32,33; 25:24-36; 2 Cor. 5: 2, 10; 2A Tes. 1: 8.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

QUE LA MUERTE ES EL CASTIGO DEL PECADO
1. Rom. 5:12. «Por lo tanto, así como el pecado entró en el mundo por un hombre, y con el pecado la muerte; y la muerte pasó a todos los hombres, pues que todos pecaron».
2. Rom. 6:23. «Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor Nuestro».
QUE EL SHEOL-HADES, ES EN ALGUNOS CASOS UN LUGAR DÉ CASTIGO
1. Salmo 9:16. «Los malos serán trasladados al Sheol y todas las gentes que se olvidan de Dios».
2. Prov. 15:24. «El camino de la vida es hacia arriba al entendido, para apartarse del Sheol abajo».
3. Lucas 16:23. «y en el Hades alzó sus ojos estando en los tormentos».
QUE LOS CREYENTES ESTÁN CON CRISTO INMEDIATAMENTE DESPUÉS DE SU MUERTE
1. 2ª Cor... 5:8. «Mas confiamos, y más quisiéramos partir del cuerpo y estar presentes al Señor».
2. Fil. 1:23. «De ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de ser desatado y estar con Cristo, 10 cual es mucho mejor».
QUE LOS INCRÉDULOS CONTINUARÁN EXISTIENDO DESPUÉS DE LA MUERTE
1. Mat. 25:46. «E irán estos al tormento eterno y los justos a la vida eterna».
2. Lucas. 12:47-48. «Porque el siervo que entendió la voluntad de su Señor, y no se apercibió, ni hizo conforme a su voluntad, será azotado mucho, mas el que no entendió e hizo cosas dignas de azotes será azotado poco porque a cualquiera que fue dado mucho, mucho será vuelto a demandar de él, y al que encomendaron mucho, más le será pedido».
3. Apoc. 14:11. «y el humo del tormento de ellos sube para siempre jamás. Y los que adoran a la bestia y a su imagen no tienen reposo ni día ni noche, ni cualquiera que tomare la señal de su nombre».
QUE NO HAY ESCAPE DESPUÉS DE LA MUERTE
1. Lucas 16:26. «Y además de todo esto, una grande sima que está constituida, entre nosotros y vosotros, que los que quisieren pasar de aquí a vosotros no pueden, ni de allá pasar acá».
2. 2ª Pedro 2:9. «Sabe el Señor librar de tentación a los píos, y reservar a los injustos para ser atormentados en el día del juicio».
PARA ESTUDIO BIBLICO ADICIONAL
1. ¿Qué enseñan los siguientes pasajes respecto de la muerte? 1 Cor... 15:55-57; 2.a Tim. 1:10; Rev. 1:18; 20:14.
2. ¿Enseñan los siguientes pasajes la doctrina del purgatorio? Isa. 4:4; Mique. 7:8; Zac. 9:11; Mal. 3:2; Mat. 12:32; 1.a Cor... 13:15.
3. ¿La promesa de Jesús al ladrón moribundo se adapta a la doctrina del sueño de las almas? Lucas 23:43.
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Cómo se representa la muerte física en las Sagradas Escrituras?
2. ¿Cómo puede usted probar que la muerte no es algo natural?
3. ¿Cuál es la relación entre el pecado y la muerte?
4. ¿Es la muerte un castigo para los creyentes? ¿A qué propósito sirve?
5. ¿Cuál es la idea moderna del Sheol-Hades?
6. ¿Qué objeciones haya esta teoría?
7. ¿Qué denotan estos términos en las Sagradas Escrituras?
8. ¿En qué se diferencian las doctrinas de la aniquilación y de la inmortalidad condicional?
9. ¿Cuál es la supuesta base para ellas en las Sagradas Escrituras?
      10. ¿Cómo puede usted combatirlas?
      11. ¿Qué es la doctrina Católica-Romana acerca del Purgatorio, el Limbo de los Padres y el    Limbo de los infantes?
      12. ¿Qué es la doctrina del sueño de las almas?
      13. ¿Cuál es la supuesta base espiritual para esta doctrina?
      14. ¿Cómo la refutaría usted?
      15. ¿Cuál es la doctrina de la segunda prueba?
      16. ¿Sostiene o contradice la Sagrada Escritura dicha doctrina?

LECCIÓN: 29

LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO

El Nuevo Testamento nos enseña claramente que la primera venida de Cristo ha de ser seguida por una segunda venida. Jesús se refirió a su vuelta más de una vez, Mat. 24:30; 25:19; 26:64; Juan 14:3. Los ángeles llamaron la atención de los apóstoles a este suceso el día de la ascensión. Hechos 1:11, y las epístolas hablan repetidamente del mismo, Fil. 3:20; 1." Tes. 4:15, 16; 2.a Tes. 1:7, 10; Tito 2:13; Heb. 9:28.

ACONTECIMIENTOS QUE PRECEDERÁN LA SEGUNDA VENIDA

Según la Escritura, varios sucesos importantes deben preceder la vuelta de Cristo.
EL LLAMAMIENTO DE LOS GENTILES
El Evangelio del Reino, debe ser predicado a todas las naciones antes de la venida de Cristo, Mat. 24:14; Marc. 13:10; Rom. 11: 25. Esto significa que todas las naciones han de ser de tal modo evangelizado que el evangelio venga a ser un poder en la vida del pueblo, una señal y llamamiento para todos a la decisión.
LA CONVERSIÓN DE LA TOTALIDAD DE ISRAEL
2 Cor. 3:15 y Rom. 11:29, refieren la conversión de Israel, y el pasaje de Romanos parece relacionar este hecho con el fin de los tiempos. Algunos dicen que estos pasajes enseñan que todo Israel como nación finalmente se volverá al Señor. Es más probable empero que la expresión todo Israel de Romanos 11:26, se refiere simplemente al número total de los elegidos del Antiguo y del Nuevo Pacto. El pasaje parece empero dar a entender que gran número del pueblo de Israel se volverá al Señor.
LA GRAN APOSTASÍA Y LA GRAN TRIBULACIÓN
La Biblia enseña repetidamente que al fin de los tiempos habrá un grande desfallecimiento de la fe. La iniquidad crecerá y el amor de muchos se resfriará, Mateo 24:12; 2.a Tes. 2:3; 2.a Tim. 3:1-7; 4:3, 4. La maldad clamará al cielo y traerá como resultado una terrible tribulación «como no ha sido desde el principio del mundo hasta ahora ni será». Mateo 24:21. Si aquellos días no fuesen acortados ninguna carne sería salva; pero serán acortados por causa de los escogidos.
LA VENIDA DEL ANTICRISTO
El espíritu del Anticristo ya estaba en evidencia en la edad apostólica, 1.3 Juan 4 :3, y muchos anticristos habían hecho su aparición, 1.a Juan 2 :18, pero la Biblia nos indica que al final de los tiempos habrá un individuo particular que será la encarnación de toda la maldad, «el hombre de pecado», «el hijo de perdición» que se opone contra todo 10 que se llama Dios o se adora, tanto que se asiente en el templo de Dios como Dios, haciéndose parecer Dios. 2. a Tes., 2:3-4.
SEÑALES Y MILAGROS
La Biblia también se refiere a señales maravillosas que marcarán el principio del fin. Habrá guerras, hambres, y terremotos en diversos lugares, que serán principio de aquellos dolores que tendrán como consecuencia el renacimiento de este universo; habrá portentos en el cielo, porque los poderes de los cielos serán conmovidos. Mat. 24:29, 30; Marcos 13: 24, 25; Lucas 21:25, 26.

LA SEGUNDA VENIDA

Después de estas señales el Hijo del Hombre será visto viniendo en las nubes del cielo.

EL TIEMPO DE SU VENIDA

Algunos creen que la venida de Cristo es inminente y que puede ocurrir ahora, en cualquier momento. Pero la Biblia enseña que los sucesos y señales antes referidas deben preceder su vuelta. Desde el punto de vista de Dios la Segunda Venida está siempre cercana, Hebreos 20:25; Santo 5:9; 1 Pedro 4:5, pero nadie puede determinar el momento exacto, ni aun los ángeles, ni el Hijo del Hombre, Mat. 24:36.

LA MANERA DE SU VENIDA

La misma persona de Cristo volverá. El ya vino espiritualmente el día de Pentecostés, pero volverá corporalmente y podrá ser visto de todos, Mat. 24:30; 26:64; Hech. 1:1; Tito 2:13; Rev. 1:7. Aunque varias señales precederán su venida, tendrá lugar sin embargo de un modo inesperado y sorprenderá a mucha gente. Mat. 24:37-44; 25:1-12; La Tes. 5:2, 3; Rev. 3:3. Será además una venida triunfante y gloriosa. Las nubes del cielo serán su carroza, Mat. 24:30. Los ángeles su cuerpo de guardia, 2.a Tes. 1:7. Los arcángeles sus heraldos, La Tes. 4.16 y los santos de Dios su glorioso cortejo, 1ª Tes. 3:13; 2.a Tes. 1:10.

EL PROPÓSITO DE SU VENIDA

Cristo volverá para introducir la Edad Futura, el estado eterno de todas las cosas, y lo hará por dos sucesos prodigiosos, la Resurrección y el Juicio Final. Juan 5:25-29; Hechos 17:31; Rom. 2:3-16; 2.a Cor... 5:10; Fil. 3:21; La Tes. 4:13-17; 2 Pedro 3:10-13 Apoc. 20:11-15 y 22:12.
LA CUESTIÓN DEL MILENIO
Algunos creen que la Segunda Venida de Cristo será precedida o seguida por un Milenio.
EL POST-MILENIARISMO
Esta teoría enseña que la Segunda Venida de Cristo seguirá al Milenio. El Milenio vendría durante la dispensación del Evangelio en la cual estamos viviendo ahora, y al final Cristo aparecerá. Se espera que el Evangelio venga a ser al fin mucho más efectivo que al presente y producirá un periodo de justicia, paz y ricas bendiciones espirituales. En nuestros días algunos esperan esto como el gran resultado de un simple proceso natural de evolución de la Humanidad. Toda esta idea sin embargo no se adapta con lo que la Biblia nos dice respecto a la gran apostasía que ha de tener lugar al fin de los tiempos.
EL PRE-MILENIARISMO
Cristo restablecerá a su vuelta el reino de David sobre la tierra y reinará en Jerusalén por mil años. Esta teoría se basa en una interpretación literal de los profetas y de Apoc. 20:1-6. Hace del reino Dios un reino terrenal y nacional, mientras que el Nuevo Testamento lo presenta como espiritual y universal, un reino que ya hoy día se halla en existencia, Mat. 11 :12-28, Lucas 17 :21; Juan 18 :36, 37; Col. 1 :13.
El Nuevo Testamento ignora totalmente semejante reinado temporal de Cristo, pero habla de su reinado celestial (Tim. 4:18) y eterno (2.a Pedro 1:11). Además esta teoría trata de apoyarse en un solo pasaje, Apoc. 20:1-6, que presenta una escena en el Cielo, y no hace mención de los judíos ni de un reino nacional y terreno; ni de la tierra de Palestina, como lugar donde Jesús tenga que reinar.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

EL LLAMAMIENTO DE LOS GENTILES
1. Mat. 24:14. «y será predicado este Evangelio de1 Reino en todo mundo por testimonio a todos los gentiles; y entonces vendrá el fin».
2. Rom. 11:25-26. «Porque no quiero, hermanos, que ignoréis este misterio, para que no seáis acerca de vosotros mismos arrogantes, que el endurecimiento en parte ha acontecido en Israel hasta que haya entrado la plenitud de los gentiles; y luego todo Israel será salvo».
LA CONVERSIÓN DE ISRAEL
1. Romanos 11-26. Como puede leerse arriba.
2. 2. Cor. 3:15-16. «y aun hasta el día de hoy cuando Moisés' es leído, el velo está puesto sobre el corazón de ellos. Mas cuando se convirtieren al Señor el velo se quitará».
LA GRAN APOSTASÍA Y LA GRAN TRIBULACIÓN
1. Mat. 24:9-13. «Entonces os entregarán para Ser afligidos y seréis aborrecidos de todas las gentes por causa de mi nombre, y muchos entonces serán escandalizados y se entregarán unos a otros y unos a otros se aborrecerán y muchos falsos profetas se levantarán y engañarán a muchos y por haberse multiplicado la maldad la caridad de muchos se resfriará, mas el que perseverare hasta el fin éste será salvo».
2. Mat. 24:21-22. «Porque habrá entonces grande aflicción, cual no fue desde el principio del mundo hasta ahora ni será. Y si aquellos días no fuesen acortados, ninguna carne sería sa1va; mas por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados».
LA REVELACIÓN DEL ANTICRISTO
1. 2ª Tes. 2:8-9. «Y entonces será manifestado aquel inicuo al cual el Señor matará con el espíritu de su boca y destruirá con el resplandor de su Venida; Aquel cuyo advenimiento es según operación de Satanás con grande potencia y señales y milagros mentirosos».
2. 1ª Juan 2:18-22. «Hijitos, ya es el último tiempo; y como vosotros habéis oído que el Anticristo ha de venir, así también al presente han comenzado a ser muchos anticristos... ¿Quién es mentiroso sino el, que niega que Jesús es el Cristo? Este tal es Anticristo que niega al Padre y al Hijo.
LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO
1. Mat. 24:44. «Por tanto vosotros estad también apercibidos; porque el Hijo del Hombre ha de venir a la hora que no pensáis».
2. Fil. 3:20. «Mas nuestra vivienda es en los cielos; de donde esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo».
3. Tito 2:13. «Esperando aquella esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa del Gran Dios y Salvador nuestro Jesucristo».
PARA ESTUDIO BIBLICO ADICIONAL
1. ¿Cómo explicaría usted los pasajes que hablan de la Venida de Cristo como cercana? Mat. 16:28, 24:34; Hebreos 10:25; Santo 5:9; 1.a Pedro 4:5; 1 Juan 2:18.
2. ¿Quiénes son los falsos Cristos o Anticristos de los cuales habla la Biblia? Mat. 24:24; 1.a Juan 2:18.
3. ¿Qué respondería usted a la idea de que la Segunda Venida de Cristo pertenece al pasado, puesto que El ya volvió en espíritu? Juan 14:18-18.
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Qué grandes sucesos precederán la Segunda Venida de Cristo?
2. ¿En qué sentido deben ser evangelizadas las naciones?
3. ¿Cómo debemos entender la conversión de Israel predicha?
4. ¿Qué es la gran apostasía y la gran tribulación?
5. ¿Qué significa la Biblia cuando habla del Anticristo?
6. ¿En qué sentido ha habido y hay anticristos?
7. ¿Qué señales precederán la Segunda Venida?
8. ¿En qué sentido puede ser considerada cercana?
9. ¿Podemos considerar la Segunda Venida como un hecho del pasado? Si no lo es, ¿por qué?
      10. ¿Cómo puede usted probar que será una venida física y visible?
      11. ¿Cómo puede ser repentina si será precedida de señales?
      12. ¿Qué será el propósito de la vuelta de Cristo?
      13. ¿Cuál es la diferencia entre post y pre-Mileniarísmo?
      14. ¿Qué objeciones hay para cada una de estas teorías?

LECCIÓN: 30

LA RESURRECCION, EL JUICIO FINAL Y EL ESTADO ETERNO

LA RESURRECCIÓN

La Escritura enseña que a la vuelta de Cristo los muertos resucitarán. El Antiguo Testamento habla claramente de ello en Isaías 25:19 y Dan 12:2. El Nuevo Testamento contiene más abundante prueba de esta doctrina, Juan 5:25-29; 20-39, 40, 44; 11:24,25; 1.a Cor. 15; 1.a Tes. 13-17; Rev. 20:13.

EL CARÁCTER DE LA RESURRECCIÓN

La Escritura nos enseña a esperar una resurrección corporal, similar a la resurrección de Cristo. La redención en Cristo incluye el cuerpo, Rom. 8:23; 1.a Cor. 6:13-20. Esta clase de resurrección es enseñada claramente en 1.a Cor. 15; Rom. 8:11. Incluirá tanto a los justos como a los impíos; pero solamente para los primeros será un acto de liberación y de gloria. Para los últimos la reunión de alma y cuerpo tendrá como resultado el castigo de la muerte eterna.

EL TIEMPO DE LA RESURRECCIÓN

Según la Escritura la resurrección general coincidirá con la vuelta de Cristo y el fin del mundo y tendrá lugar inmediatamente antes del Juicio Final, Juan 5 :27-29; 6 :39, 40, 44, 54; 11 :24; 1.a Cor. 15:23; Fil. 3:20, 21; Rev. 20:11-15. Los pre-Milenarios enseñan que tendrá lugar una doble resurrección: la primera de los justos a la vuelta de Cristo, y la de los injustos mil años después, al fin del mundo. Pero la Biblia habla de ambas resurrecciones en una sola palabra, Dan. 12:12; Juan 5:28, 29; Hechos 24:15. Conecta el juicio de los malos con la venida de Cristo, 2.a Tes. 7:10, y coloca la resurrección de los justos en el último día Juan 6:39, 40, 44, 54; 11:24.

EL JUICIO FINAL

La doctrina de la resurrección nos trae directamente al juicio final. La Biblia habla de la venida de este juicio en términos que no ofrecen duda, Salmo 96:31; 98:9; Ecles. 3: 17; 12:24; Mat. 25: 31-46 Rom. 2:5-10; 2.a Cor. 5:10; 2.a Tim. 4: 1; V Pedro 4:5; Rev. 20: 11-14.

EL JUICIO Y SUS OFICIALES

Cristo como mediador será el juez, Mateo 25:31, 32 Juan 5:27; Hechos 10:42, 17:31; Fil. 2:10; V Tim. 4:1. Este honor es conferido a Cristo como recompensa por su obra redentora. Los ángeles serán sus ayudantes, Mat. 13: 41, 42; 24-31; 25: 31, y los santos tendrán también una participación en Su obra judicial, 1 Cor. 6:2, 2; Rev. 20: 4.

QUIÉNES SERÁN JUZGADOS

Según la Escritura es evidente que cada individuo de la raza humana tendrá que aparecer ante el Trono del Juicio. Ec1es. 12:14; Mat. 12:36, 37; 25:32; Rom. 14:10; 2.a Cor. 5:10 Rev. 20:14. Algunos piensan que los justos serán exceptuados, pero esto es contrario a Mat. 13:30, 40-43, 49: 25:31-36; 2." Cor... 5:10. Se dice bien claramente que los demonios también serán juzgados. Mat. 8:29; La Cor. 6:3; 2.a Pedro 2:4; Judas 6.

EL TIEMPO DEL JUICIO

El juicio final será naturalmente al fin del mundo y seguirá de Un modo inmediato a la resurrección de los muertos Juan. 5:28,29; Rev. 20: 12,13. La duración del juicio no puede ser determinada. La Biblia habla del «día del juicio» pero esto no significa necesariamente que será un día de 24 horas. Ni tampoco hay base para asegurar con los pre-Milenarios que será un día de mil años.

LA NORMA DEL JUICIO

La regla por la cual serán juzgados los santos y los pecadores será sin duda la voluntad revelada de Dios. Los gentiles serán juzgados por la ley natural revelada en sus conciencias; los judíos por la revelación del Antiguo Testamento, y los que han tenido acceso a la más plena revelación del Evangelio serán juzgados por su luz. Rom. 12:2; Dios dará a cada uno su merecido.

EL ESTADO ETERNO

El juicio final tendrá como propósito manifestar y fijar claramente el estado final de cada persona.

LA CONDICIÓN FINAL DE LOS IMPÍOS

Los malos serán consignados a un lugar de castigo llamado «infierno». Algunos niegan que el infierno sea un lugar y lo consideran meramente como una condición, pero la Biblia emplea términos de carácter local al describirlo. Nos habla por ejemplo, de un «horno de fuego» Mat. 13: 42, de un «lago de fuego» Rev. 20:14-15 y de una «prisión» 1." Pedro 3:19. Y todo esto son términos de carácter local.
En este lugar los impíos estarán totalmente privados del favor divino, experimentarán una vida de turbación sin fin, sufrirán penas positivas en cuerpo y alma y estarán sujetos a los remordimientos de conciencia, angustia y desesperación, Mat. 8:12-13; Marc. 9: 47, 48; Luc. 16:23,28; Rev. 14:10; 21-8. Habrá grados en su castigo Mat. 11:22-24; Luc. 12:47,48; 20: 47. Es evidente que su castigo será eterno.
Algunos niegan esto porque las palabras originales que se traducen «eterno» y para «siempre» pueden significar simplemente un largo período de tiempo. Sin embargo este no es el significado corriente de tales palabras, y no hay razón para pensar que tengan tal significado al ser aplicados al castigo futuro de 108 malos. Además se usan otros términos que confirman la idea de castigo sin fin, Marc. 9:43,48; Luc. 16:25.

EL ESTADO FINAL DE LOS JUSTOS

El estado final de los creyentes, será precedido por la desaparición del mundo presente y el establecimiento de una nueva creación. No será una nueva creación en el sentido estricto de la palabra, sino más bien una renovación de la creación presente. Sal. 102: 26,27; Heb. 12:26-28. El Cielo será la morada eterna de los creyentes. Algunos piensan que el Cielo es simplemente una condición, pero la Biblia lo presenta claramente como un lugar. Juan 14:2; Mat. 22:12, 13; 25.10-12. Los justos empero no heredarán tan solamente el Cielo, sino la nueva creación entera, Mat. 5:5; Rev. 21:1-3.
El premio de los justos es descrito como «vida eterna» lo cual significa no solamente vida sin fin, sino vida en toda su plenitud, sin ninguna de las imperfecciones y trastornos de la existencia presente. Esta plenitud de vida será gozada en comunión con Dios que es realmente la esencia de la vida eterna. Rev. 21:3. Aun cuando todos gozarán perfecta bendición habrá también grados en los goces del cielo. Dan. 12:3; 2.a Cor. 9,6.

TEXTOS PARA APRENDER DE MEMORIA

UNA RESURRECCIÓN GENERAL
1. Dan. 12:2. «Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna y otros para vergüenza y confusión perpetua».
2. Juan. 5:28-29. «N o os maravilléis de esto, porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz y los que hicieron bien saldrán a resurrección de vida, mas los que hicieron mal a resurrección de condenación».
3. Hechos. 24: 15. «Teniendo esperanza en Dios que ha de haber resurrección de los muertos, así de justos como de injustos, la cual también ellos esperan».
UNA RESURRECCIÓN CORPORAL
1. Rom. 8:11. «Y si el espíritu de Aquél que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó a Cristo Jesús de los muertos vivificará también vuestros cuerpos mortales por su espíritu que mora en vosotros».
2. 1 Cor 15:35. «Pero dirán algunos: ¿Cómo resucitarán los muertos? ¿Con qué cuerpo vendrán? verso 44. Se siembra cuerpo animal, resucitará espiritual cuerpo».
LA RESURRECCIÓN EN EL ÚLTIMO DÍA, O SEA A LA VENIDA DE CRISTO
1. 1 Cor 15:22-23. «Porque así como en Adán todos mueren, así también en Cristo todos serán vivificados, mas cada uno en su orden, Cristo las primicias, luego los que son de Cristo en su venida».
2. 1a Tes. 4:16. «Pues el mismo Señor, descenderá del Cielo con aclamación, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero».
3. Juan. 6:40. «y esta es la voluntad del que me ha enviado: que todo aquel que ve al hijo y cree en El, tenga vida eterna y yo le resucitaré en el día postrero».
EL JUICIO FINAL CON CRISTO COMO JUEZ
1. 2 Cor. 5.10. «Porque es menester que todos nosotros parezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que hubiere hecho por medio del cuerpo, ora sea bueno o malo».
2. 2.a Tim. 4:1. «Requiero yo pues delante de Dios y del Señor Jesucristo que ha de juzgar a los vivos y a los muertos».
3. Apoc. 20:12. «y vi los muertos grandes y pequeños, que estaban delante de Dios, y los libros fueron abiertos y otro libro fue abierto el cual es de la Vida, y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras».
CASTIGOS Y PREMIOS ETERNOS.
1. Mat. 25:46. «E irán éstos al tormento eterno, mas los justos a la vida eterna».
2. Rom. 2:6-8. «El cual pagará n cada uno conforme a sus obras: a los que esperando en bien hacer buscan gloria, honra e inmortalidad, la vida eterna. Mas a los que son contenciosos, y no obedecen a la verdad, antes obedecen a la injusticia, enojo e ira».
3. 2; Tes. 1:9. «Los cuales serán castigados de eterna perdición, por la presencia del Señor y por la gloria de su potencia».
GRADOS DE CASTIGO Y DE RECOMPENSA
1. Daniel. 12:3. «y los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento y los que enseñan la justicia a la multitud como las estrellas a perpetua eternidad».
2. Lucas. 12:47-48. «Porque el siervo que entendió la voluntad de su Señor y no Se apercibió ni hizo conforme a su voluntad, será azotado mucho. Más el que no entendió e hizo cosas dignas de azotes, será azotado poco. Porque a cualquiera que fue dado mucho, mucho será vuelto a demandar de él; Y al que encomendaron mucho, más le será pedido».
3. 2 Cor. 9:6. «Esto empero digo: El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra en bendiciones, en bendiciones también segará».
PARA ESTUDIO BIBLICO ADICIONAL
1. ¿Cómo argumenta Jesús acerca de la resurrección en Mat. 22:23-33?
2. ¿Pone Pablo el juicio de los malos mil años después de la venida de Cristo en 2.a Tes. 1:7-10?
3. ¿El pasaje de 1.a Cor. 6:3, prueba que los ángeles buenos serán también juzgados?
PREGUNTAS PARA REPASO
1. ¿Cómo probaría usted la resurrección corporal por el Nuevo Testamento?
2. ¿Qué prueba bíblica hay de la resurrección de los impíos?
3. ¿Cómo difiere esta resurrección de la de los justos?
4. ¿Qué enseña la Biblia respecto al tiempo de la resurrección?
5. ¿Cómo contradeciría usted la doctrina de una doble resurrección?
6. ¿Qué prueba hay en la Escritura del juicio?
7. ¿Quién será el juez y quienes le ayudarán?
8. ¿Quiénes serán juzgados?
9. ¿Cuándo será el juicio final y cuánto durará?
      10. ¿Por cuál norma serán juzgados los hombres?
      11. ¿En qué consistirá el castigo de los impíos?
      12. ¿Cómo puede usted probar que no tendrá fin?
       13. ¿Será la nueva creación una creación enteramente nueva o una renovación de la antigua?
      14. ¿Qué será la recompensa de los justos?